Más de 15 mil indígenas del sur tolimense se movilizarán en defensa de la vida, el territorio, la unidad, la identidad y la autonomía.
Minga significa convite, unidad, solidaridad, tolerancia y pluralismo en la acción para expresar la resistencia y la exigencia de los derechos ancestrales y populares. Entonces, los resguardos indígenas del Tolima, integrantes de la Asociación de Cabildos y Autoridades Tradicionales del Consejo Regional Indígena del Tolima, CRIT, las organizaciones de la Mesa Permanente de organizaciones Sociales, las organizaciones campesinas y los sectores populares agrupados en un gran torrente humano, marcharán los días 23, 24 y 25 de agosto.
El día 26 efectuarán la primera asamblea indígena, campesina y popular del Tolima, como paso importante hacia la construcción de una alianza que permita iniciar un proceso de cambio y resistencia en el Tolima, en unidad con el Congreso itinerante del sur occidente colombiano. La marcha partirá desde los territorios del sur del Tolima y culminará en Ibagué donde se exaltará la consigna Otra Colombia es posible y las propuestas nacionales de diálogo y solución política.
Cansados de la guerra
Las comunidades ancestrales del Tolima informaron sobre quienes integrarán la jornada y sus propósitos: “Son las voces de todos y todas, queremos levantarnos para hacer resistencia civil a la violencia, para que entre todos detengamos esta avalancha de conflicto en que estamos atrapados por causa de un modelo desarrollo que hoy se hunde liderado por un Gobierno que piensa más en los intereses extranjeros y particulares, que en su propio pueblo…”.
Señala más adelante: “Debemos gritar ¡basta ya! A las grandes empresas capitalistas que están acabando con nuestro propio ambiente, contaminan nuestras aguas, nuestro aire, destruyen nuestros bosques, niegan la diversidad étnica y cultural y pretenden la uniformidad y el unanimismo. En fin, desean una aldea global sin diferencias”.
En defensa de la vida
En cuanto a su lucha ancestral anuncian que se movilizarán “…porque quieren despojarnos de nuestro territorio e imponernos otra cultura: la cultura del mercado y del capitalismo. Para defender la vida y el territorio; para asegurar un mundo digno y mejor para nuestra descendencia, porque estamos en contra de cualquier Estado autoritario y para que no nos involucren en la guerra”.
Los organizadores de la marcha afirman además que el actual Estado autoritario se piensa consolidar con la reelección presidencial y las reformas constitucionales que lesionan los intereses populares. Llaman a los integrantes de la misma y a quienes se vinculen a ella desde los espacios cívicos, sindicales y populares a organizar a los caminantes desde las comunidades, capacitar a los integrantes de la marcha sobre los objetivos que ésta tiene, almacenar comida, preparar las medicinas, organizar la guardia indígena, campesina y popular, almacenar leña, conseguir timbos, calabazos y vasijas para agua, preparar la chicha y desde luego acompañar la marcha con expresiones culturales y artísticas.