Marco Antonio Suástegui (al micrófono), vocero de los comuneros opositores a La Parota, en asamblea permanente donde reiteraron su rechazo a la aprobación del proyecto FOTO Misael Habana de Los Santos
La Jornada
El Consejo de Ejidos y Comunidades Opositoras a La Parota (CECOP) declaró “la guerra” a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y al gobierno de Guerrero, e informó que cerró los accesos a los bienes comunales de Cacahuatepec para todas las corporaciones policiacas y los trabajadores de la paraestatal. Además, con el fin de demostrar que son mayoría, los inconformes convocaron al gobernador Zeferino Torreblanca Galindo -quien expresó su beneplácito por la aprobación del proyecto en un cónclave que los manifestantes consideran “amañado”- a realizar una asamblea definitoria en la que se precise el destino de la presa.
Unos 300 comuneros, instalados en asamblea permanente en la comunidad Agua Caliente, municipio de Acapulco, afirmaron por conducto de su vocero, Marco Antonio Suástegui, que consideran “ilegal” la asamblea efectuada el martes en la cabecera municipal de San Marcos y desconocen todos los acuerdos tomados ahí, como dar acceso a la CFE para iniciar la expropiación de tierras requeridas para la hidroeléctrica.
Los inconformes aseguraron que la asamblea del martes fue “ilegal, amañada y fuera de nuestra organización de los bienes comunales”, y por ello comenzaron una “resistencia total contra La Parota”. Además sostuvieron que la CFE pagó a comuneros y líderes para asistir a la reunión en San Marcos.
“Nos declaramos en guerra contra el gobierno. Esta ya no puede ser una lucha legal, será de poder a poder, de la CFE y del gobierno de Torreblanca contra los campesinos, de los pobres contra los ricos, de los extranjeros contra los indios, de los entreguistas contra quienes defendemos nuestra tierra”, manifestaron.
Los descontentos anunciaron una megamarcha en Acapulco la próxima semana e invitaron a organizaciones sociales y sindicatos. El vocero acusó al secretario general de Gobierno, Armando Chavarría, de hostigamiento. “Me dijo que vendiera la lucha, y de no acceder giraría órdenes de aprehensión”, denunció.
Por su parte, el gobernador saludó la aprobación de los campesinos de bienes comunales de Cacahuatepec, y pidió a los opositores “conducirse con civilidad y sin violencia” por este resolutivo.
En conferencia de prensa que ofreció en Acapulco, acompañado por el director de Proyectos de Inversión Financiera de la CFE, Eugenio Laris Alanís, el mandatario insistió en que el proyecto “va por buen camino” y sólo falta que la paraestatal se ponga de acuerdo con los campesinos afectados “para ver de qué manera van a aceptar los convenios de indemnización” por la expropiación de sus tierras, ubicadas en la región de la Costa Chica.
“La Comisión Federal de Electricidad informa que se van a expropiar 14 mil hectáreas, de las cuales mil 300 se ubican en la comunidad de Cacahuatepec; esto se ubica en 19 núcleos agrarios que también van a ser afectados por las construcciones, que son propiedad de 10 poblaciones cercanas, por lo que podemos anunciar que nos comprometemos a construir 800 viviendas para igual número de familias afectadas directamente por la presa”, puntualizó Laris Alanís.
Mientras, en Chilpancingo, organizaciones agrupadas en El Espacio de Derechos Económicos Sociales y Culturales se dijeron preocupadas por los resolutivos de la asamblea efectuada en San Marcos, y exigieron a Torreblanca “actuar con apego a derecho”.
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www.suracapulco.com.mx/laparota.htm
Acuerdan opositores reforzar los plantones para que no entre la CFE
Los comuneros opositores al proyecto hidroeléctrico La Parota dijeron que jamás abandonarán sus tierras y que “la guerra” con el gobierno del estado y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) está declarada.
Al finalizar la asamblea de más de 300 comuneros en la comisaría de Agua Caliente, se abrió un espacio para una conferencia de prensa, donde esta reportera preguntó cuál es la opinión de los opositores a las declaraciones del director de la CFE, Alfredo Elías Ayub, quien en diversos noticieros de radio nacional, tras festejar el resultado de la asamblea del martes, dijo que sí se va construir la presa en Guerrero.
El portavoz de los opositores, Marco Antonio Suástegui, respondió: “ Nosotros cuando empezamos esta lucha sabíamos que no era una lucha de velocidad, de ver quién llegaba primero, sino una lucha de resistencia. Nosotros sabemos que ellos tienen miedo ya que si no se aprueba la presa en diciembre o principios del 2006 se dará por cancelado el proyecto, y esa es la prisa que lleva Elías Ayub, quien ya se siente dueño de las tierras”.
