Miles de maestro y trabajadores de la salud paralizan en Chiapas

04.May.05    Análisis y Noticias

Centenares de maestros afiliados a la sección 7 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), así como personal médico y administrativo adscrito a la sección 50 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSS), comenzaron este lunes un paro de labores indefinido en Chiapas, e instalaron un plantón en Tuxtla Gutiérrez para exigir mejoras salariales y gremiales.

Chiapas: maestros y trabajadores de Salud comienzan plantón indefinido

En Yucatán, profesores toman la Secretaría de Educación; exigen no rezonificar a inspectores de primaria

Los maestros de Chiapas en paro suman 43 mil, según el SNTE, pero el gobierno estatal sostiene que son 4 mil. A su vez, el SNTSS dijo que sólo se presentó a laborar el personal dedicado a servicios de emergencia, mientras las autoridades del área aseguraron que 90 por ciento de los hospitales laboraron “con normalidad”.

Pese a la disparidad de cifras, al menos 90 por ciento de los maestros federalizados cesaron labores en Tuxtla Gutiérrez y las principales ciudades del estado. Quienes sí impartieron clases colocaron mantas fuera de sus escuelas, en las cuales explicaron que trabajaron “bajo protesta” y que apoyaban el movimiento de su sindicato.

En clínicas y hospitales, cientos de personas que esperaban recibir atención hicieron filas para ser recibidas en el área de urgencia, mientras en la parte trasera de los nosocomios se desplegaron decenas de policías antimotines.

El secretario general de la subsección 03 del SNTSS, Gerardo Blanco, afirmó que “un 90 por ciento” de los 630 afiliados a esa organización en los Altos de Chiapas se sumaron a la movilización. “Exigimos que el presupuesto para el Sector Salud se incremente de 2.2 a 8 por ciento, ya que las carencias que tenemos son muchas”, dijo Blanco. Destacó que “en las farmacias de los centros ‘periféricos’ desde hace dos meses no tenemos ni paracetamol”.

El dirigente destacó que el paro de labores continuará hasta que el gobernador Pablo Salazar “se siente a negociar con nosotros, para llegar a un acuerdo”. Comentó que hasta la tarde del lunes no se había logrado un acercamiento con las autoridades estatales.

El movimiento de los gremios magisterial y de Salud comenzó este primero de mayo, con una marcha en la que participaron al menos 60 mil personas.

Miles de miembros del SNTE y el SNTSS instalaron un plantón en la plaza principal de Tuxtla Gutiérrez. Francisco Torres y Victor Hugo Zavaleta, dirigentes de los sindicatos magisterial y de Salud, respectivamente, dijeron esperar que Salazar los reciba, pues “es el único con poder de decisión” para tomar acuerdos concretos sobre sus peticiones.

La mañana del lunes, los líderes gremiales fueron invitados al palacio de gobierno para “una reunión”, pero al ser recibidos sólo por el subsecretario de Gobierno, Arturo Luna, se retiraron, no sin antes anunciar a gritos que sólo concluirán su movimiento “cuando se nos tome en serio”.

De su lado, la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma de Chiapas detuvo sus actividades durante 24 horas a partir del mediodía del lunes, en solidaridad con el SNTE.

Por la tarde, el gobierno de Chiapas afirmó en un comunicado: “de los 49 mil 237 maestros frente a grupo, quienes atienden a un millón 187 mil 697 alumnos en 11 mil 834 escuelas de educación básica y normal, sólo 7 por ciento no se presentó a laborar”, sobre todo en “comunidades marginadas, afectando a 82 mil 800 alumnos”.

Agregó que “las autoridades educativas reconocen que muchos de los maestros faltistas se encuentran coaccionados por la representación sindical, ya que de no asistir a las marchas y plantones son sujetos de sanciones económicas y al retiro de derechos”.

Sobre los trabajadores de Salud, el Ejecutivo chiapaneco aseguró que “todas las unidades hospitalarias están trabajando al 90 por ciento; estamos aplicando el plan de emergencia ante situaciones como ésta, de tal forma que se garantizará la atención médica a toda la población”.

En cuanto al gran despliegue policiaco en torno al Hospital Regional de Tuxtla, el gobierno estatal argumentó: “esta instalación seguirá bajo resguardo porque es el punto neurálgico en materia de atención, y por lo tanto la suspensión de las actividades en este edificio pone en peligro la salud de la población”.

La guerra de declaraciones entre sindicalistas y el gobierno de Chiapas comenzó hace tres meses, cuando los maestros presentaron un pliego petitorio con casi cien demandas. Las autoridades consideraron que la mayoría de las peticiones eran de carácter federal, por lo que correspondía resolverlas a ese nivel de gobierno.

Pablo Salazar además ha tenido diferencias con el SNTSS, debido a las constantes denuncias del gremio en referencia a la carencia de insumos y suministros para laborar.

Por otra parte, maestros de las secciones 33 y 57 del SNTE -que encabezan Raúl Méndez y Silvia Alamilla, respectivamente- tomaron las instalaciones de la Secretaría de Educación Estatal (SEE) de Yucatán y anunciaron que impedirán durante tres días que los empleados ingresen al edificio, incluyendo a la titular de la dependencia, Carmen Solís. Su principal demanda es “erradicar la rezonificación de inspectores de educación primaria”, que “limita la influencia del gremio sindical y deja libre el manejo de plazas para los funcionarios educativos”.

Méndez y Alamilla anunciaron que la movilización continuará hasta el miércoles y destacaron que los profesores no cesarán sus labores, pues quienes trabajan por la mañana resguardarán el edificio de la SEE durante las tardes y viceversa.

Además de repudiar la rezonificación, los maestros yucatecos piden que la administración estatal cambie del tabulador salarial (de 2 a 3) a los profesores de 91 municipios de la entidad, rezagados desde hace 20 años en prestaciones económicas.