SOMOS PUEBLOS DE LA TIERRA. SOMOS PUEBLOS DE VIDA. SOMOS PUEBLOS EN RESISTENCIA

10.Ago.05    Análisis y Noticias

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Con música en vivo de Chicote (MÚSICA ANCESTRAL KANKUAMA), videos que evidencian la problemática de varios pueblos indígenas de Colombia, cuyos casos son referente de lo que está sucediendo en todo el país, la Organización Nacional Indígena de Colombia, ONIC, conmemoró el Día Internacional de los Pueblos Indígenas.

Con la presencia de varios delegados de Embajadas, Organizaciones de Derechos Humanos, representantes de varios pueblos indígenas y los medios de comunicación, en la Cinemateca Distrital de Bogotá, el Presidente de la ONIC, Luis Evelis Andrade Casama, dio a conocer un documento que condensa la problemática a nivel general.

En su intervención Andrade Casama, afirmó que “En solo lo que va corrido del 2005, 9 mil 250 compañeros han sido amenazados; 16 desaparecidos; 124 detenidos arbitrariamente; 111 heridos; 66 asesinado; 14 secuestrados; 18602 miembros de nuestras comunidades (Nasa, Inga, Awa, Embera, Katio, Chami, Eperara Siapidara, Pasto, Betoye, Cofan ) se han visto obligados a desplazarse y hemos sido señalados 10025 veces. Los cultivos para la alimentación de por lo menos 10 pueblos han sido fumigados con glifosato, causando la muerte de dos niños Eperara Siapidarta.

Hemos sido víctimas de todos los actores del conflictos en primer lugar los paramilitares (37.9%), por las Fuerza Pública (24.0%) y por la guerrilla (15.2%) Otros grupos criminales sin identificar acumulan el 22.7% de las violaciones”

Dicho documento fue respaldado con imágenes de cómo ha afectado y afecta las fumigaciones a los territorios indígenas, la resistencia del pueblo Nasa, lo arrasador que ha sido el Megaproyecto Urra I para los Emberas y la intervención de quien en vida fuera el coordinador de DDHH de la Organización Indígena Kankuama de la Sierra Nevada, Fredy Arias Arias, quien hace un año fue asesinado por las AUC en Valledupar.

Por tanto cuatro son los desafíos que asumimos los pueblos indígenas: Avanzar en desarrollar nuestra autonomía y gobiernos propios; Asegurar nuestras condiciones, tanto materiales como espirituales de producción y reproducción, de nuestras culturas y pueblos: Asegurar mayores niveles de participación en las decisiones que tomen los gobiernos en el ámbito local, regional y nacional y, Fortalecer los ejes articuladores de nuestras identidades como pueblos.

COMITÉ EJECUTIVO ONIC

Para mayor información le anexamos el documento denominad “SOMOS UN PUEBLO DE LA TIERRA, SOMOS PUEBLOS DE VIDA, SOMOS PUEBLOS EN RESISTENCIA”.

SOMOS PUEBLOS DE LA TIERRA
SOMOS PUEBLOS DE VIDA
SOMOS PUEBLOS EN RESISTENCIA

Comité Ejecutivo ONIC
Bogota D.C, Agosto 9 de 2005

Hoy cuando se conmemora un día internacional más de los pueblos indígenas, la Organización Nacional Indígena de Colombia, ONIC, desea explicar el porque consideramos que nuestro proceso de resistencia se da a la medida del arco iris de nuestros sueños.

En primer lugar en los últimos años se ha dado un replanteamiento de la visiónque tenia el Estado colombiano en torno al carácter de su sociedad. Hasta 1991 existió como marco jurídico una constitución que caracterizaba a la nación como homogénea culturalmente que imponía autoritariamente un país cerrado a toda expresión de la diversidad cultural, social, religiosa o sexual; que invisibilizaba y trataba de integrar o asimilar las diferentes expresiones socioculturales de la sociedad. Contra ello, los pueblos indígenas, luchamos con el acompañamiento que nos brindaron importantes sectores de la sociedad por primera vez en la historia del país somos culturas visibles, algo que no se explican ni entienden muchos teóricos de los grandes poderes que dominan el país. Esos intelectuales no entienden ni se explican nuestros logros pues creen que el movimiento indígena surgió a finales de la década de los sesenta.

Se les olvida que nuestro proceso surge como respuesta a un hecho histórico concreto: el robo de nuestro territorio y de nuestras riquezas, que se inicio con la conquista y colonización del continente americano por parte de los europeos y que aun continúa. Nuestras luchas se han dado por el reconocimiento de nuestra identidad, territorio, cultura y autonomía. En últimas; porque nuestra resistencia es para seguir existiendo como culturas vivas. De nuestra existencia depende el conocimiento y la cultura que permite la sostenibilidad de nuestros ecosistemas.

