Lucio, de la red de Solidaridad con Chiapas en Buenos Aires, reporta sobre visita a las comunidades zapatistas

29.Dic.04    Análisis y Noticias

Reporte sobre visita a las comunidades zapatistas.

Por Lucio (Red de Solidaridad con Chiapas – Buenos Aires, Argentina)
severino31@yahoo.com.ar
La Fogata

Al hablar de su lucha, los zapatistas no hablan de grandes teorías revolucionarias, ni se erigen en ejemplo de nadie y mucho menos en consejeros políticos; hablan de su mejor herramienta: La practica concreta. Y esa es, en todo caso, su teoría. Y así van andando los camino de la esperanza… Y no les fue tan mal… Veamos:

Desde que se alzaron en armas el 1ro de enero del 94’, además de salir del olvido y dar a conocer a México y al mundo su “Ya Basta!”, en concreto, los zapatistas han solucionado en gran parte una de las demandas principales por las que se alzaron en armas, la tierra, “recuperado” miles de hectáreas pertenecientes a los peores rancheros(latifundistas)de Chiapas; han construido cientos de nuevos centros de población en esas tierras recuperadas, abriendo el camino a la solución concreta de otra importantísima demanda, la vivienda; han establecido los municipios autónomos en rebeldía en casi la mitad del estado; han formado su propio gobierno, las Juntas de Buen Gobierno o JBG ,como aplicación de su derecho de autodeterminación y autogobierno, derecho que siempre fue negado por las instancias gubernamentales que ostentan el poder político y económico del país; han logrado que estas JBG sean respetadas por zapatistas y no zapatistas de todo México; han formado sus propios sistemas de salud, educación, producción colectiva; han logrado enfrentar el problema del machismo y el reconocimiento del derecho de la mujer de una manera que resulta ejemplar para cualquier sociedad del mundo; han logrado…

Dentro de este contexto llegamos a Chiapas, una vez mas, mi compañera y yo, en octubre, para acompañar, compartir y ver con nuestros propios ojos la experiencia zapatistas. Esto no es mas que un intento de resumen de lo vivido en esos días y una expresión de deseo de compartirlo con quienes quieran acercarse un poquito a la realidad de Chiapas hoy.

Durante las casi cuatro semanas que estuvimos en el Caracol IV, Morelia, sentimos la intensidad con que se vive la lucha zapatista. La actividad y el movimiento en torno al Caracol es constante: gente que llega, gente que sale, gente que espera, reunión por aquí, asamblea por allá, encuentro de jóvenes en el auditorio, curso de salud mas allá arriba en la clínica, etc, etc y etc.

Llego el primer domingo y se hizo la rotación de los integrantes de la JBG. Estos cumplen su turno semanal de “buen gobierno”, de manera que es un gobierno colectivo, que rota constantemente ( cada domingo) garantizando la participación de todos los municipios que integran esa región; en este caso la región del Caracol IV, que lleva el nombre de “Torbellino de nuestras palabras”. De la misma forma trabajan en los otros cuatro Caracoles de las distintas regiones zapatistas.

Los integrantes de la JBG cuando salen de sus turnos no van a sus casas a descansar, ¡no!, van a atender los quehaceres de campesinos que dejaron postergados para ir a cumplir con el trabajo que el pueblo les asigno como autoridad en la JBG. No trabajan por sueldo, es un trabajo de conciencia, en todo caso la paga és la satisfacción de estar cumpliendo con su trabajos, de estar representando la voz de su pueblo, de “mandar obedeciendo” como dicen ellos; es el granito de arena que aportan para el desarrollo de la autonomía como pueblo indígena, campesino y zapatista.

La JBG gobierna para todos, no solo para los zapatistas, “Así esta el acuerdo”, nos dice un compa; porque los zapatistas no quieren una vida mejor para ellos, eso seria actuar dentro de la misma lógica del poder político y económico que los discriminó y los mantuvo en el olvido y la marginación por siglos (y lo siguen haciendo), sino que a lo que aspiran es a ” un mundo mejor”, así de simple. Constantemente se ven llegar al Caracol gente caminado o en autos de todos los lujos y tamaños o atestados en camionetas o hasta en camiones; esa gente es la que llega a plantear sus propuestas o discutir sus problemas con la JBG. Muchos de ellos no son zapatistas pero, ” aquí se los atiende y se les busca solución a sus problemas”, nos explica un compañero, “es que, problemas que los gobiernos o autoridades estatales tardarían años o jamás solucionarían, aquí se resuelven rápido”. Y es cierto y posible porque no hay desprecio, porque ” cada persona merece ser escuchada y atendida”… Y no es que la JBG tenga una caja de recetas para solucionar problemas, se trata de hacerse cargo del problema, de investigar, de hablar con las partes por igual y “sacar acuerdo” como dicen por allá. No es el humor o el rencor del funcionario que tiene poder y lo utiliza en contra de su adversario lo que norma y avala las soluciones, sino que es la voz de todo un pueblo hecho gobierno ( o el “gobierno del pueblo” si gusta mas).

