A la Comandancia General-Comité Clandestino Revolucionario Indígena del Ejército Zapatista de Liberación Nacional
El 1° de enero de 1996, en su IV Declaración de la Selva Lacandona, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional convocó a la organización del Frente Zapatista de Liberación Nacional. Finalizando la segunda parte de las tres que conformaban dicha declaración, después de nombrar las características políticas que tendría la nueva organización a que estaban convocando, ustedes escribieron lo siguiente: “Con la unidad organizada de los zapatistas civiles y los combatientes zapatistas en el Frente Zapatista de Liberación Nacional, la lucha iniciada el 1° de enero de 1994 entrará en una nueva etapa. El EZLN no desaparece, pero su esfuerzo más importante irá por la lucha política. En su tiempo y condiciones, el EZLN participará directamente en la formación del Frente Zapatista de Liberación Nacional.”
20 meses después, durante el Congreso de Fundación del FZLN celebrado en la ciudad de México y al que asistieron como observadores los 1111 delegados zapatistas que habían salido de las montañas del sureste, el EZLN explicó lo siguiente: “… Muchos se preguntan por qué hemos venido sólo a observar su congreso y no a participar directamente en él. Muchos se preguntan por qué, en los últimos días, hemos declarado una y otra vez que el EZLN no formará parte del FZLN y que seremos dos organizaciones hermanas, pero distintas… Cuando llamamos a la formación del FZLN pensábamos que la paz estaba cerca y que nuestra rebeldía tenía que buscar nuevos caminos y formas de lucha para continuar su empecinado andar…. Pensábamos que en poco tiempo estaríamos como ustedes y junto a ustedes. Con la misma rebeldía frente al poderoso, pero sin armas necesarias… Con la misma dignidad para el mañana, pero sin el rostro escondido por el negro del dolor o el rojo de la sangre. Pero nos equivocamos hermanos y hermanas frentistas… La paz no estaba cerca. La paz sigue lejana. Antes y ahora el gobierno usó y usa la mentira de una paz que no imagina más que como rendición y castigo. Pero tampoco podemos seguir deteniéndolos ni pidiéndoles que nos esperen, que no avancen, que no crezcan, que no se hagan grandes, que no se organicen hasta que haya paz justa y digna y el EZLN pueda compartir con ustedes presente y futuro. No será una fuerza militar la que dirija sus pasos civiles y los ponga en riesgo. Esto no debe ni puede ser así.”
Más de 8 años después, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional lanza la Sexta Declaración de la Selva Lacandona y junto con varios miles más de mexicanos y mexicanos, emprende la construcción de lo que se ha llamado la Otra campaña. Y entonces, como mero lo dicen en la VI Declaración, van a hacer, entre otras cosas, lo que sigue: “Vamos a ir a escuchar y hablar directamente, sin intermediarios ni mediaciones, con la gente sencilla y humilde del pueblo mexicano y, según lo que vamos escuchando y aprendiendo, vamos a ir construyendo, junto con esa gente que es como nosotros, humilde y sencilla, un programa nacional de lucha, pero un programa que sea claramente de izquierda o sea anticapitalista o sea antineoliberal, o sea por la justicia, la democracia y la libertad para el pueblo mexicano.
En resumen, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional va a salir directamente a hacer política, una nueva forma de hacer política, por todos los rincones del país.
Y entonces, en el Frente Zapatista de Liberación Nacional nos juntamos con ustedes, compañeros del EZLN, que fueron quienes nos convocaron a formar la organización y nos dieron nombre, y en esa reunión vimos que el FZLN había cumplido en la etapa que fue desde la IV Declaración hasta que salió la Sexta, pero que ahora la nueva etapa nos quedaba muy grande para lo que se venía. Así que hicimos una consulta interna entre todas y todos los militantes del FZLN y de ahí salió lo siguiente:
De los 127 comités civiles de diálogo que conforman nuestro FZLN, 123 se pronunciaron por que se disuelva completamente el FZLN como organización política nacional y se le devuelva el nombre a los compas del EZLN.
3 ccds dijeron que había que mantenernos como organización pero con otro nombre, aunque dos de ellos resaltaron que si la mayoría aceptaba otra cosa, ellos también la asumían.
Y uno dijo que no se pronunciaba por algo en concreto, sino que renunciaban al FZLN.
Además, 9 frentistas de manera individual se pronunciaron por la opción de disolver el FZLN y regresar el nombre al EZLN.
Así pues, el acuerdo tomado por mayoría, y que les queremos comunicar, es el siguiente:
El Frente Zapatista de Liberación Nacional se disuelve totalmente como organización política y le devuelve su nombre al Ejército Zapatista de Liberación Nacional para que éste a su vez decida que hacer con él. Los comités o individuos que así lo decidan podrán mantenerse juntos en cada localidad y adherirse a la sexta y a la otra campaña, pero ya sin usar el nombre de comité del FZLN.
Por último, queremos decirles queridos compañeros y compañeras del EZLN y de todas las comunidades indígenas zapatistas, de los municipios autónomos zapatistas, de las Juntas de Buen Gobierno, que ha sido un honor para las y los frentistas el haber caminado con el nombre que nos dieron durante todos estos años. Sabemos que cometimos muchos errores y que no siempre nos salieron las cosas como pensábamos y como deberían de haber salido, pero todo lo que hemos aprendido de ustedes y su digna lucha por un México y un Mundo mejor para todos, seguramente será un primer paso que nos servirá para sumarnos a este caminar que ahora están iniciando con la otra campaña y en la cual intentaremos también estar, para colaborar desde cada uno de nuestros espacios, junto con miles más, en la construcción de un México más justo, más libre y más democrático, desde abajo y a la izquierda.
Frente Zapatista de Liberación Nacional
México
Octubre del 2005