México.
14 agosto 2000.
El Ejército Revolucionario del Pueblo Insurgente (ERPI) aclaró vía internet que no depondrá las armas y llamó a construir un “poder popular”.
De este modo, el ERPI contestó a los exguerrilleros de los años 60 y 70 que formaron parte de los grupos Liga Comunista 23 de Septiembre, Partido de los Pobres, Liga Espartaco y Movimiento de Izquierda Revolucionaria, reunidos el 20 de junio del presente año en el Instituto Federal Electoral (IFE).
Dichos grupos se comprometieron a “trabajar intensamente para lograr la paz en México, por el respeto a los derechos humanos y la consolidación de las instituciones fundamentales para la vida del país, además de hacer un llamado a los grupos armados para que dejen esta lucha”.
Consecuentemente, el ERPI rechaza igualmente la intermediación del IFE para llegar a un acuerdo que lo reincorpore a la vida civil.
Para el ERPI, la derrota electoral del PRI en los pasados comicios del 2 de julio no representa ninguna transición democrática sino “cambios diseñados para no cambiar nada”.
“Para poder hablar de transición democrática –señala el ERPI- el pueblo tiene que ejercer la democracia en todos los ámbitos políticos y en todas las decisiones económicas”.
“Hagamos valer –concluye el ERPI- la organización democrática y autónoma. En todos los ámbitos y áreas de la vida nacional, se trata de desarrollar la autogestión, poniendo el poder directamente en manos de la gente. Para nosotros, la lucha continúa por hacer una realidad, por el verdadero control popular del Gobierno y todos los centros administrativos, de trabajo y de vida ciudadana”.