Nos impresiono el esfuerzo y la voluntad de quienes van cumpliendo sus cargos de buen gobierno. Hay veces que las personas que tienen asuntos para tratar con las JBG no pueden llegar hasta la oficina en el Caracol, ya sea porque viven muy lejos y tienen algún impedimento físico, por no tener dinero para el pasaje o a veces por estar encarcelados, entonces una comision de la JBG se traslada hasta el lugar de los hechos para ver realmente de qué se trata. Este es el caso, por ejemplo, que nos platicó un miembro de la Comisión de Derechos Humanos de esta región y que nos demuestra la voluntad política de los zapatistas. En su relato, muy similar a tantos otros que nos contaron por estas tierras, el compa nos dice que al señor lo acusan de un asesinato que no cometió aparentemente y ya lleva días preso gracias al pago de testigos falsos y fraudes que cometieron los acusadores. Para atender este asunto el Defensor de Derechos Humanos tubo que caminar mas de cuatro horas en la montaña para llegar a la casa de la familia del preso, que ” ya no es zapatista, pero ni modos” ( o sea que pertenecía al EZLN y ya no pero, como decía anteriormente, se lo atiende sin distinción). Y así hemos visto varias veces como se trasladaban comisiones de la JBG por caminos de montañas, apretados en una camioneta o a veces en un “bochito” ( auto mas conocido en Argentina como “escarabajo”) o caminando por senderos y picadas escarpadas hacia distintos rumbos de la región para resolver problemas u otras cuestiones; el esfuerzo y el sacrificio que hay que hacer para atender los problemas no son excusa para ellos, lo importante es atender los problemas, hacerse cargo de ellos e ir resolviéndolos de la forma mejor y mas justa posible.

Además de los problemas por solucionar, la JBG atiende y coordina junto con las distintas Comisiones la implementación y desarrollo de los proyectos de producción, salud, educación, comercialización, etc Las comisiones están continuamente organizando cursos de capacitación y poniendo en práctica planes de trabajo en las distintas áreas. Hay un desarrollo constante y para lograrlo hay preparación y organización en todas las instancias, comunidad, promotores, comisiones encargadas del área, autoridades de municipios autónomos y JBG. Se ve en el Caracol y las comunidades como todos los hombres y mujeres doblegan esfuerzos para capacitarse, cumplir con sus trabajos colectivos y, por supuesto, seguir atendiendo sus trabajos de campesino y, en la mayoría de los casos, de padres de familia también.

A menudo los compañer@s hablan con orgullo de la salud y la educación autónomos y en verdad tienen sus razones.

Con respecto a la salud, ya son varias las clínicas funcionando en esta zona del Caracol IV (y en los demás Caracoles también según nos comentaron compañer@s). Y no son clínicas vacías. Además del aporte de doctores solidarios allí trabajan constantemente los promotores de salud de los municipios autónomos zapatistas atendiendo enfermos, produciendo y despachando medicamentos a precios mínimos o a veces regalado. Además cada pueblo cuenta con un promotor de salud y ya se esta extendiendo la formación de parteras que tradicionalmente atienden a las compañeras cuando dan a luz en sus comunidades para no tener que ir a sufrir el desprecio que muchas veces reciben en los hospitales estatales.

En la educación autónoma han logrado, no sin grandes esfuerzos y tropiezos, un gran avance. Cada pueblo cuenta con su escuelita primaria autónoma, de tres niveles de enseñanza determinados ” por capacidad y no por edades”, nos comenta uno de los promotores. Cada escuela cuenta con uno o mas promotores de educación que son nombrados por cada pueblo. A nivel secundario los siete municipios autónomos de esta región del Caracol IV ya cuentan con escuela secundaria ( aunque en un municipio todavía no esta finalizada) que garantiza un nivel superior de estudios. Allí pasan a modo de internado los niñas y niños que ya alcanzaron en la escuelita de su pueblo cierto grado de desarrollo educativo y están listos para intensificar sus conocimientos y formación en materias como matemáticas, geografía, humanismo, historia( la verdadera!), política, etc. Saliendo de la secundaria l@s estudiantes tienen la opción de seguir capacitándose en distintas áreas u ocupaciones como salud, educación y otras que resultan vitales para sus pueblo. En las evaluaciones de nivel o de promoción participan además de los maestros, los padres y miembros de la comunidad, ya que se trata de formación colectiva.. A todo esto se suma que han creado sus propios planes de estudios y hasta manuales de apoyo escolar en español y sus lenguas maternas. Estos planes de estudios son creados por las comisiones de educación y los promotores de educación de todos los niveles y en consulta permanente y bajo aprobación de la comunidad toda, por eso se ve reflejada el sentir de los pueblos zapatistas, su necesidad de rescatar su historia y su realidad como pueblos indígenas, su lucha y todos los valores y conocimientos que el pueblo crea necesario para formar seres con conciencia. Como nos dijo un compañero de la JBG “Aquí vamos a formar nuevos seres humanos con pensamiento mas humanitario”

