Álvaro García Linera «Se va a gobernar para toda Bolivia»
El sociólogo y matemático explica que se preparan medidas importantes en los sectores sociales, económicos y de reformas institucionales destinadas a generar confianza en la población. En los próximos días se reunirán con sectores sociales y empresariales. Rechaza los plazos de la COB
Tras los festejos, reuniones. Luego de conocer su contundente victoria en las urnas, la cúpula del Movimiento al Socialismo sostuvo ayer intensas reuniones en La Paz para comenzar a delinear su programa de gobierno y el nuevo gabinete de ministros. En un receso de esas juntas, Álvaro García Linera habló en exclusiva con EL DEBER.
- ¿Cómo se ha recibido al interior del MAS la victoria?
- Es una gigantesca responsabilidad, es mucho… Es la mitad del electorado que nos dice “oigan señores, tenemos un mismo norte”. Por primera vez Bolivia se pone de acuerdo en torno a lo que quiere y recibimos con enorme agradecimiento esa delegación de confianza. El pueblo ha sido sumamente sabio y no sólo ha apostado a un cambio, a un nuevo modelo de economía y de política, sino que nos ha dado la gobernabilidad parlamentaria necesaria para que eso se viabilice. A esta generosidad tenemos que responder con un ejercicio serio y responsable del poder político.
- Antes de aceptar la postulación a la vicepresidencia, usted dijo que el nuevo gobierno debe lanzar medidas de shock para generar confianza en la población. En el caso del MAS, ¿cuáles serán esas medidas?
- Básicamente tienen que ser medidas en tres grandes áreas: en el ámbito económico con reformas en el tema hidrocarburos y generación de empleo, en el ámbito político con la Asamblea Constituyente, la austeridad y en el ámbito de reformas institucionales que viabilicen estas medidas.
- Cuando habla de austeridad, ¿se refiere a reducir los sueldos en el aparato estatal?
- Sí, pero no es todo el aparato, sino en los altos cargos públicos. No se puede afectar a los mandos intermedios, de profesionales, de técnicos, de gente de carrera que le ha costado mucho llegar hasta donde está.
- Los sectores sociales ya han anunciado sus demandas. El primero fue la Central Obrera Boliviana, que les dio plazo hasta abril para cumplirlas antes de iniciar movilizaciones, ¿Cómo reciben estas declaraciones?
- Tenemos un plan de gobierno que vamos a cumplir sin basarnos en amenazas ni chantaje alguno, menos aún si vienen de una institución como la COB, que está tremendamente debilitada en su liderazgo, en su fuerza de movilización y en su representatividad. La respetamos como institución, hemos recogido parte de sus demandas, pero no aceptamos que nadie nos venga a poner plazos. No tienen la moral ni el derecho a colocarnos plazos.
- En los gremios empresariales de Santa Cruz se ve en la elección de Costas como prefecto una forma de control al poder del MAS, ¿cómo asumen el reto de gobernar con prefectos que no necesariamente responden a su línea partidaria?
- Lo vemos como pesos y contrapesos que la población nos ha colocado, como una señal sabia del electorado. Asumimos ese reto y nuestro compromiso es dialogar con todas las prefecturas y viabilizar sus gestiones. Celebramos que éste sea el inicio de un proceso autonómico del Estado, con el cual nos comprometemos. Pero a la vez, nos comprometemos a dialogar con los sectores empresariales. En los próximos días vamos a asistir y a convocar a una serie de reuniones con sectores sociales y empresariales, porque se va a gobernar para toda Bolivia, no para un sector o una clase social. Se van a instalar negociaciones directas con los empresarios y de ellas vamos a recoger recomendaciones, las cuales vamos a implementar como medidas. Ningún sector del país debe sentirse excluido y mucho menos el sector empresarial.
- La Federación de Empresarios Privados de Bolivia les pide que firmen el TLC con EEUU, sin descuidar los mercados asiáticos, ¿lo harán?
