Desde abajo y a la Izquierda
Estado de Chiapas, Sureste Mexicano, 3 de enero de 2006.
El 31 de diciembre de 2005, las comunidades zapatistas amanecieron con
sonidos inusuales de flautas, tambores y caracoles. “Daban vela”. Fieles a
la tradición maya de comunicación, anunciaban de comunidad en comunidad la
salida del Subcomandante Insurgente Marcos como “Delegado Zero” de la Otra
Campaña. “Avisan que está saliendo el señor Marcos, para cuidarlo y que no
le pase nada” decía un indígena del municipio de San Pedro Polho. El
Subcomandante pasó la noche del 31 en el Caracol de La Garrucha y el 1 de
enero salió temprano, montado en su motocicleta, Sombraluz.
De esta manera, la Otra Campaña comenzó una nueva fase que consiste en un
recorrido del Delegado Zero por todo el territorio mexicano, realizando
encuentros con personas y grupos adherentes a la Sexta Declaración de la
Selva Lacandona. Este proceso implica la construcción colectiva de una
política anticapitalista, de izquierda, organizada desde abajo, donde se
escuche la voz de todos y todas, reivindicando el ejercicio de los
derechos humanos, la equidad de género y la diversidad cultural.
Durante la mañana del 1 de enero, millares de indígenas zapatistas
salieron de la selva hacia las entradas de la ciudad de San Cristóbal de
las Casas, para marchar con otras mujeres y hombres de México y el mundo
hasta desbordar la plaza central de la ciudad. La llegada de la marcha,
encabezada por la comandancia del EZLN, se demoró más de lo previsto. Una
vez concluidas las presentaciones artísticas programadas, la espera de
aquellos que ya se encontraban en la plaza se vio amenizada por propuestas
espontáneas de la concurrencia.
Al ingresar a la ciudad, la marcha se encontró en la oscuridad, debido a
que el gobierno intencionalmente mantuvo las luces apagadas. Un signo más
de la guerra de baja intensidad que éste lleva a cabo contra el
movimiento. Si bien esta acción no disminuyó la fuerza ni la masividad de
la marcha, evidenció las adversidades del camino a recorrer y la necesidad
de saber que el avance será lento. Lento pero firme, como el caracol.
Finalmente, con un acto multitudinario se hizo público el lanzamiento de
la Otra Campaña. Además del Delegado Marcos, tomaron la palabra las
Comandantas Kelly y Hortensia y los Comandantes Tacho, David y Zebedeo.
Los zapatistas se hicieron presentes una vez más en la ciudad con paso
firme, demostrando su vigencia y legitimidad e integrándose con la
sociedad civil en esta propuesta de construcción y lucha plural e
inclusiva.
El 2 de enero se desarrolló la Plenaria programada por la Sexta Coleta, el
grupo de organizaciones que trabajan desde junio de 2005 en la Otra
Campaña. En primer lugar, tomaron la palabra los adherentes a la Sexta que
no lo habían hecho en las reuniones preparatorias. A continuación, el
Delegado Zero expresó las características que debían tenerse en cuenta
para poner en funcionamiento la Otra Campaña, poniendo el acento en la
importancia de concebir la lucha como una lucha de todos, aunque ahora el
peso esté cargado en el EZLN por ser los convocantes. El objetivo es que
los adherentes asuman esta campaña como propia, evitando la homogenización
de la lucha y los movimientos, para que cada persona y grupo encuentren en
la Otra su lugar.
En esta primera instancia, la Otra Campaña se tiene que construir a sí
misma, incluyendo todos los puntos de vista y respetando las diferencias
de opinión. En las discusiones y reflexiones no puede haber ganadores ni
perdedores, sino que se avanza colectivamente y respetando el disenso.
Aquellos adherentes que ya habían dado su palabra en las reuniones
preparatorias también tuvieron lugar para reiterar sus propuestas y
compartir sus experiencias de trabajo. Aunque no estaba programado, sobre
el final, los participantes internacionales también manifestaron sus ideas
y adhesiones.
La Sexta Declaración marca un cambio con respecto a los últimos 12 años de
lucha zapatista. Ya no se trata de buscar sólo el apoyo de la sociedad
civil al movimiento, sino de trabajar todos juntos, cada uno desde su
lugar, para la construcción de un mundo donde quepan muchos mundos. Desde
abajo y a la izquierda.
Nicolás Falcoff, Verónica Gelman, Alejandra Grego, Marcela Kurlat y Eduardo Nachman.