La producción es uno de los pilares mas importantes de la autonomía zapatistas, que, junto y en constante relación con la salud y la educación, cubre gran parte de las necesidades de las comunidades. La producción autónoma abarca desde la agricultura orgánica hasta letrinas aboneras que producen abono orgánico a partir de los desechos humanos. Un compañero del área de tecnología apropiada nos explica que, “las letrinas son mas higiénicas y evitan enfermedades, además, producen muy buen abono orgánico a partir del desecho humano sólido mezclado con ceniza, hojas verdes y tierra en tan solo 6 meses!”, además nos enteramos que esto evita el uso de pozos comunes y la consecuente contaminación de las napas y el recurso mas preciado: el agua. Así la tecnología apropiada se relaciona con la salud y la educación, evitando enfermedades y concientizando a l@s compañ@s en la salud preventiva. El compa nos trae una cubeta con abono ya producido, una especie de arenilla gris y nos invita a revolverlo como muestra de lo que dice, “De modo que… lo que estoy tocando es…”, le digo al compa que no tarda en largar la carcajada al ver nuestra cara de asco.

En el área de agricultura manejan la elaboración de abonos orgánicos que, al igual que el abono de las letrinas mencionado, alimentan y fortalecen las milpas (maizales), frijolares, cafetales, frutales y huertas particulares y colectivas. Constantemente están capacitándose sobre agricultura ecológica y alternativa para proteger el cultivo natural criollo ante los transgénicos y enfrentar el problema de la destrucción y agotamiento de la tierra por el avance de agroquímicos. Por ser zona cafetalera y por representar el comercio del café uno de los pocos ingresos de dinero, se nota que han puesto mucho interés en el desarrollo y perfeccionamiento tanto del cultivo como de su comercialización. La cooperativa de café orgánico ” Tatahuelo” es una iniciativa regional que lo demuestra. Esta cooperativa esta integrada por cafeticultores de los siete municipios autónomos que abarca la región. A pesar de tener su licencia de “café orgánico” en tramite ya están exportando café a Europa a través de las redes de comercio justo y organizaciones solidarias y están vendiendo también a nivel regional y otras partes de México, lo que les permite establecer una relación comercial productor-consumidor mas directa y obtener una paga justa por el producto evitando la intervención de los legendarios “coyotes” ( revendedores), pagadores de precios ínfimos, que hacen que no valga la pena ni siquiera cortar el café de las plantas.

Siguiendo con la producción, hay taller de herrería que asiste con todo lo necesario para la casa y la construcción como son puertas, ventanas, rejas, fogones para cocina, etc.; esta el taller de zapatería para quien quiera calzar unos zapatos zapatistas ( y caminar con dignidad!, se me escapa); hay un colectivo de estufas económicas hechas con piezas de barro que consumen menos leña y tienen una tubería que saca el humo afuera y evita que las compañeras tengan problemas de vista; hay colectivo de ganadería que ya tiene su carnicería bautizada “Los pobres”, colectivo de hortalizas de mujeres en cada pueblo, tiendas cooperativas de mujeres… Y así podría seguir un buen tramo más escribiendo y describiendo tantos otros proyectos y trabajos colectivos que se desarrollan en los pueblos zapatistas; lo cierto es que, en cada rincón del Caracol y en cada rincón de los pueblos se ve como los hombres y mujeres, compañeras y compañeros de todas las edades y sin distinciones, no pierden el tiempo en teorías ni esperando que les lleguen las soluciones desde algún lado; construyen incansablemente, día a día, su autonomía.

Conclusión: No es que todo este resuelto, que todo haya alcanzado un grado óptimo de desarrollo, no, en absoluto. Es, se me ocurre, como una búsqueda de superación constante, de práctica continua. Cualquiera que llegue hasta allá va a comprobar que ésta práctica cotidiana en la que están implicados absolutamente todos y todas los campesinos de las comunidades zapatistas ( tal es el grado de compromiso), no es sólo discurso ni la idea u ocurrencia del sup Marcos ni nadie por sí solo. Es el compromiso y participación de todo un pueblo organizado para luchar por sus derechos; es la búsqueda continua de la dignidad que por siglos les fue negada y a la cual nunca renunciaron.

El sentimiento personal que recogimos es de muchísima alegría y esperanza. Esperanza de ver como es posible vivir con dignidad, como es posible producir y autogobernarse sin pedir permiso a autoridades políticas arrogantes, ilegitimas y lógicamente desprestigiadas; esperanza por ver que la autonomía es posible y los zapatistas lo están logrando.

Por Lucio. ( severino31@yahoo.com.ar)