El delegado Zero y simpatizantes del EZLN, durante la entonación del himno nacional en el poblado de Altepexi, Puebla Foto Víctor Camacho
Lunes 13 de febrero de 2006
En el valle de Tehuacán, crudas historias sobre explotación
Aclara Marcos: no hubo trifulca con profesores
La Jornada
San Francisco Altepexi, Pue. 12 de febrero. En el valle de Tehuacán se dan cita dos infiernos vivos. Por una parte la región Mixteca, depauperada tierra ancestral de uno de los grandes pueblos del México antiguo. Por otra, es “territorio libre” de la Ley Federal del Trabajo, donde los empleados maquileros se encuentran en condiciones de explotación superlativa y sus vidas no importan.
“Se tiene que calentar. Se tiene que volver a decir ya basta. Otra Mixteca es posible”, proclamó esta mañana una mujer indígena después de describir cómo las tierras están secas, el agua se junta por goteo, los cultivos dependen de las lluvias, el dinero no existe, y cada vez hay menos varones en las comunidades. Es la región expulsora por excelencia. Y es tras esa sangría humana que logran establecerse aquí la empresas maquiladoras, aprovechando la miseria y la poca resistencia a sus prácticas laborales. Jornadas de 12 y 16 horas, salarios ridículos y además con descuentos injustificados, nula seguridad social y despidos en cualquier momento.
“¿Y nosotros qué?”, aúlla esta tarde en la plaza de Altepexi una trabajadora despedida de Confecciones Rich, propiedad de Ricardo Gil Martínez. “Ya estuvo bueno de entregarle nuestros pulmones al patrón.” Los pulmones, las manos, los ojos y el destino de millares de maquileros en Tehuacán y sus alrededores se consumen en beneficio de los productos coquetísimos de Levi’s, Guess, Wrangler, Reebok, Tommy Hilfigger, Gap, Old Navy, Armani, Banana Republic, Dockers, en el abismo de la desigualdad, el traspatio del México sonriente de los centros comerciales y los anuncios de televisión.
Para los indígenas y obreros con tanto dolor, el sentido de urgencia se está volviendo insoportable. Cuando en la mañana, durante la reunión de adherentes de la Sexta declaración de la selva Lacandona, tomó la palabra el abogado Martín Barrios, la enumeración de violaciones a los derechos de la gente se atropellaba en sus palabras. Era preciso, pero no le hubiera alcanzado la mañana entera. Y no obstante “nos acomodó todo”, diría Marcos en la noche, reconociendo la riqueza de la intervención.
La otra campaña se encontró a los nahuas, mixtecos y popolocas del último escalón. Y a los mestizos pobres. Un trabajador de Maquilas Montana expresó: “la Junta de Conciliación y Arbitraje local (de Tehuacán) es una puta disfrazada de poder. Y se está haciendo vieja. Ya la manoseó el PRI, también el PAN”. Su indignación estalló: “en Tehuacán los ricos son 100, nosotros somos 230 mil”. Habla del desprecio y la corrupción de Alejandro Conde Hernández, quien preside la Junta de Conciliación y Arbitraje, hacia los trabajadores y sus demandas. “Como obrero me molesta, como indio más.”
En ningún lado ha encontrado la otra campaña expresiones más crudas y espontáneas de explotación y rabia, en el paraíso de los empresarios “ejemplares” del foxismo, los ilustres mexicanos Kamel Nacif (grupo KN, Tardán); Lucio Gil (dueño de Calidad de Confecciones, padre del mencionado Gil Martínez de Confecciones Rich y encarcelador del abogado Martín Barrios hace pocas semanas); el señor Guez (AZT Internacional); la familia Fernández (Grupo Navarra).
Los ríos son azules y las tierras y las manos de los trabajadores deslavadores de la mezclilla chic que recorre el mundo a precios que da pánico mencionar, sobre todo en presencia de esta gente, que es pagada con la contaminación de suelos, manantiales y aire. El hambre. El miedo a los patrones. La violencia sexual. Le evidente complicidad con los patrones del gobernador priísta Mario Marín, indígena popoloca de Ajalpan, hace que varios oradores lo llamen “traidor de su pueblo”.
Una mujer de Guadalupe Xolocoxtle se paró esta mañana ante el micrófono en la sesión de la Comisión Sexta con una niña dormida en los brazos, y habló más allá del desencanto y el abandono. Su trabajo: confeccionar balones de futbol. Uno al día, pagado a 10 pesos. Además es campesina temporalera, que hace milpa si llueve. “Este año no se dio”, agrega.
“Si falla la puntada en la costura del balón nos cobran 40 pesos, casi toda la ganancia de la semana. Estaba pensando: vivimos peor. No hay trabajo. Los señores emigran a Estados Unidos. No hay trabajo. No hay nada. Allá estamos más abandonados, creo. Ni salario reclamamos. No reclamamos absolutamente nada. Qué vamos a reclamar.”
Como diría por la noche el delegado Zero: “¿cuánto trabajo costó un pantalón, una chamarra que se compra en un centro comercial? Allí está escrita una historia que taparon cuando tiñeron la mezclilla”.