- El tema de Asia lo vamos a viabilizar de manera inmediata, porque hay que diversificar nuestros mercados. En el tema del TLC con EEUU, vamos a renegociar los términos del tratado, para que se garantice la ampliación de nuestras exportaciones -básicamente en las áreas de textiles, joyas en oro y muebles-, pero a la vez queremos proteger a otros sectores que no son tan altamente competitivos y en los que se deben mantener barreras proteccionistas por muchos años.
- ¿La soya es uno de ellos?
- No sólo hablo de la soya, sino también de los sectores campesinos y pequeños agropecuarios que hoy serían seriamente afectados por un TLC. Hay que trabajar con los dos pies, con el de nuestros exportadores, eficientes y competitivos, y con el pie de otros sectores que requieren un conjunto de protecciones que le den tiempo para mejorar su rendimiento.
- Hay analistas de EEUU que ven ciertos paralelismos entre Chávez y Morales y que temen que Evo tenga aspiraciones totalitaristas, ¿qué les dice a ellos?
- Que no entienden la realidad boliviana, que es altamente plural con una sociedad civil muy activa y diversa. Tenemos movimientos sociales, cívicos, regionales y corporaciones empresariales muy fuertes. Cualquier tipo de hegemonismo monopolar es imposible y no lo vamos a buscar. Respetamos la diversidad de posiciones y más bien consideramos que ésa es una riqueza. Bolivia no se ha cansado del pluralismo, sino del chantaje del cuoteo de cargos públicos.
- El mercado bursátil ha reaccionado al triunfo del MAS con una caída de las acciones de Repsol YPF, ¿qué opina?
- Quiero decirle a la inversión extranjera que no tiene por qué estar nerviosa. Como gobierno garantizamos cuatro cosas: reglas duraderas, certidumbre en el ámbito del negocio, la recuperación de sus inversiones, y que tengamos una ganancia a medias. Pero también que el resto es nuestro: propiedad, gestión, uso, consumo, precios, importación y exportación. Eso lo vamos a asumir bajo nuestro control.
- ¿Qué tipo de gabinete tendrá el MAS?
- Uno representativo, no sólo de su plan económico y social, sino también de la variedad de organizaciones sociales y civiles de Bolivia.
Emir Sader, teórico del PT brasileño, sobre García Linera:
En estas elecciones el MAS escogió a Álvaro García Lineira como candidato a vicepresidente. Álvaro nació e 19 de octubre de 1962 - tiene 44 años-, estudió en Cochabamba y en La Paz, concluyendo sus estudios superiores en México, en matemáticas. Ingresó en la política a través del Ejército Guerrillero Tupák Katari, con un proyecto de lucha por el poder a través de la lucha guerrillera. El movimiento es reprimido y derrotado, Álvaro fue detenido y condenado junto a varios de sus compañeros, permaneció 5 años en la cárcel. Uno de los más importantes intelectuales de la nueva generación en América Latina y Caribe, Álvaro es el principal teórico de la estrategia de campaña y de gobierno del MAS.
Otras noticias:
Es enorme la expectativa que rodea a Bolivia, con Evo Morales como su nuevo Presidente. Mientras la Corte Nacional Electoral avanzaba en el recuento oficial de votos, la atención se centró ayer en el giro que tomarán las relaciones exteriores, sobre todo con EEUU, que aceptó la victoria de Morales en las elecciones del domingo, y lo felicitó. Esto, después de combatirlo durante el decenio en que fue líder cocalero, y pese a que todavía le causa incertidumbre.
El Gobierno de EEUU emitió un comunicado en el que felicitó al pueblo de Bolivia por las ‘pacíficas’ elecciones y también tuvo palabras para el Presidente electo. “Felicitamos a Evo Morales por su aparente victoria (…) La calidad de nuestra relación dependerá de las políticas del nuevo Gobierno en una amplia gama de temas”, afirmó el texto de la Embajada de EEUU en el país.
El vicepresidente electo, Álvaro García Linera agradeció las felicitaciones y dijo que el Gobierno está abierto al diálogo con EEUU, “pero sobre el principio de soberanía”.
Agregó que Morales ha invitado a EEUU a sumarse a esta guerra contra el narcotráfico de manera más efectiva, pero no como pretexto para agredir a sectores campesinos.
