Rojava: “Llevamos una mochila detrás de 10 años de lucha y más de 12.000 compañeras y compañeros mártires”
Rawda Hasan, Nariman (Evdikê) Mohammad y Manal Mohammad integran la delegación de mujeres de Rojava que ha visitado Catalunya y el País Vasco para consolidar vínculos de solidaridad y explicar los horizontes de su revolución.
Rawda Hasan es Co-ministra de Cultura de la Región de Jazira, en Rojava; Nariman (Evdikê) Mohammad es Co-presidenta de la Unión de Escritoras e Intelectuales del Norte y Este de Siria; Manal Mohammad es miembro de Kongreya Star (confederación de organizaciones de mujeres en Rojava). Las tres han formado parte de la comisión de mujeres de Rojava, el Kurdistan sirio, que ha visitado el País Vasco y Catalunya estas últimas semanas.
“En 2014 se hizo pública la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria, Rojava. Para nosotras es importante estar aquí porque llevamos una mochila detrás de 10 años de lucha y más de 12.000 compañeras y compañeros mártires”, empieza Rawda Hasan. Unos años antes, en Rojava hubo un punto de inflexión. Fue durante el proceso revolucionario de 2011 en el norte de Siria, donde estalló un conflicto político-militar contra el régimen de Bashar al-Assad, principalmente. Antes de la revolución, toda expresión de cultura, lengua o identidad kurda estaba prohibida.
La delegación fue invitada por el Ayuntamiento de Durango (País Vasco), que está hermanado con la ciudad de Kobane (Rojava). En Catalunya, han sido acompañadas por la Associació Catalana per la Pau y Ciemen. Cabe destacar que en octubre de este año el Parlament de Catalunya reconoció oficialmente la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria, convirtiéndose así en la primera cámara parlamentaria en reconocerla a nivel mundial.
¿La cultura e identidades kurdas se pueden practicar libremente?
Rawda Hasan: En Rojava hubo un antes y un después marcado por la revolución de 2011. Antes de ésta, el autoritarismo de al-Assad iba en contra tanto de la cultura kurda como de la cultura armenia, asiria y árabe. Se limitaba la libertad de todas las personas que no estaban de acuerdo con el régimen sirio: la cultura y la lengua kurdas estaban prohibidas en escuelas, administraciones… De hecho, hace 15 días que el régimen sirio aprobó la utilización del kurdo en las escuelas, pero solo dos horas a la semana. Aun así, dentro del territorio se hablan tres lenguas oficiales: el kurdo, el árabe y el asirio. Desde el Ministerio de Cultura de Rojava queremos fomentar las expresiones de las diferentes culturas.
Manal Mohammad: La revolución también supuso muchos cambios en la mentalidad de la ciudadanía, y sobre todo de las mujeres. Nuestra participación en la economía, en la política, a nivel militar, en la misma cultura…ascendió mucho. Antes de 2011 no se hablaba de los derechos de las mujeres, y a partir de entonces empezamos a movilizarnos y organizarnos.
Evdikê Mohammad: Antes del proceso revolucionario, podéis imaginaros qué pasaba con las mujeres que se identificaban o querían identificarse como mujeres combativas. En general, en la sociedad de Oriente Medio hay una marginación de las mujeres, y eso se refleja en todos los ámbitos. Fue a través de la revolución que conseguimos reivindicar nuestro espacio ante la sociedad. Y como decía la compañera, también en la cultura: en la escritura o el teatro, por ejemplo.
¿Cómo lo veis materializado?
EM: Antes de 2011, las mujeres teníamos miedo de publicar lo que escribíamos o trabajábamos, porque recibíamos muchísimas críticas e intentos de destruirnos. En la Unión de Escritoras e Intelectuales que represento nos centramos mucho en el tema de las publicaciones y la distribución de obras. Después de la revolución, las publicaciones de mujeres están aumentando mucho año a año, cada vez más. Y no solo en kurdo, sino también en árabe y asirio.
¿Los derechos de las mujeres son prioritarios para las políticas de Rojava?
RH: El sistema político vigente en el Norte y Este de Siria es la Nación democrática, o mandato entre pueblos. Esta política se utilizaba en la época de Mesopotamia, entre los diferentes pueblos y culturas que convivían en aquel entonces. Una de las cosas que nos distingue de otros países es que, en Rojava, tenemos un sistema de poder compartido entre hombres y mujeres: hay una presidencia colectiva en todas las regiones y también en los diferentes cargos. Este sistema implica que tenemos co-presidencias, es decir, hay un hombre y una mujer en todos los niveles de representación. En el mismo Parlamento y en las candidaturas hay un 50% de mujeres y un 50% de hombres. Así, garantizamos que haya siempre una perspectiva de género y representatividad de las mujeres en los espacios públicos y poder. Vemos que en muchos países de la Unión Europea no hay paridad representativa, y que es excepcional que una mujer sea presidenta, o incluso que sean ministras.
