Se moviliza población de Otavalo. Apoya la Conaie.

17.Ene.06    Análisis y Noticias

NUESTRA MARCHA
NUESTRA VOZ
NUESTRA VIDA
KAIPIMIK KANCHIK!!!

Lo que inició 5 días antes como una idea y propósito conjunto, se materializó en la marcha convocada el pasado martes 10 de Enero. Un encuentro físico y, ante todo, moral, que contempló la exigencia de los derechos del hombre, del ciudadano, de Tupak Lema, que al igual que las obligaciones que debemos cumplir, deben ser dignos, respetados e impostergables.

La petición justa y la necesidad de paz, de sentirnos capaces y útiles, nos unió e hizo enérgicos, intensos, invencibles. Confirmando, de este modo, que no estamos ni equivocados, ni mucho menos, SOLOS.

Estuvo presente la gran comunidad a la que nos pertenecemos, aquella que cotidianamente nos da ejemplo de integridad, de firme plenitud e identidad, a pesar de los innumerables intentos que se dan por invalidarla.

El apoyo fue, no solamente de las comunidades de Imbabura, sino también de representantes de pueblos Amazónicos y de la sierra sur. Conmovedor fue sentir este intenso respaldo, que si bien es cierto viene de poblaciones distantes, no son del todo extrañas, principalmente porque estamos unidos por aquellos sentidos de sensatez y solidaridad, que nunca nos han sido indiferentes.

Nos acompañaron grupos y organizaciones como la CONAIE, la FICI, la Asamblea Permanente de DDHH, la UNAIMCO, los Medios de Comunicación, Autoridades Municipales y Provinciales, ONG´S, entre otras, y lo más importante, la comunidad en general.

Niños, jóvenes, hombres y mujeres, todos asiduos guerreros, que intervenimos y formamos parte de la lucha, no con armas ni ironías, sino con palabras, convicciones y fraternidad.

La marcha inicio en la Plaza de Ponchos, recorrió algunas calles de la ciudad de Otavalo, pasó frente a la Institución Policial, y con una extraordinaria concurrencia, terminó en la Plaza Principal frente al atrio del Municipio.

Nuestra vos, nuestra idea, nuestra demanda y convicción, se reflejaron en cada manifestación, acción y compromiso que se realizó ese martes, reafirmando así nuestra herencia y origen.

Malki, hijo de Tupak de 4 años de edad, sosteniendo y aferrándose a la Wiphala, (Bandera del Tahuantinsuyo) proyectó la inocencia primaria, el espíritu sano y limpio, viéndose obligado a “entender” una realidad en la que, desafortunadamente, no todos podemos ser tan libres y descomplicados como él lo es.

Ver a estos niños, nuestros hijos, su sonrisa y claridad, es la recompensa y motivación que nuestro corazón tiene. Sentir que la esperanza, la vida y la voluntad, aún existen en las generaciones que nos preceden. En aquellos que actúan sencillamente, sin complejos, temores, ni limitación. Sintiéndose orgullosos de lo que son, y luchando por nunca dejar de serlo.

Sin duda, pudimos reflexionar sobre una de las tantas enseñanzas que, una vez más, nos brinda nuestra historia. Una lección entregada de forma generosa, pacífica y tolerante, que deja al descubierto, cómo el olvido y el desconocimiento nos convierte en hombres inseguros, perdidos, detestables; pobres de espíritu y saber.

Cada paso, cada consigna, fue cultivando la participación y la democracia, reconociendo de esta manera que el “otro”, no es una amenaza, sino un ser valiosamente diferente.

Marchamos convencidos de nuestra lucha y hermandad, de nuestros valores, decisiones y prácticas. Comprometidos a no olvidar, y a dejar huellas de cambio y libertad.

Solo enfrentando esta histórica y errónea concepción de que algunos son mejores que los demás y despojándonos de esta relación de dominación que intencionalmente siempre favorecen a pocos, es como estamos alcanzando lo soñado.

Gracias nuevamente por su compromiso y apoyo, sin ustedes la satisfacción y éxito que generó esta jornada, definitivamente, no habrían sido posibles.

Mashi Marcos Lema