El tono de la relación dependerá de la ‘conducta’ del Gobierno, dijo a la CNN, la secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice. Más temprano, Morales había dicho en Cochabamba, que se niega a aceptar que la hoja de coca sea considerada legal para la fabricación de Coca-Cola, pero esté proscrita para usos tradicionales.
Pero varios analistas coinciden en que la coca y el narcotráfico pueden ser el punto de quiebre de las relaciones con EEUU. Morales anunció que su Gobierno librará una lucha contra el narcotráfico “más frontal que la que ha habido”, pero que también batallará en el ámbito internacional para sacar a la coca ‘en su estado natural’ de la lista de sustancias controladas de la ONU.
Al respecto, el ex candidato a prefecto de Santa Cruz por el Movimiento al Socialismo, Hugo Salvatierra, dijo anoche que el Gobierno de Morales planea encarar la lucha antidrogas desde el marco de un país soberano y en un ambiente multilateral, en el que puedan jugar más actores, como la Unión Europea y países de América Latina. “Somos un país que está contra las drogas, pero tiene que entenderse que no podemos aceptar una lucha contra este mal, que nos someta”, afirmó Salvatierra.
El Gobierno que asumirá en enero empezará a trabajar con rapidez en el tema del narcotráfico, el cuarto en su agenda, detrás de la reactivación económica, la nacionalización de los hidrocarburos y la lucha contra la pobreza en el país.
El nuevo marco de la lucha antidrogas incluye el rechazo definitivo a dotar de inmunidad a las tropas de EEUU en el país, una revisión en el Congreso de los términos de la Ley 1.008 y un marco de cooperación internacional sin ceder soberanía.
Es el final de un año en el que la política antidrogas de EEUU para los países andinos ha sido muy criticada como inefectiva.
Entidades como la Oficina de Washington para América Latina (www.wola.org) sostienen que las acciones de EEUU contra el narcotráfico son otro factor que debilita la democracia.
Morales obtuvo la mayoría de los votos de los cultivadores de coca de Cochabamba, que han sufrido la represión en las etapas más duras de la erradicación forzosa de cocales, en anteriores gobiernos.
Combinando los elementos de la jornada en una opinión, el analista independiente Miguel Díaz dijo: “La política antidroga de EEUU en América Latina no funciona. Las elecciones marcaron un retroceso de la influencia de Washington en Bolivia” frente al presidente venezolano Hugo Chávez.
“EEUU tiene que repensar su agenda para América Latina. Se necesita un plan más sensato frente a la demanda de equidad en América Latina”, aconsejó.
“La cocaína y el narcotráfico no son parte de la cultura boliviana. La lucha contra el narcotráfico es un pretexto para que EEUU instale bases militares en Bolivia. Esa política tiene que ser revisada”, advirtió Morales.
En círculos políticos y académicos del exterior, la elección de Evo Morales como Presidente de Bolivia marca un nuevo desafío para la política del Gobierno de George W. Bush en Latinoamérica, donde su impopularidad crece a la medida que avanza la izquierda.
Los funcionarios estadounidenses han intentado ’satanizar’ la imagen de Morales, desde que se hizo figura pública. Otros analistas opinan que el nuevo Presidente puede ser un líder pragmático y que EEUU deberá evitar la confrontación. “Hay que reconocer que Morales tiene un mandato del pueblo boliviano. La gente sabía por quién votaba'’, opinó Jess Vogt, analista de WOLA.
Ofrecerán ingreso al Mercosur
El presidente de la Comisión de Representantes Permanentes del Mercosur, el argentino Carlos Alvarez, anunció ayer que propondrá a los mandatarios del bloque incorporar como miembro pleno a Bolivia.
“Hablé con Marco Aurelio García (asesor del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, para asuntos de política exterior) y habrá que hablar con los demás presidentes e invitar a Bolivia, si está de acuerdo, a sumarse como miembro pleno del Mercosur”, dijo.
Bolivia se unió al bloque de Argentina, Uruguay, Brasil y Paraguay como Estado asociado en 1996, pero no se avanzó desde entonces en su plena incorporación, lo que significaría, en principio, que adhiera al Arancel Externo Común (AEC).
El Mercosur ya inscribió a Venezuela como socio este mes.