Seguimos con las crónicas directas desde los territorios controlados por el estado boliviano enviadas por el compañero Ricardo Lannutti, “corresponsal de guerra” de Clajadep en Bolivia.
Ricardo, de 51 años, es Profesor de Historia de la Universidad Nacional de Luján y de diferentes escuelas secundarias del Gran Buenos Aires. Investigador de diferentes movimientos sociales (urbanos y campesinos) en America Latina. Militante social no organizado en partidos, ni en otras formas institucionales de militancia. Colaborador de distintas organizaciones de desocupados del Gran Buenos Aires.
La mirada hacia delante, soportando el peso de la historia
Ricardo Lanutti
ricardo_lanutti@yahoo.com.ar
La mirada de los pueblos que forman el estado boliviano apunta hacia delante, con la memoria puesta en la identidad cultural que conformaron a lo largo de siglos y siglos de explotación, dominación, resistencia y dominación. Esa mirada la sentís en la calle, cuando caminás, cuando les pedís permiso para sacar una foto o para grabar una entrevista.
El bulto que la chola lleva sobre la espalda es casi tan grande como ella, pero sigue subiendo la calle del mercado.
Aquí, en La Paz, hace frío aún en verano, ¡en pleno enero!!, que además es el mes de las lluvias… ¡¡ pero nadie se queja del tiempo!!! Algo tan cotidiano en otros lugares del mundo, es que “El tiempo está ahí nomás; para que quejarte amigo, no es como los gobiernos que se pueden sacar, se va a quedar lo que quiera pues”
Partamos de ahí, de entender que hasta en lo cotidiano hay una dimensión distinta de la vida, de lo que es importante, de lo que se puede soportar y de lo que no se puede ni se debe.
Estos pueblos (en Bolivia el 80 % de la población se reconoce a sí misma como indígena) saben lo que quieren, se han puesto de pie nuevamente hace 4 años en movilizaciones impresionantes que duraron semanas, al costo de decenas de muertos y han impuesto elecciones en las que los encuestadores hablaban de un 30 % para Evo Morales y terminó arrasando con un 54%. Poco entienden los políticos y los periodistas especializados de lo que ha pasado, de lo que esta pasando y de lo que va a pasar.
Se palpa en las calles, se huele en las esquinas donde se hacen asambleas casi cotidianamente (en general en quechua o en aymará) se ve en las miradas adustas de las cholas. “Mira compañerito, ahorita nomás van a venir políticos y periodistas blancos de todo el mundo a mirarnos, porque tienen miedo de los indios, no saben porque un indio va a ser el presidente, se pensaron que ya no estábamos mas!!!”
Pero están. están acá, en el “techo del mundo” a mas de 4000 metros de altura, están para quedarse. Hay veces que la historia no resiste mas.
Está dejando de llover. Las cholas me dan la espalda y comienzan a armar sus escaparates y yo me preparo para tomar la “combi” hacia la heroica Marka de El Alto, que fuera el cuartel general de las insurrecciones de 2000, de febreo y octubre de 2003, de mayo de 2005.
A la Ceja. A la Ceja de El Alto. A escuchar. A aprender. A tratar de amplificar.