Agregó: “Mas le decimos que llevamos dos años en la lucha, que no se le olvide, y si es necesario hasta un año, dos, tres o 10 años mantendremos los plantones, así lo vamos hacer. Nosotros no tenemos prisa, hemos estado en Cacahuatepec por cien años y lo seguiremos estando, porque no nos van a quitar la tierra”.
Señaló que los opositores tienen la capacidad para mantener la lucha, y “hemos dicho que no estamos peleando el precio de las tierras, estamos pelando nuestras tierras y no pueden comprar lo que no está en venta”. Se escuchó un ensordecedor grito de “Duro, duro”, “Campesinos unidos, jamás serán vencidos” o “No queremos dinero, queremos nuestras tierras”.
Prohíben la entrada a policías
Marco Antonio Suástegui Muñoz leyó una documento con nueve puntos, entre los que resaltan que prohíben la entrada de cualquier corporación policíaca a las tierras de Bienes Comunales de Cacahuatepec y no se hacen “responsables de lo que le pueda pasar”. Señala dicho punto que por eso tienen a la Policía Comunitaria y precisa que el acuerdo fue tomado por las autoridades.
También se declararon en resistencia total contra la presa y desconocieron todos los puntos acordados en la asamblea del martes en San Marcos y además anunciaron nuevos plantones permanentes, uno de ellos el de Agua Caliente para evitar que las camionetas de la paraestatal entren a la zona.
Los opositores en otro punto demandan al arzobispo de Acapulco –a quien calificaron del principal promotor del proyecto– Felipe Aguirre Franco, que deje de opinar sobre el tema, pues no le corresponde. Precisaron que son católicos y quieren que su Iglesia se aplique en lo que es su papel y luego se cuestionan qué intereses tiene con el gobernador Zeferino Torreblanca y la paraestatal.
Se anunció una marcha para la próxima semana y responsabilizó al gobierno del estado, en específico a Armando Chavarría de cualquier cosa que pase a los opositores.
Ayer, más de 300 opositores se reunieron en la comisaría de Agua Caliente y en ellos se percibía el coraje y la indignación por los hechos violentos del martes en San Marcos.
De repente se escuchó el grito unánime “No a la presa La Parota” y la advertencia que “sobre nuestro cadáver pasará la CFE” y declararon la guerra contra los que –dicen– les quieran arrebatar sus tierras, “las que nunca han tenido un signo de pesos”.
A la asamblea acudieron las autoridades municipales, entre ellas el comisario de Amatillo, Camerino Delgado Salgado; de Sal Si Puedes, Jesús Rayón; de Garrapatas, Pedro Valente Jacinto; de Tasajeras, Hermilio Loeza Hernández; de El Rincón, Dionisio Angelina Salas; Mario Quiñónez de Dos Arroyos; Silvstre Hernández Calixto de Agua Caliente, entre otros.
En una asamblea cargada de emociones, Marco Antonio Suástegui exigió al líder de la CNC Evencio Romero, que deje de decir que no es comunero y para demostrarlo a su lado se encontraba el ex secretario del comisariado de los Bienes Comunales de Cacahuatepec, Pedro Suástegui Valeriano, padre de Marco Antonio. Con lágrimas abrazó a su hijo y éste le dijo con voz quebrada por las lágrimas “espero que estas lágrimas no se conviertan en mi sangre”. Luego se escuchó un ensordecedor “no estás solo Marco”, de los opositores.
Después dijo: “Quiero aclarar que es mentira que el secretario de Gobierno Armando Chavarría me haya propuesto otra asamblea, él quería que me reuniera en lo oscurito con el gobernador, lo que no aceptamos, pero le vamos aceptar la palabra”.
“Le quiero mandar a decir al gobierno de Zeferino Torreblanca que los opositores lo retamos a una asamblea legal donde no entre ni la policía, para retenernos, ni la Comisión Federal de Electricidad (CFE) con su dinero y comprando conciencias.
“Vamos a demostrar que somos mayoría y lo retamos a una asamblea aquí en Agua Caliente y con puros comuneros. Allí definiremos de una vez el destino del proyecto La Parota y quién de verdad es mayoría. Aquí nos veremos las caras y decidiremos el futuro de La Parota”.
A pregunta de cuál sería la condición dijo: “Únicamente no queremos policías, con los puros comuneros y el padrón original del RAN y las mesas de inscripción serán vigiladas por opositores y por los supuestos comuneros que están a favor.
–¿No es arriesgarse? –se le preguntó.
–Nos las vamos a rifar en una asamblea legal, pero no queremos a Evencio Romero, sólo comuneros y si quiere que venga el gobernador. Vamos a aceptar el reto de Armando Chavarría, el cual dice que me propuso y no fue cierto. En una asamblea legal hay que definir el proyecto y aquí no hay pretexto del gobierno. Vamos a ver quién es mayoría.