Es por ello que los procesos de resistencia de los pueblos indígenas de Colombia se han ido transformando de acuerdo al contexto al que nos ha tocado vivir.

Lo anterior explica el porqué en la actual situación nuestros procesos de resistencia giran en torno a como lograr la paz y la democracia en nuestro país, para dar respuesta a las tensiones que se viven en las comunidades por el impacto no solo del conflicto armado y de la violencia estructural que afecta a los pueblos indígenas de Colombia sino que son igualmente escenarios de resistencia para oponerse a hechos concretos como el Tratado de Libre Comercio; los megaproyectos; el despojo de nuestros territorios; la satanización de nuestras organizaciones; el desconocimiento de nuestros derechos fundamentales; la acción de la economía ilegal; el reclutamiento de sus miembros por parte de grupos insurgentes y contrainsurgentes; la presencia en sus territorios de personas armadas y la corrupción. Porque todo ello viola, tanto nuestra autonomía como nuestra cultura.

Sin embargo este proceso de resistencia y lucha por nuestros derechos ha tenido grandes costos sociales, para los pueblos indígenas, materializado en masacres (como la del Nilo), desapariciones (Kimy Pernia Domico), confinamiento (Chimilas, wiwas), desplazamiento forzado (Awa) racionamientos, ataques y estigmatización de los políticos tradicionales y de los funcionarios del estado (pronunciamientos de los altos mandos militares) pero ante todo son sujetos de un proceso sistemático de recorte de los derechos y conquistas por parte del gobierno colombiano.

En solo lo que va corrido del 2005 9250 compañeros han sido amenazados; 16 desaparecidos; 124 detenidos arbitrariamente; 111 heridos; 66 asesinado; 14 secuestrados; 18602 miembros de nuestras comunidades (Nasa, Inga, Awa, Embera, Katio, Chami, Eperara Siapidara, Pasto, Betoye, Cofan ) se han visto obligados a desplazarse y hemos sido señalados 10025 veces. Los cultivos para la alimentación de por lo menos 10 pueblos han sido fumigados con glifosato, causando la muerte de dos niños Eperara Siapidarta

Hemos sido víctimas de todos los actores del conflictos en primer lugar los paramilitares (37.9%), por las Fuerza Pública (24.0%) y por la guerrilla (15.2%) Otros grupos criminales sin identificar acumulan el 22.7% de las violaciones.

Los departamentos de Cauca, Putumayo, Nariño, Córdoba, Valle del Cauca, Magdalena, Arauca, Choco y la Guajira es donde mas se presentan, en la actualidad, violación a nuestros derechos humanos y al DIH, Estos Departamentos, son curiosamente, piloto de la política de seguridad democrática.

Es por eso que hemos venido repitiendo que esta política no es la salida real a la guerra ni garantiza la seguridad y pervivencia de los pueblos indígenas. Mucho menos la solución para la recuperación del control del orden publico por parte del gobierno.

Viviendo el abandono de nuestros gobiernos hemos logrado llamar la atención de la comunidad internacional. Justamente hoy estamos conmemorando el día de los pueblos indígenas por decisión de las Naciones Unidas. Estamos iniciando el segundo decenio de los pueblos indígenas a pesar de lo cual nuestra población vive, según el mismo organismo mundial “en inaceptables niveles de pobreza y enfermedad hasta el desposeimiento, la discriminación y la negación de los derechos humanos básicos”

Es por lo anterior que nos corresponde confrontar cuatro desafíos fundamentales:

· Avanzar en desarrollar nuestra autonomía y gobiernos propios;

· Asegurar nuestras condiciones, tanto materiales como espirituales de producción y reproducción, de nuestras culturas y pueblos.

· Asegurar mayores niveles de participación en las decisiones que tomen los gobiernos en el ámbito local, regional y nacional y,

· Fortalecer los ejes articuladores de nuestras identidades como pueblos.

Sin olvidar que estos desafíos van unidos a los de todo el pueblo colombiano que son los de: Independencia, Democracia, Justicia, Equidad y respeto por la Diversidad. Por ello pedimos paz para los pueblos indígenas, paz para Colombia, justicia para los pueblos indígenas, justicia para Colombia; dignidad para los pueblos indígenas, dignidad para nuestro país. De esta forma plantemos construir un camino conjunto con toda la sociedad colombiana para que nuestra sociedad sea justa y equitativa.

LUIS EVELIS ANDRADE CASAMA
Presidente ONIC
CEL: 315-8572995