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Independentzia eta Sozialismorantz
EUSKAL HERRIA PASO A PASO
Servicio informativo de ASKAPENA Nº 115
info@askapena.org
Saludo y autocrítica internacionalistas
La marcha de los acontecimientos no se había detenido, pero nuestra actividad informativa, sí. Diferentes deficiencias de tipo organizativo han sido la razón de que descuidáramos esta tarea que considerábamos y consideramos esencial: mantener el contacto y trasladar la información a la muchas personas y organismos que tienes interés en seguir de cerca la marcha de nuestro proceso. Os pedimos disculpas.
Con el nuevo año hemos recuperado las viejas y buenas costumbres. Aquí estamos de nuevo. Recibid un cordial abrazo internacionalista y el presente boletín, expresión de nuestro propósito de mantenernos en contacto con vosotros. Confiamos que nuestros resúmenes semanales refuercen nuestros inquebrantables lazos de amistad.
Para poner al día nuestra base de datos os pedimos que nos repondais afirmativamente a info@askapena.org , si deseais recibir semanalmente este boletin y algunas otras noticias y documentos que estimamos pueden ser de vuestro interés. En caso de no recibir esta respuesta borraríamos vuestra dirección de esta lista. Cualquier sugerencia, crítica o propuesta serán bien recibidos.
Ruido de sables
“Todo queda atado y bien atado”, es la frase que pronunció Franco un tiempo antes de su muerte. Daba por hecho que la restauración monárquica de los Borbones y la fidelidad del Ejército garantizarían el modelo político que él había instaurado. No se equivocó. No se produjo una ruptura con el régimen anterior y tanto el Rey como los militares fueron requeridos por la actual Constitución española como garantes de la “unidad de la patria”
El proceso de reforma franquista eludió hacer frente al hecho de las nacionalidades diferenciadas: País Vasco, País Catalán….Pero la realidad es tozuda, y treinta años más tarde se ha reabierto con fuerza el debate omitido. El año 2005 ha sido clave al respecto. En el mes de febrero fue Ibarretxe quien defendió en las Cortes de Madrid el modelo de nuevo Estatuto para Euskal Herria. Meses más tarde fue el Parlament Catalá el que aceptó y propuso un nuevo Estatut que está siendo debatido con el poder central. La reapertura de este debate ha crispado a la derechona española que sigue siendo franquista. Y a las Fuerzas Armadas, garantes de la unidad “nacional”
El día 6 de Enero, y en el marco de una tradicional celebración militar, un alto mando de las Fuerzas Armadas irrumpe en la palestra política. José Mena, Teniente General y Jefe de las Fuerzas Armadas del Ejército de Tierra recordó la responsabilidad que la Constitución confiere al Ejercito como garante de la “unidad nacional”. Entiende que el proyecto de nuevo Estatut para Catalunya puede desbordar el marco constitucional y, en ese caso, el Ejercito se vería obligado a intervenir. La reacción política fue fulminante. El PP se identificó plenamente con el mensaje golpista de Mena (¿Qué se puede esperar de la derechona fascista?) Unas horas más tarde tuvo que matizar su pronunciamiento inicial ya que había sido una justificación descarada del golpismo. El resto de partidos denuncio la injerencia militar en el debate político. El Ministerio de Defensa tomó cartas en el asunto y dictó una medida disciplinaria contra Mena disponiendo su reclusión domiciliaria durante una semana. El Consejo de Ministros del 13 de Enero resolvió su destitución y pase a la reserva.
Al hecho, que reúne especial gravedad, se le ha querido dar una dimensión individual: los desvaríos de militar ofuscado. A nadie se le oculta que la realidad es mucho más compleja y peligrosa. Quien debería de pasar a la reserva no solo es Mena sino la propia Constitución española en la que él fundamenta- y con fundamento sólido- su actuación. Resulta patética la contradicción de las fuerzas políticas que propiciaron la reforma. Abogaron por una Constitución que deja en manos de los militares el tutelaje de la democracia española. Y, cuando éstos pretenden ejercitar la función que se les encomienda, los políticos se alborotan.
Los hechos confirma, una vez más, que la apuesta política de la izquierda abertzale fue acertada. En su día se opuso a la aprobación de la Constitución y, durante treinta años, ha sido la única fuerza que ha reclamado otro marco constitucional y político. Hoy el debate sobre el marco está cada vez más abierto y las contradicciones que este genera, son cada vez más evidentes. Seguiremos informando.
Un ·tsunami” solidario en Bilbao
Durante todo el año 2005 se ha hablado con insistencia sobre las posibilidades de que se abriera un proceso de negociaciones entre el Estado y Euskal Herria. Hablaremos de ello en otro Boletín. Pero las expectativas no se corresponden con la realidad. Mientras la organización armada ETA ha dado pasos en la línea de rebajar la confrontación, el Gobierno está haciendo lo contrario respecto a los presos políticos vascos: ablanda el lenguaje y endurece sus actuaciones. Hablaremos en otro Boletín sobre las actuales condiciones carcelarias. Parece evidente que el Gobierno está utilizando las cárceles como una baza prenegociadora y a los presos/as políticas como rehenes. Esta instrumentación política de las medidas penales está repercutiendo gravemente en los propios reclusos, familiares, amistades…. Y va creando una expansiva conciencia social.
La sociedad se reorganiza, recupera dinámicas descuidadas y crece la implicación en la defensa de los derechos de los presos y sus familiares. 34 organismos sociales, sindicales, representantes de la cultura, del deporte, de la enseñanza y varias fuerzas políticas convocaron a la sociedad para el día 7 de Enero en Bilbao. La respuesta fue masiva calculándose en 41.000 las personas que participaron en la marcha solidaria. También se implicaron de lleno las fuerzas represivas; la Guardia Civil, cuerpo represivo por antonomasia, colocó espesos controles en las carreteras de acceso a Bilbao. Los vehículos retenidos formaron colas interminables y la paciencia de los retenidos se agotó; optaron por salir de los vehículos que estaban en los arcenes y cortaron el tráfico por la autopista.
Todas las organizaciones convocantes valoraron como muy positiva la respuesta social. El contrapunto lo puso el Gobierno Vasco y los partidos de la derecha nacionalista que siguen priorizando los intereses partidarios y de clase. Han sido promotores de incontables movilizaciones en contra de ETA apelando a un discurso “tercerista” y falso de “defensa de todos los derechos conculcados”. De “terceristas”, nada. Cuando las organizaciones sociales convocan en defensa de los derechos de los presos, ni la burguesía vasca ni el Gobierno que controlan se dan por aludidos. Parece ser que los presos y presas vascos no fueran sujetos de derecho. Una vez más, se ha producido un escandaloso divorcio entre amplias capas sociales y el arco político institucional de la burguesía vasca.
Euskal Herria, 14 de Enero de 2006.
