La situación en Nicaragua está cada vez más complicada. Decenas de heridos y detenidos era el saldo que dejaban, hasta el momento, las protestas realizadas hoy en la capital, Managua, contra el gobierno de Enrique Bolaños, cuya renuncia fue pedida por la mayoría de los alcaldes del país.
Miles de estudiantes salieron a las calles de Managua para protagonizar violentas protestas contra las subas a los pasajes del transporte urbano, a las que se comenzaron a unir pobladores de los barrios más pobres.
La crisis que enfrenta Bolaños se vio agravada ante un manifiesto firmado por 96 de los 152 alcaldes del país, que le pidieron la renuncia ante su presunta incapacidad para hacer frente a las protestas.
Según fuentes policiales y estudiantiles, los enfrentamientos con la Policía dejaban al menos 13 detenidos y una cantidad no determinada de heridos por piedras, balas de goma o gases lacrimógenos.
Cientos de policías patrullaban constantemente Managua, que ha sido cubierta por el humo que levantan las gomas que universitarios y pobladores quemaron en varias avenidas de la ciudad, convertida en un caos.
Por su parte, los alcaldes indicaron en un manifiesto que: “Si el presidente no quiere o no puede asumir la responsabilidad para el cargo que fue electo, con todo respeto y seriedad le solicitamos que renuncie”.
El manifiesto, firmado por alcaldes del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, izquierda) y del Partido Liberal Constitucionalista (PLC, derecha), que dirige el ex presidente Arnoldo Alemán, fue leído por el alcalde de Managua, el sandinista Dionisio Marenco.
El comunicado fue emitido por los ediles organizados en la Asociación de Municipios de Nicaragua (Amunic).
http://www.clarin.com/diario/2005/04/25/um/m-964494.htm