Salud rebelde y movimientos anti-capitalistas

Hace más de medio siglo el partido Panteras Negras fue, probablemente, una de las primeras organizaciones en poner en marcha un sistema de salud alternativa a la del sistema hegemónico. El folleto “Autodefensa médica. Panteras Negras y zapatistas”*, no sólo revela las similitudes entre ambas experiencias en la salud, sino que detalla los logros del movimiento negro estadounidense.



En Movimiento

 

Salud rebelde y movimientos anti-capitalistas

Raúl Zibechi

 

Hace más de medio siglo el partido Panteras Negras fue, probablemente, una de las primeras organizaciones en poner en marcha un sistema de salud alternativa a la del sistema hegemónico. El folleto “Autodefensa médica. Panteras Negras y zapatistas”*, no sólo revela las similitudes entre ambas experiencias en la salud, sino que detalla los logros del movimiento negro estadounidense.

El partido Panteras Negras para la Autodefensa se forma en 1966 luego del levantamiento de la comunidad negra Hunters Point en San Francisco, reprimida por la guardia nacional con bayonetas con el mismo estilo que se combatía a los guerrilleros en la guerra de Vietnam, como reconoció el jefe del operativo.

El concepto “autodefensa médica” fue concebido como la defensa ante el dispositivo médico y farmacéutico que reducía a las comunidades negras a campos de experimentación, pero además como el modo de apropiarse del saber médico que reduce a los usuarios a objetos pasivos (pacientes), ejerciendo violencia material y simbólica contra las comunidades más empobrecidas.

Desde 1968 las Panteras abrieron clínicas en barrios negros en varias grandes ciudades, como Chicago, Seattle, Kansas y Missouri, entre las primeras, que nombraron como Clínicas Libres del Pueblo, que se expandieron a trece ciudades. Se insertaron en un amplio movimiento radical de cuidados impulsado, entre otros, por el movimiento feminista de salud. Contaron con el apoyo de personal médico voluntario y no sólo se encargaban de la salud sino también de la educación y la organización de la población.

Como parte de su política de autodeterminación de la población afrodescendiente, decidieron que las comunidades tomaran la salud en sus manos, pero a la vez levantaron Programas de Sobrevivencia, destacando las escuelas primarias, desayunos, asesoría legal y salud gratuitos, incluyendo un programa dental, campañas de vacunación y cooperativas de vivienda. Tenían muy claro que no se trataba e asistencialismo sino de un paso para la construcción de poder de las comunidades.

Para equipar las clínicas contaron con el apoyo de personal médico que donaron aparatos de radiología y aportaron diversos servicios, como pediatría, entrenando a activistas como técnicos de laboratorio y personal de primeros auxilios. De ese modo, algunas clínicas de Panteras Negras consiguieron atender cien pacientes por semana.

Un caso particular es el de la acupuntura. Dos grupos del partido viajaron a China para recibir entrenamiento, lo que les permitió aprender acupuntura que luego practicaron como técnica para tratar adicciones y estrés postraumático. Fue esta movimiento el que introdujo la acupuntura en Estados Unidos.

Organizaron conferencias de sobrevivencia comunitaria que duraron varios días como fiestas barriales y modos de protesta colectivo, en las que se hablaba de historia del pueblo negro y se promovían las clínicas libres. Consiguieron un autobús para la visita a prisiones de familiares y amigos de los encarcelados, además de hacer miles de pruebas gratuitas de detección de anemia de células falciformes que afecta principalmente a las comunidades negras y que en esa época el gobierno no atendía.

Como señala el citado trabajo, “las Panteras tuvieron una enorme influencia en las iniciativas de salud que desbordan la propia organización y sus años de actividad”.

Considero que este es un tema central. La influencia de Panteras trasciende geografías y calendarios, como sucede con el movimiento zapatista. Las realizaciones del movimiento negro tienen más de 50 años y recién estos tiempos estamos siendo capaces de recuperarlas y de valorar su importancia.

Aún es pronto para comprender la trascendencia del zapatismo. Sabemos que ha impactado en todo el mundo. Que las autonomías crecen en todos los rincones del continente latinoamericano. Que su legitimidad y prestigio desbordan las fronteras mexicanas. Aún así, habrán de pasar años hasta que podamos asumir que estamos ante una de las revoluciones que transformó el modo de hacer de los pueblos, la cultura política de las y los de abajo.

*En https://www.academia.edu/43188562/Autodefensa_M%C3%A9dica_Panteras_Negras_y_Zapatistas_Zineditorial