Venezuela desde abajo: Innovaciones necesarias mas no suficientes

A través de los años hemos ido implementando maneras de abordar la gestión, muy diferentes a las acostumbradas en las empresas privadas o públicas. A continuación algunos ejemplos:



Transitando nuevos senderos

Innovaciones necesarias mas no suficientes

 

 

 

A través de los años hemos ido implementando maneras de abordar la gestión, muy diferentes a las acostumbradas en las empresas privadas o públicas. A continuación algunos ejemplos:

  • Hacemos hincapié en eliminar las líneas de mando al ir desdibujando las jerarquías. Así abrimos la posibilidad de potenciar nuestro desarrollo personal, pues todas las personas que integramos la red tenemos la libertad de hacer, de desarrollar nuestras iniciativas, de asumir responsabilidades, de equivocarnos y aprender de nuestros errores.
  • Propiciamos que, al tener acceso a la información y a los criterios colectivos, podamos asumir la responsabilidad personal de tomar decisiones sin depender de las reuniones.
  • Contrario al énfasis empresarial en la especialización, rotamos las tareas y así vamos desdibujando centros de poder basados en el control de la información y el conocimiento. Al ir teniendo todos y todas acceso a la información y al conocimiento, abrimos de nuevo la posibilidad de potenciar nuestro desarrollo personal y ampliamos la participación en las decisiones al ir construyendo una visión global de las actividades.
  • En parte con miras a facilitar la rotación de las tareas, a excepción de algunos profesionales de la salud, tenemos ingresos personales iguales en cada espacio de actividad según la productividad lograda en cada uno de ellos. Esto evita esa competencia por los cargos que tantas energías consume en las empresas y facilita aún más el compartir la información y el conocimiento.
  • Al establecer el precio de los productos que intercambiamos dentro de la red, no nos guiamos por los precios del mercado, sino que llegamos a consensos basándonos en sus costos. En vez de una negociación que termina en un contrato, se trata de acuerdos de palabra. Con nuestra transparencia al presentar los costos y nuestra responsabilidad en el cumplimiento de los acuerdos, vamos posibilitando esas relaciones de confianza que van emergiendo de nuestro proceso educativo.
  • Centrados en fomentar un proceso educativo y no en función de hacer cosas por sí mismas, no tenemos metas de crecimiento cuantitativo. De manera que no planificamos la ampliación de nuestras actividades, ni el desarrollo de nuevos emprendimientos. Estos van emergiendo según las necesidades –tanto materiales como del proceso educativo- de acuerdo con la madurez del momento que estemos viviendo.

 

Haciendo las cosas tan diferentes a las normas empresariales hemos podido desarrollar, a gran escala, una gran variedad y un considerable volumen de actividades económicas en un mercado sumamente competitivo. Además, hemos estado garantizando nuestro sustento como integrantes de la red, así como servicios a precios solidarios y surfeando las múltiples complejidades de la situación política, económica y social de nuestro país.

Sin embargo, estas y otras innovaciones por sí solas no garantizan una efectividad operativa. Existen para facilitar nuestro proceso educativo. Sin ese proceso educativo, el caos se encuentra a la vuelta de la esquina.

Esto lo hemos experimentado cuando descuidamos la reflexión entre todos y todas sobre las cualidades de las relaciones que se manifiestan en el quehacer diario. Es decir, cuando dejamos de hacer hincapié en ir profundizando relaciones de confianza basadas en la responsabilidad, la transparencia, la equidad y el cuido mutuo.

De manera que las innovaciones que hemos ido implementando son necesarias para facilitar ese proceso educativo. Sin embargo, no son suficientes, ya que facilitan mas no garantizan el ir profundizando esas relaciones de confianza que son las que van haciendo que funcionemos con efectividad.

El reto se encuentra en ir convirtiendo, a través de la reflexión colectiva, todo lo que ocurre en el día a día en una maravillosa oportunidad transformadora.