Bolivia: Como Gobierno Indígena, el objetivo que tenemos es poder mantener nuestro territorio unido y consolidado

Nuestra autonomía está dando los primeros pasos. Conociendo las experiencias de otras autonomías indígenas ya consolidadas, hemos visto que, a pesar de que ya hay un camino abierto, todavía quedan muchos obstáculos por resolver. Nosotros, la Autonomía del Territorio Indígena Multiétnico, vamos a seguir abriendo aún más esta brecha.




1° de agosto de 2023

Rosalía Matene Mosúa es mojeña ignaciana, oriunda de la comunidad de Santa Rosa del Apere, y participó de la primera elección del Gran Cacique de la Autonomía del Territorio Indígena Multiétnico (TIM), ubicado en Bolivia. Como Vicepresidenta de la Coordinadora Nacional de Autonomías Indígenas Originarios Campesinos (CONAIOC) analiza este histórico momento y señala los principales desafíos de cara al futuro.

La elección de las primeras autoridades del Gobierno Indígena Autónomo del TIM es un momento muy importante después de más de 10 años de iniciar este proceso para consolidar nuestra Autonomía Indígena de Base Territorial. Esta elección nos emociona y, sobre todo, esperamos que sea el inicio de una serie de mejoras en la administración de nuestro territorio, recursos naturales, recursos económicos y la profundización en conocimiento de nuestra historia dentro del territorio.

Como Gobierno Indígena, el objetivo que tenemos es poder mantener nuestro territorio unido y consolidado. También crecer desde lo económico y desde lo humano para que, como Autonomía Indígena, podamos demostrar que somos capaces de ejercer nuestro autogobierno y autodeterminación. Eso también es uno de los fines que tenemos.

Como pueblos indígenas, tenemos la capacidad de poder autogobernarnos y lo estamos demostrando a través de esta elección porque somos nosotros quienes estamos llevando adelante el proceso conforme a lo establecido por nuestras normas y procedimientos propios. ¿Qué hicimos en estos tres días? Llevamos a cabo el Encuentro Ordinario de Corregidores.

En el primer día, durante el domingo 23 de julio, se acreditaron los votantes de las 26 comunidades del territorio: en total fueron 893 acreditados para emitir su voto. El segundo día, se inició con la elección y posesión del Presidium: una mesa conformada por unas seis personas que sería la encargada de llevar adelante el proceso de elección de las autoridades. Ese día, se eligieron a los asambleístas titulares y suplentes de los pueblos que conforman al TIM: Mojeño Trinitario, Mojeño Ignaciano, Movima, Yuracaré y Tsiman. Ellos serán las autoridades legislativas del Gobierno Autónomo Indígena.

Finalmente, el martes 25 de julio se realizaron las elecciones del Órgano Ejecutivo, es decir, la elección del Gran Cacique, el Consejero y dos Operadores Territoriales, uno de Recursos Naturales y otro para el Área Social. Esta elección no se realizó por pueblo, sino en plenaria, a través del voto universal y secreto. Cada candidato tenía un número, 1 y 2, y los comunarios debían escribir el número en un papel y depositarlo en un jasayé (el tradicional canasto hecho con hojas de palma que usamos en el territorio).

¿Cuáles son los desafíos que se vienen después de esta primera elección? El primer desafío es lograr que los recursos económicos que son destinados al territorio sean utilizados para cubrir las necesidades. Necesitamos una administración responsable y, sobre todo, la participación de todos los comunarios y comunarias. Lo que nosotros esperamos es que esas necesidades y esas formas de designación de los recursos vengan desde las comunidades y no (como se hacía) desde la administración pública, en donde son las autoridades municipales quienes deciden dónde y cómo se invierte en los recursos.

Otro desafío que tenemos como pueblos indígenas es lograr la capacidad técnica para hacer respetar el territorio. Como bien sabemos, nuestro territorio es amenazado por los avasallamientos de los interculturales. Por eso, debemos seguir manteniendo esa firmeza que tienen los comunarios y cada uno de los corregidores en sus comunidades. Hay que defender este espacio territorial, que es nuestro, para que nadie venga y nos quite lo que es de nosotros.

Después de mucho tiempo, nuestra autonomía está dando los primeros pasos. Conociendo las experiencias de otras autonomías indígenas ya consolidadas, hemos visto que, a pesar de que ya hay un camino abierto, todavía quedan muchos obstáculos por resolver. Nosotros, la Autonomía del Territorio Indígena Multiétnico, vamos a seguir abriendo aún más esta brecha.