El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, advirtió este jueves sobre los puntos claves sin consenso en los diálogos con el gobierno que están a punto de concluir.

Si bien los resultados de las conversaciones entre ambas partes se darán a conocer mañana luego de 90 días de negociaciones, “las propuestas fundamentales no han dado paso», declaró Iza este jueves antes de entrar a la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, sede de los encuentros.

El líder indígena admitió que en todas las mesas de trabajo instauradas tras el paro del mes de junio existen avances parciales, pero en los 10 puntos considerados fundamentales para los representantes de los pueblos originarios no hay consenso, como por ejemplo el control de los precios.

Además, se refirió a las discusiones sobre los subsidios a los combustibles, un tema complejo para el ejecutivo por su relación directa con el sector productivo.

Si topamos será para todos, no puede haber beneficios para los grupos favorecidos desde hace 20 años, eso lo hemos dejado claro, precisó Iza, quien también aclaró que esta tarde firmarán el acta final de la mesa de trabajo vinculada a ese tema.

Otro de los puntos discordantes es la reparación integral a las víctimas de las movilizaciones de 2019 y 2022, ya que el gobierno no aceptó esa solicitud y el presidente la Conaie ratificó que buscarán la compensación mediante la justicia.

Ante las acusaciones de que las protestas de junio pasado fueron las causantes de los problemas económicos del país, Iza rechazó que le trasladen a los movimientos sociales la responsabilidad de una crisis que está pasando a nivel global.

Si no se hubieran realizado las movilizaciones de hace tres meses, seguramente esto sería un caos total en la economía con los precios de los combustibles liberados, apuntó en referencia al acuerdo logrado en aquel momento de topar el valor de la gasolina Extra, Ecopaís y el diésel.

El miércoles el ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, se apresuró a celebrar que los diálogos terminarán con más de 150 acuerdos, si bien hasta ahora ninguno de ellos se ha puesto en práctica.

Por el contrario, los ciudadanos advierten de un deterioro de la situación social con una agudización de la inseguridad, problemática que no formó parte de las mesas técnicas previstas inicialmente y que resolverla ahora es una prioridad para los ecuatorianos.

Instan a que el Gobierno pueda dar solución a los puntos para evitar inconvenientes con los indígenas.