Chile, ambos candidatos defienden el modelo y promueven la disputa de las promesas, las mentiras y las esperanzas de las capas medias

Generalmente las elecciones muestran el estado de ánimo de las masas, dicen algunos analistas, pero en Chile vivimos una de las vanguardias mundiales de la imposición del modelo capitalista que por medio de la tecnología ha dejado de necesitar a los obreros para hacer funcionar las máquinas procesadoras del mundo natural que es transformado en mercancías para la acumulación de ganancias. Eso ha hecho que los partidos obreros queden reducidos a la más mínima expresión debido a que al igual que los patrones, hoy día dirigen todos su artillería electoral, de propaganda y reclutamientos hacia la pequeña burguesía o capas medias que operan la ingeniería por medios cibernéticos que de la producción han pasado también a la esfera de los servicios, hipermercados, transportes y comunicaciones acabando con la distinción entre trabajo manual e intelectual.



Chile, ambos candidatos defienden el modelo y promueven la disputa de las promesas, las mentiras y las esperanzas de las capas medias

Jaime Yovanovic (Profesor J)

Generalmente las elecciones muestran el estado de ánimo de las masas, dicen algunos analistas, pero en Chile vivimos una de las vanguardias mundiales de la imposición del modelo capitalista que por medio de la tecnología ha dejado de necesitar a los obreros para hacer funcionar las máquinas procesadoras del mundo natural que es transformado en mercancías para la acumulación de ganancias. Eso ha hecho que los partidos obreros queden reducidos a la más mínima expresión debido a que al igual que los patrones, hoy día dirigen todos su artillería electoral, de propaganda y reclutamientos hacia la pequeña burguesía o capas medias que operan la ingeniería por medios cibernéticos que de la producción han pasado también a la esfera de los servicios, hipermercados, transportes y comunicaciones acabando con la distinción entre trabajo manual e intelectual.

 

Desconociendo esta realidad, los viejos y nuevos partidos de la lucha por el poder estatal que habían llegado en Chile a ver como el proletariado urbano se entrelazaba por abajo en los cordones industriales y desde allí se aliaba horizontalmente con  las cadenas de pobladores sin casa autoorganizados en campamentos que desarrollaban la autogestión y el autogobierno y se alimentaban directamente del campo donde campesinos y pueblos avasallados por el estado ocupaban tierras y se articulaban en los consejos comunales campesinos, hoy día los partidos despliegan sus redes de reclutamiento y de las viejas ideologías hacia estos sectores de pequeña burguesía que hoy día sin tener la propiedad de los medios –y grandes medios- de producción están presentes en ellos, los conocen, los arman y desarman, y los operan, construyendo así su presente y su futuro de apéndices de los patriarcas propietarios que deciden sobre la vida y la muerte de los demás, en especial de las gigantescas capas de sectores marginados y periféricos reforzados por los millones de hijos de campesinos y de mapuche que embanderaron el estallido social.

 

Las capas medias entonces son la base, la masa principal y los ideólogos de esta nueva clase pequeño burguesa ilustrada que ha irrumpido hacia el parlamento y los municipios y ahora en la convención constitucional y hacia la presidencia de la res pública donde se maneja la locomotora que para andar debe ceñirse al camino de los dos rieles que tiene por delante.

Un sector de estas capas medias vive con odio y temor hacia los pobres que quieren quitarles lo que han alcanzado con su título universitario, en tanto el otro sector se aprovecha de los pobres para encumbrarse en las altas esferas del poder disputando los cargos a brazo partido atrayendo gente con  el fantasma del fascismo, con el retorno de Pinochet y las torturas, o sea el programa del miedo sembrado por los partidos de izquierda en los gobiernos posteriores a la dictadura militar.

 

Mientras el sector que odia a los pobres agrupa a los sectores conservadores de viejo cuño, los otros avivatos que los utilizan forman grupos feministas y ecologistas para “defender” la naturaleza y a las mujeres, ya que el estado es macho violador solamente cuando es dirigido por la derecha, puesto que los machos izquierdistas no son violadores, son buena gente y respetan a las mujeres, entonces hay que ponerlos en los cargos del aparato patriarcal, como Ortega en Nicaragua el izquierdista acusado de violador por la hija de su esposa.

 

Es fin  que cada uno tiene sus argumentos y sus mentiras y se acusan mutuamente de jugar limpio y que los otros son que juegan sucio y son los éticos y los maravillosos.

 

Así este sector con una falsa ética, un falso feminismo y un aún más falso ecologismo compite contra los malos y aspira a penetrar en los barrios periféricos vendiendo humo, y lo peor es que se trata de humo envenenado al igual que el otro sector.

 

Pero los sectores populares no han podido ser atraídos a las dos trampas del poder debido a que ya han gobernado los unos y los otros. En los gobiernos de Bachelet ha  habido represión y muerte contra el pueblo mapuche, así como de han autorizado grandes proyectos capitalistas que destruyen la madre tierra y las comunidades adyacentes. La izquierda no ha podido, o no ha sabido, o no ha querido resolver los graves problemas de Caimanes y Pelambres, Freire, Quintero y Domingas, donde las empresas han hecho lo que han querido. Eso ha quedado claro para la población y menos deseos tienen de ir a votar por uno de ellos, que por ser joven aparece como limpio de polvo y paja.

 

Los empresarios chilenos, por decir chilenos, pues el capitalismo no respeta ciudadanías, saben que esa pequeña burguesía vive y se desarrolla gracias a ellos y que los cuidarán. La mitad del electorado no confía ni en la izquierda ni en la derecha, y eso podremos verlo en  los resultados del domingo, que abrirán una nueva fase.

 

Si gana Boric, no pasarán más de un par de años antes que la crisis se le venga encima y que tendrá que resolver acrecentando el papel centralizador y represivo del estado, y si gana Kast, tal vez le permitan durar uno o dos años más, pero ese no será nuestro problema principal, pues mal haríamos en quedarnos sentados esperando que la burocracia arregle nuestros problemas.

 

Como ningún problema nuestro podrá ser resuelto por la partidocracia por mucha voluntad que le ponga, salga quien salga tendremos que consolidar la autonomía, la autogestión, las mingas y actividades conjuntas entre vecinos de los barrios, para lo que parece recomendable convocar encuentros de intercambio entre las experiencias de cada barrio para conocer y aprender unos de los otros cuidando el respeto de la diversidad evitando la búsqueda de centralización u homogenización de las actividades, es decir que es necesario que cada experiencia concentre esfuerzos en consolidarse fortaleciendo las relaciones internas para poder mostrar a los demás vecinos que existen y son positivas las nuevas relaciones vecinales, además quebrar nuestra práctica de ser foco de atracción y descubrir los modos de que sean los vecinos los que aporten sus ideas y propuestas y ayuden a cambiar y mejorar nuestra actuación viendo ellos que no somos cerrados sino que nos abrimos y cambiamos según lo que ellos puedan aportar. Así nos suicidamos como isla de la fantasía o gheto libertario de asociación de afines y nos convertimos en parte dinámica de la autopoyesis de la vida que se produce y reproduce por si misma rescatando los aportes rizomáticos que nos permitan emerger de distintos lados y no solamente crecer desde un punto central de referencia como un dios Zeus o Jehová en la cima del Olimpo.

unlibre@gmail.com