Nuevo ataque de Sendero Luminoso deja policías heridos. Se amplía cacería humana

24.Dic.05    Análisis y Noticias

Hieren a 2 policías en nuevo ataque senderista

Presuntos senderistas atacaron en la zona de Vizcatán, en la provincia ayacuchana de Huanta, un helicóptero de la Policía Nacional dejando heridos a dos efectivos. En otra localidad de la misma provincia, un grupo de presuntos senderistas ingresó al poblado de Macachacra, para llevarse víveres.

Según informó el ministerio del Interior, el hecho se produjo cuando los efectivos policiales se insertaban a las patrullas combinadas para realizar un operativo policial helitransportado, que avanzaban hacia el campamento de “puesto de Comando” senderista, en el “Sector Vizcatán”, en la provincia de Huanta (Ayacucho), siendo repelidos por los insurgentes que hirieron a dos custodios.

Los heridos fueron identificados como el suboficial técnico de tercera PNP Vidal Quispe Anquise y el suboficial de segunda PNP Daniel Bances Ventura. El primero de los cuales sufrió heridas en el codo y glúteo izquierdo por esquirlas de proyectiles de fuego, mientras que el segundo presenta excoriación en el pómulo derecho también por esquirlas.

Por otro lado, cinco sujetos armados, que dijeron ser senderistas, asaltaron una tienda en el poblado ayacuchano de Macachacra, también en la provincia de Huanta, de donde se llevaron alimentos.

Luego pintaron las paredes con símbolos de la hoz y el martillo “viva el Partido Comunista del Perú “, “viva Sendero Luminoso”, “Pronto regresaremos”.

Una patrulla policial salió inmediatamente en la búsqueda del grupo.

Los caseríos de Angashiyacu y Pacae, ubicados a la altura del kilómetro 41 de la carretera Tingo María-Aucayacu, fueron revisados casa por casa por más de 200 agentes de la Policía Nacional en busca de los 35 guerrilleros que mataron a los ocho policías el martes pasado en una emboscada. Diez de los terroristas serían de estos caseríos, muy cercanos a los hechos.

En estas localidades hay numerosas viviendas desocupadas. Los policías están revisando hasta los techos, letrinas, pozos y todo montículo de tierra fresca con la esperanza de encontrar los armamentos, ropas camufladas, botas de jebe y mochilas que utilizaron los senderistas durante la emboscada donde murieron los nueve policías.

Los efectivos están seguros de capturarlos, pues es sumamente difícil escapar de la zona. Además, otras unidades de Tingo María, Padre Abad y Aguaytía se han movilizado para cercarlos.

Campesinos cuyas casas y chacras están cerca del puente donde se produjo el atentado, habrían proporcionado las características de los sujetos, pues después del asesinato de los policías, los senderistas pasaron por sus chacras escapando en grupos de tres y cinco, llevando armas y algunos costales, posiblemente con alimentos. Varios campesinos nativos también se han ofrecido como guías para conducir a los policías por caminos y atajos hacia las localidades de Magdalena, Huamuco y Santa Rosa de Yajanca.

Según se supo, la mayoría de los guerrilleros serían de estos lugares. También se supo que estarían tratando de confundirse entre los comuneros, pero por ser desconocidos son rechazados. Otros agricultores tienen temor a delatarlos por las amenazas que hicieron al huir.

Otro destacamento recorre la carretera Aucayacu y detiene vehículos para revisarlos y bajar a los pasajeros. Los indocumentados están siendo detenidos para investigarlos.

Por la mañana, un grupo de policías arrió siete paños rojos con la hoz y el martillo que habían sido colocados en una zona alta ubicada a solo cinco kilómetros al sur de Tingo María, en el camino a Huánuco. Antes de esa labor, debieron desactivar trampas que habían dejado los insurgentes.