Imprimir
Enviar
Fox observa con mucha paz espiritual como Lula y Lagos se coquetean con deliciosa concentración. Ahora todos son amigos. Buenas noticias para el capital.
Nota de Clajadep
La reunión del Mercosur fue un rotundo éxito para el capitalismo, pues no sólo Mesa consiguió el apoyo de Lula para su estabilidad amenazada por los bloqueos y luchas locales de los movimientos de base, sino que Fox se ha sumado a la integración regional anunciando que el Alca queda para después…
Ya los incautos comienzan a sospechar que el Mercosur aquel no era tan revolucionario como anunciaba Dieterich y que las campañas contra el Alca resultaban funcionales a alguna estrategia oculta.
Con el pretexto de que se trataba de aislar a USA, el Mercosur se ha impuesto y nada menos que Fox viene a sumarse, el más reaccionario presidente pro-yanqui que haya tenido México en mucho tiempo, enemigo declarado del pueblo mexicano, tan campante y progresista él.
Esperamos que se les acaben los incautos a los viejos izquierdistas que siguen llamando a apoyar el Mercosur y a Kirchner, que sale orondo de la presidencia del pacto regional ni más ni menos con grandes avances en la integración con Europa, como que los Euros fuesen más beneficiosos que el Dólar. No hay que olvidar que ahora Rato, el español fascista, es el nuevo hombre fuerte del FMI y es el representante directo de los grandes capitales españoles que se solazan con la nueva invasión a que nos tienen sometidos. Todo es estrategia para asegurar la continuidad de la ganancia aprovechando la inocencia de las ovejas domesticadas por sujetos como Lula y parecidos, reformistas y populistas asustados por el desarrollo de las luchas en Ilave y muchas otras localidades en el continente.
Readecuaciones pertinentes, obviamente.
Pero, como dijeron los zapatistas, la tarea ahora es de los municipios y experiencias autónomas. O como dijo la Conaie: volver a las localidades. O como la ruptura del movimiento campesino mexicano: fortalecer el trabajo territorial. O como las movilizaciones en el altiplano que se niegan a sumarse al circo de las burocracias. O como la retomada de las acciones en Ilave. O como las batallas estudiantiles autónomas en Chile, en fin, la voz de las autonomías ya no la pueden callar por muy progresista que se ponga Fox o por muchas sonrisas que intercambien Lula y Lagos.
México D.F. Viernes 9 de julio de 2004
En tanto no suscriba un acuerdo, sólo se beneficiará con un trato comercial preferencial
México ingresa al Mercosur como observador; el ALCA, congelado
Fox considera que antes de concretar el Acuerdo de Libre Comercio para las Américas se deben considerar “con amplitud” las asimetrías que existen en las naciones de la región
Puerto de Iguazu, Argentina, 8 de julio. Al calificar como un hecho histórico la incorporación de México al Mercado Común del Sur (Mercosur), el presidente Vicente Fox prácticamente postergó indefinidamente la firma del Acuerdo de Libre Comercio para las Américas (ALCA). Primero, dijo, hay que terminar los procesos de integración que están en marcha en Latinoamérica para que sean éstos, finalmente, los que lleven “paso a paso, escalón por escalón, a un acuerdo continental que resulte conveniente para todas las partes'’.
Si bien el proyecto original del ALCA marcaba como plazo de entrada en vigor, enero de 2005, el mandatario mexicano dijo que antes de concretarlo habría que considerar “con amplitud'’, las asimetrías que existen en los países de la región.
Por tanto, resaltó, el ALCA tendrá que ser gradual y progresivo, beneficiar en forma prioritaria a los países menos desarrollados y contar con mecanismos específicos de financiamiento para las economías nacionales.
“El día de mañana podremos estar hablando de un proceso de integración continental, pero en este momento la atención está centrada en la consolidación de los acuerdos regionales, bilaterales, en tomar esta semilla, este avance que ya tiene el Mercosur como eje central de la cristalización social de ese sueño de una verdadera unión latinoamericana'’, apuntó el jefe del Ejecutivo.
Hoy, México consiguió por fin su viejo anhelo de incorporarse al Mercosur. Ya es miembro asociado de ese organismo, si bien tal condición sólo se hará efectiva hasta que se logre un acuerdo de libre comercio con los países con pleno derecho de este bloque, lo que podría ocurrir a más tardar en un año. Mientras tanto, podrá asistir como observador a sus reuniones y foros.
Como miembros asociados, México y Venezuela tendrán acceso a un trato comercial preferencial con el bloque, pero no a los beneficios arancelarios con que cuentan los miembros del Mercosur.
El presidente Vicente Fox dijo que para el gobierno mexicano este paso representa la posibilidad de contribuir a que América Latina se consolide como un participante global en la escena internacional en el siglo XXI.
Dijo que con este tipo de asociaciones, los países latinoamericanos pueden crear, a semejanza de las naciones de Europa, un espacio común que brinde potencia a “la fuerza de nuestras singularidades. Queremos ser parte del esfuerzo integracionista que con visión histórica impulsa el Mercosur'’, dijo Fox, mientras que el presidente temporal del organismo Néstor Kirchner -que hoy entregó el cargo a su homólogo de Brasil, Luis Inacio Lula da Silva- definió como un instrumento útil para reducir la pobreza y la exclusión social.
Fox Quesada -así lo estableció en Paraguay, donde realiza una visita de Estado- ubicó en un plano de tácita postergación al Acuerdo de Libre Comercio para las Américas (ALCA), al asegurar que México está hoy más empeñado en la semilla y avances del Mercosur.
El potencial que el mandatario mexicano ve en este mecanismo es tal, que durante los trabajos de la Cumbre del Mercosur dijo que los países que conforman este mecanismo “podemos tener una sola voz, decisiva en la forja de una nueva arquitectura internacional que apoye nuestros esfuerzos de desarrollo con base en una agenda diseñada'’ por las naciones del área.
En el comunicado conjunto suscrito en la Cumbre del Mercosur se destacó además la presencia de los presidentes de Chile y Boliva, Ricardo Lagos y Carlos Mesa, respectivamente, -ambos miembros asociados del organismo y con fuertes diferencias políticas-, porque ello representa que el Mercosur sirve para fortalecer lazos de asociación entre naciones.
El que a todas luces el ALCA esperará la llegada de mejores tiempos, lo dejó en evidencia el argentino Kirchner, pues al entregar la presidencia temporal destacó sobre todo la asociación birregional que se signará en breve con la Unión Europea y que, dijo, forma parte de la estrategia de proyección del Mercosur al mundo, “y de la firme vocación de crecimiento y de representatividad internacional que inspiraron su creación'’.
