Culturas
“La idea de La Invisible no es okupar por okupar, es ofrecer espacios”
Desde hace unos meses La Invisible carga con una orden de desalojo. Las salas de este edificio de 1876, ubicado en el centro de Málaga, han dado oportunidad a numerosas personas del mundo de la cultura y del arte afincadas en la ciudad. Pocas personas nos pueden transmitir mejor la importancia de un lugar como La Invisible para las creadoras y creadores de Málaga como La Chachi, ganadora de tres Premios PAD en 2017 (mejor espectáculo, mejor intérprete femenina y mejor producción sin subvención) y del Premio Lorca a la mejor intérprete de danza contemporánea en 2018 por su espectáculo La gramática de los mamíferos. Quizá estos reconocimientos nunca hubiesen existido sin las puertas, siempre abiertas, de este espacio, para la investigación, creación y ensayos de sus piezas.
¿Qué actividad has desarrollado en La Invisible?
Llevo casi 15 años siendo la profe de flamenco e imparto clases para nivel inicial y medio. He tenido alumnas de las más diferentes nacionalidades, atraídas por la cultura musical de nuestra tierra. He podido ofrecer clases gratuitas para aquellas que no pudieran pagarlas, todavía ocurre. En este tipo de espacios esto puede ser posible, pues no se paga alquiler de sala, si ocurriera lo contrario sería imposible.
La Invisible me ha abierto sus puertas para encerrarme 24 horas, sin límite de horarios, haciendo posible el desarrollo y profundización de mi producción como coreógrafa, directora y dramaturga
Además, es mi espacio de creación, investigación y ensayo de mis múltiples piezas. La casa me ha abierto sus puertas para encerrarme 24 horas, sin límite de horarios, haciendo posible el desarrollo y profundización de mi producción como coreógrafa, directora y dramaturga. La Casa me ha visto y me ha ayudado a crecer. Todas mis piezas, todas multipremiadas a nivel andaluz, Premio Lorca a mejor intérprete 2018, 3 premios PAD y un premio Ateneo, se han gestado entre sus paredes.
Durante un tiempo formé parte del equipo de Cultura Libre, programando las actividades culturales. Mil propuestas llegaban de toda España, e incluso desde fuera de ella. Clowns de Alemania que estaban de gira por España y querían pasar por La Invisible. Conciertos y músicos de todo tipo: experimental, flamenco, reggae, cantautores, electrónica, rap, heavy, punk… danza, teatro contemporáneo, clásico, comedia, poesía, exposiciones, conferencias de arte. Talleres de todo tipo, desde croché y zumba, flamenco, canto, danza del vientre, etc. Itinerantes o residentes.
La casa siempre ha sido un hervidero de actividades y talleres, y ha dado oportunidad a todas las propuestas que llegaban y, muy importante, ha ofrecido un espacio tanto a los artistas que están empezando, como a los más consolidados.
¿Qué te ha dado La Invisible como creadora?
Un espacio de creación es algo vital para nosotras, pues dedicándonos a la investigación pasamos muuuchas horas hasta descubrir nuevas fórmulas escénicas. Alquilar una sala para tantas horas es una locura. Aparte de que ningún espacio está disponible para trabajar durante tanto tiempo, ya que siempre está reglado por horarios y compartido con otras actividades. Agradecimiento es la palabra que siempre me acompaña cuando pienso en La Invisible.
Por la casa han pasado multitud de artistas de todas las disciplinas para ensayar sus piezas escénicas o conciertos […] No hay espacios gratuitos que posibiliten esto
Por la casa han pasado multitud de artistas de todas las disciplinas para ensayar sus piezas escénicas o conciertos; incluso alumnas del Conservatorio de Danza o de la Escuela Superior de Arte Dramático. No hay espacios gratuitos que posibiliten esto. Es vital para la producción cultural de Málaga y para sus creadoras.
La Invisible es un ejemplo a nivel nacional, por eso está tan bien apoyada por tan diversas instituciones y artistas consagrados. Es un ejemplo. El proyecto no es okupar por okupar, es ofrecer un espacio para el desarrollo, producción y formación gratuita o con aportación voluntaria a las artistas, al público y al alumnado malagueño. ¡Espacios así son posibles!
Haciendo balance de estos casi 15 años, ¿cómo crees que ha cambiado la actividad de La Invisible el paisaje y radiografía de Málaga?
Es un punto de encuentro importantísimo. Su programación es plural, multidisciplinar, para todos los públicos. Además, acoge programación alternativa en el centro Málaga, ya que las salas y teatros de este sector/domicilio sólo presentan propuestas de corte comercial/clásico y gran formato (Teatro Echegaray, Cervantes, Soho).
Si Málaga quiere ir de moderna y de capital del desarrollo andaluz, espacios de programación alternativa son obligatorios para la proyección cultural de la ciudad
No existen espacios en el centro que incluya una programación contemporánea, experimental o formatos no convencionales o de pequeña escala. No todo el mundo tiene 15 euros (mínimo) para ver cultura. No todos los artistas o compañías trabajan líneas y formatos clásicos. La Invisible hace posible sobredimensionar las posibilidades culturales del Centro. Y si Málaga quiere ir de moderna y de capital del desarrollo andaluz, espacios de programación alternativa son obligatorios para la proyección cultural de la ciudad.
Si La Invisible fuera un órgano de la ciudad de Málaga, ¿cuál crees que sería?
Los pulmones, sin lugar a dudas. Creo que queda claro en mis exposiciones anteriores.
¿Qué aporta el feminismo a La Invisible?
Ha sido su casa. Es un referente en toda Andalucía. Abandera, alumbra y activa un movimiento necesario para la reeducación del pueblo malagueño, que aun tiene tanto tanto trabajo que hacer en relación a este aspecto. Lo ha abrazado como altavoz de su grito.