Colonia Blanca Navidad, una historia de lucha y resistencia en la frontera
Una colonia hecha de pequeñas casas de cartón, sin agua, sin drenaje, sin luz… así nació la colonia Blanca Navidad como una respuesta de familias de trabajadores de maquiladoras que ante la falta de un lugar donde vivir tomaron unas hectáreas de tierra para asentarse.
“Blanca Navidad”, fue fundada el 22 de diciembre de 2004, surgida de la nada con las conseucentes carencias de agua, luz y calles.
La Colonia Blanca Navidad
Pequeñas casas improvisadas donde 5 o 6 personas vivían amontonados en un solo cuartito hecho de tarimas de madera y plástico. La lucha de las familias fue feroz, resistiendo la amenaza de desalojo que las autoridades municipales intentaron varias veces.
La historia de la Colonia Blanca Navidad es un relato de mujeres y hombres trabajadores, quienes en su mayoría laboraban en las maquiladoras de Nuevo Laredo, con los sueldos básicos y jornadas de nueve horas.
Los gobiernos municipales los trataron en calidad de ”invasores“, lo que valió para justificar diversos intentos de agresión para que desalojaran el predio, como cuando mandaron a quemar sus casas por la noche, cuando las familias dormían… pero resistieron.
Su lucha se hizo tan famosa que trascendió fronteras y su historia llegó al sur del país haciendo eco en las comunidades de los Altos: Los Zapatistas.
Llegan los zapatistas
El 21 de noviembre del año 2006, la Comisión Sexta del EZLN, como parte de su recorrido por el norte del país, visitó la colonia Blanca Navidad al mando del Subcomandante Marcos.
Entre las dos comunidades encontraron semejanzas y vieron que compartían los mismos problemas como el despojo de tierras, la destrucción del tejido comunitario y la cultura de organización.
La respuesta del EZLN fue inmediata:
Hay que unir el norte con el sur. Sí, y el este con el oeste. Hay que unir a todo nuestro país.
Durante su visita, Marcos les dijo a los colonos que les mandaría ayuda como símbolo de solidaridad.
Y los zapatistas cumplieron… un camioncito lleno de maíz y mil despensas atravesó el país de norte a sur y llegó a la Blanca Navidad el 22 de diciembre de 2006, día de la fundación de la colonia.
En Nuevo León y Nuevo Laredo se organizó una caravana para acompañar el transporte con las cajas de víveres que traían una leyenda:
De las comunidades indígenas zapatistas para la gente digna de la Blanca Navidad.
La comunidad también se preocupó por aprender a organizarse en cooperativas y lograron construir pequeños negocios como una tortillería comunitaria, hortalizas y un centro de salud.
Pero la lucha siguió para años después para poder conseguir que su patrimonio fuera legal, además de la introducción de servicios básicos como luz y drenaje.
Los 40 grados de verano y las temperaturas congelantes de invierno curtieron a niñas y los niños que salían a estudiar día con día y que solo disponían de espacios de tierra árida como su lugar para jugar al no disponer de una plaza o cancha.
Así fueron los primeros años de vida en su colonia, ahí nacieron en una realidad que los oprime cada vez los oprimía más en la pobreza.
Durante su intervención en un evento zapatista, los delegados de la colonia de Nuevo Laredo platicaron de su participación en “la Otra Campaña“, de sus proyectos autónomos que les compartieron las comunidades indígenas del EZLN.
La carta de los colonos neolaredenses fue leídal 27 de diciembre de 2008 a nombre de las “mujeres, hombres, niñas y niños de Blanca Navidad”
«Los residentes de la Blanca Navidad hemos comprendido que el país se encuentra en un momento de parto en donde las contracciones de los movimientos sociales pronto darán a luz a un nuevo espacio, donde la resistencia abrirá el camino para unir la esperanza, y caminaremos juntos hacia un horizonte en donde todos y todas jugaremos un papel primordial, uniendo a la diversidad y la solidaridad, para construir un mundo de justicia y dignidad para todas y todos los mexicanos y los seres humanos en el mundo.»
En 2021, después de varios años de lucha, tras una larga negociación y protesta, vecinos de la colonia comenzaron a recibir sus cartas de liberación para los servicios básicos.
La Colonia Blanca Navidad es una historia de lo que puede hacerse realidad cuando una comunidad se une en armonía y resistencia.