Las empresas de la familia Gil han confeccionado, además de ropa, listas negras de los trabajadores que no se dejan; esos que ya despidieron de sus maquiladoras. Sólo en Calidad de Confecciones cesaron a 166 trabajadores. Otra trabajadora maquilera, víctima de Lucio Gil, dice en la plaza de Altepexi, ante centenares de personas, luego de contar su experiencia en las empresas del inversionista: “por eso estoy aquí y digo las cosas. Aunque me pueda pasar algo, o a mis hijos, por venganza. No me importa. Les digo a los trabajadores que no dejen que los exploten, no dejen que los despidan”. Y termina su participación declarando sobrecogedoramente: “aquí estoy para seguir adelante, para ayudar a quien yo pueda”.
Las mentiras de algunos medios
Con el fin de aclarar “las mentiras que están siendo montadas por algunos medios de comunicación” sobre el paso por Oaxaca de la Comisión Sexta del EZLN, el subcomandante Marcos leyó esta mañana un comunicado, en el cual señala que la sección 22 del SNTE-CNTE es un agrupamiento plural donde se encuentran maestros de diversas posiciones políticas “que cubren todo el espectro ideológico”. Además, “el magisterio oaxaqueño, en su inmensa mayoría, es democrático y ha confrontado al charrismo sindical con decisión y valentía. Muchos maestros han suscrito la Sexta declaración y se han adherido a la otra campaña, y por eso, como Comisión Sexta del EZLN, aceptamos la invitación a dialogar con ellos y a pernoctar en sus instalaciones la noche del 9 de febrero”.
En la reunión, añade, “recibimos preguntas, cuestionamientos y muestras de simpatía, todo en un ambiente de respeto. Al finalizar nuestra intervención muchos maestros se acercaron a manifestar su apoyo e interés”, y la Comisión Sexta “se retiró para que continuara la asamblea”.
Enseguida menciona que, “debido a cuestiones de desorganización, los compañeros de la Karavana que acompaña esta primera gira quedaron varados, sin poder acceder a su lugar de descanso ni al exterior. Cuando lo supimos, pedimos a los organizadores que permitieran que estos compañeros entraran al edificio donde nos encontrábamos nosotros o que pudieran salir a sus vehículos. Según nos fue explicado satisfactoriamente, por cuestiones de seguridad interna, cuando una asamblea del magisterio democrático se realiza, se cierran todas las puertas. A las cero horas del día 10 de febrero, después de un momento de desconcierto, se abrieron las puertas”.
Como la asamblea continuaba y “la Karavana” no tenía espacio para descansar, “decidimos salir del lugar donde ya estábamos acomodados”, prosigue el comunicado. “Pedimos a los compañeros del Consejo Indígena Popular de Oaxaca-Ricardo Flores Magón que nos facilitaran las mismas instalaciones donde habíamos pernoctado la noche del 8 de febrero.”
Entonces, Marcos declara: “No hubo en ningún momento ni trifulca ni golpes ni roce físico alguno entre la Comisión Sexta del EZLN y miembro alguno del magisterio democrático. No se destruyó ni averió mobiliario de las instalaciones. Los compañeros del magisterio que se encargaban de nosotros, en todo momento nos trataron con respeto y atención. En ningún momento expresé que ‘a la chingada con los maestros’ ni ‘no necesitamos al magisterio’. No sólo porque sí lo necesitamos, sino también porque nuestra molestia no era con los maestros democráticos, sino con la organización. En la reunión plenaria de adherentes de la Otra en Valles Centrales de Oaxaca, la representación del magisterio democrático dio las disculpas necesarias y suficientes por esa desorganización.
“Las mentiras sobre lo que supuestamente dijimos, hicimos o pasó provienen de unos cuantos maestros simpatizantes del PRD y de AMLO, seguramente molestos por nuestras críticas a su irrefrenable corrimiento a la derecha. Basados en estas mentiras algunos medios de comunicación han montado notas e imágenes que no sólo no son de nuestras reuniones, sino que son prefabricadas y montadas en sus ‘noticieros.’”
Así, la Comisión Sexta “saluda” la campaña de desinformación que levantan algunos medios de comunicación. “Significa que las campañas publicitarias de los partidos políticos están fracasando, que nosotros vamos creciendo como un movimiento de rebelión nacional y que nos temen como alternativa real al sistema político, económico y social impuesto con violencia y mentiras a nuestro país. El mejor homenaje, después del que significa el apoyo de la gente humilde y sencilla a nuestra propuesta, que hemos recibido en la otra campaña, lo constituyen las crecientes muestras de miedo de los poderosos y de quienes les sirven.”
Concluye diciendo “al pueblo de México que no crea en las mentiras que allá arriba se dicen de nosotros, y que mejor escuchen lo que abajo y a la izquierda va creciendo, primero como un murmullo, luego como grito. A l@s compañer@s de la otra en todo México les decimos que busquen la verdad sobre lo que pasa en los medios alternativos de comunicación y en la poca prensa que sí mira hacia abajo”.