La Jineology es una de las ideologías oficiales de la Administración Autónoma…
MM: En árabe, Jineology significa ‘Ciencia de la Mujer’. Tiene el propósito de realizar una revisión de las ciencias sociales desde el pensamiento y análisis feminista en Kurdistan y en Rojava, concretamente. Para la Jineology, la cuestión de quién genera (y ha generado) conocimiento, cómo y para qué es el eje principal. El patriarcado y el sistema de dominación afectan directamente en qué se explica del mundo, de qué manera y con qué finalidad. El objetivo de la Jineology es crear propuestas que den soluciones a las opresiones y a los problemas de la sociedad: llegar a la raíz del problema y ver cuáles son las perspectivas para cambiarlas. Ahora, la Jineology es una carrera universitaria en la Universidad de Rojava. Esto es algo nuevo en Oriente Medio, pero poco a poco va entrando en la educación y en el ámbito académico. Existe el Comité Jineology, una comisión específica sobre este tema, tanto en Oriente Medio como también en Europa, y hacen conferencias y estudios sobre la Jineology.
Abdullah Öcalan, líder y fundador del PKK (Partido de los Trabajadores de Kurdistan), está preso en la isla Imrali, una isla-prisión turca, y está condenado a cadena perpetua desde el año 1999. ¿Qué pensáis sobre que el PKK esté considerado como una organización terrorista por la Unión Europea, la OTAN, Estados Unidos y Turquía?
MM: Nosotras consideramos lo contrario. Que el PKK se considere terrorista es porque hay un doble rasero. ¿Cómo va a ser una organización terrorista un partido que prioriza luchar por los derechos de las mujeres y por los derechos humanos? Conocemos el pensamiento del PKK, sus ideales y sus luchas. No solamente la población kurda simpatiza con este pensamiento, sino también población árabe y asiria.
Cuando Daesh intentó ocupar la ciudad de Kobane, las personas que estuvieron al frente tuvieron la ayuda del PKK para evitar la ocupación. ¿Por qué se considera al PKK, que ha ayudado a la población, una organización terrorista? Y, por lo contrario, no se consideran terroristas las organizaciones que ayudan a Turquía, que está cometiendo masacres en el este de Siria, y sigue recibiendo armas por parte de la OTAN. Turquía practica una ofensiva constante en y contra el territorio kurdo. Nos sigue atacando, también con armas prohibidas como las armas químicas, que vulneran los derechos humanos. Y las organizaciones que ayudan a perpetuar estas masacres a Turquía no se consideran terroristas.
¿Las Unidades de Defensa de Mujeres, las YPJ, construyen paz desde las armas?
MM: Las YPJ se fundaron el 3 de abril de 2013 con el objetivo de ser las fuerzas de protección de las mujeres. No tienen objetivos solamente militares, sino también políticos, sociales y feministas. Su objetivo es proteger a las mujeres en situaciones de guerra y defender los derechos de las mujeres en todos los niveles. Y en el futuro conseguir paz, construir la paz. De la mano de estas milicias se ha conseguido derrotar a Daesh y han ayudado a instalar, en el Norte y Este de Siria, una Nación democrática. En las YPJ no solo hay mujeres kurdas, sino que también hay mujeres árabes que han combatido en este grupo, por ejemplo, contra la invasión turca. Tomando como ejemplo a las YPJ, también se han conformado otras milicias de mujeres militares de otros grupos, como las asirias.
Estando ahora en Catalunya y los días anteriores en el País Vasco, ¿qué mensaje queréis dar?
EM: Desde que se instaló la Administración Autónoma de Rojava en 2014, se hace mucho seguimiento de quien nos da apoyo, y algunas de las primeras visitas que tuvimos para conocer nuestra experiencia fueron desde diferentes pueblos de España. A partir de esos encuentros y de visitas continuadas, uno de los resultados más positivos que hemos tenido es el reconocimiento de la Autonomía por parte del Parlament de Catalunya. Queremos agradecer al pueblo catalán todos los esfuerzos. Deseamos que otras comunidades autónomas del país tomen el mismo camino, y que las relaciones sigan constantes y permanentes. De izquierda a derecha Manal Mohammad y Rawda Hasan. Anna Enrech Calbet
RH: De nuestra visita al País Vasco y Catalunya queremos aprovechar para trasladar y aplicar todo lo que podamos a nuestra tierra. La experiencia sobre la Administración Autónoma es reciente. Queremos establecer relaciones para intercambiar esas experiencias y conocer otras que nos puedan beneficiar en temas de conocimiento y aplicarlo en Rojava. Sobre todo a nivel cultural: nuestro deseo es que la cultura no que
de cerrada en el Norte y Este de Siria, sino que traspase fronteras.
MM: Después de 2011, muchas personas de aquí visitaron Rojava para conocer nuestra experiencia. Nosotras estamos aquí gracias a una trayectoria de relaciones, sobre todo entre mujeres y organizaciones de mujeres de ambos países, y queremos consolidarlas. Queremos fortalecer tanto las relaciones como las visitas mutuas, con Catalunya y el País Vasco pero también con otros pueblos de España, para aprovechar y sacar todos los intercambios posibles entre pueblos. Estamos muy orgullosas de estar aquí, porque estas relaciones empezaron a través de mujeres. La mujer es la vida, y es el futuro.