Desde la comunidad mapuche de Las Huaytecas

24.Feb.06    Análisis y Noticias

CIPRESAL DE LAS HUAYTECAS

La comunidad mapuche de Las Huaytecas se opone en forma terminante al establecimiento de un área protegida en los campos que ocupa desde fines del siglo XIX. Esa decisión fue aprobada al terminar el año pasado por la Legislatura de Río Negro. Los indígenas sostienen además que no fueron consultados en ningún momento y que en consecuencia, pedirán la inconstitucionalidad de la norma.

Mirta Ñancunao, vocera de la comunidad mapuche, dijo que su gente empezó “el año con una mala noticia, porque el 29 de diciembre se aprobó en la Legislatura de Río Negro la creación del Área Protegida Cipresal de las Huaytecas. A partir de ahí la comunidad empezó a reunirse con otras organizaciones mapuches y planteamos nuestra postura: nuestra oposición a la creación de esta área natural protegida”.

Un fragmento de la zona en cuestión forma parte de la jurisdicción municipal de El Bolsón. La referente de la comunidad estableció que “no nos consultaron en ningún momento. Esto ya tiene una historia porque el municipio de El Bolsón en 1991 ya había declarado como área protegida. al relicto del bosque de Las Huaytecas, que son entre 8 y 10 hectáreas. Nos enteramos porque tuvimos oportunidad de leer la Carta Orgánica, sino no nos hubiéramos enterado”.

Relató la mujer que “el tiempo pasó y en 2001 el Ministerio de Coordinación también impulsó un proyecto de área protegida, que abarcaría parte de lo que es el relicto de Las Huaytecas y parte del campo donde está la familia Ñancunao arriba. Eso se pudo parar cuando intentaron mensurar y quedó archivado”. La zona en litigio “es un bosque que está bien delimitado, 8 hectáreas donde hay ciprés de Las Huaytecas, ciprés de la cordillera y alerces. Después hay bosque con otras plantas más comunes”.

En este nuevo avance del Estado provincial, “tampoco nos han consultado, nos enteramos por los medios de comunicación. No se acordaron de involucrarnos en el proyecto de trabajo que ellos tenían. Es decir, no fuimos consultados. Entonces a partir de ahí, las asesoras legales están trabajando para pedir la inconstitucionalidad de la ley”. Es precepto constitucional de alcance nacional que todas las acciones gubernamentales que puedan involucrar a pueblos indígenas, deben contar con su consenso y participación.

Retroceso

Los mapuches de Las Huaytecas se oponen a la medida gubernamental porque “nosotros, como pueblo originario, tenemos nuestras propias formas de protección. Siempre hemos protegido nuestros recursos naturales, entonces no necesitamos de ningún tipo de legislación winka que nos venga a decir cómo hay que proteger. Además consideramos que aceptar un área protegida en nuestro territorio, con los avances que hemos tenido como pueblo mapuche en materia de legislación, sería un retroceso”.

Citó como ejemplo “algunos avances en los Parques Nacionales, donde se trabaja en comanejo. Ahora no podemos aceptar una nueva forma, sea área protegida o lo que sea, y quedar sometidos de por vida a las condiciones que el gobierno nos imponga. Eso significaría que no podríamos regularizar nunca nuestra situación como comunidad indígena”.

La situación de postergación es evidente. “Nosotros no tenemos los títulos, estamos trabajando sobre la regularización de los campos. Si bien somos una comunidad estamos dispersos, no en una reserva. Tenemos otros pobladores no indígenas que se asentaron después de los 60 y nos han ido separando. Entonces, tenemos los campos separados. No será una reserva pero buscaremos la forma de obtener el título comunitario”.

En efecto, “estamos allí desde fines del siglo XIX y es un reclamo constante que se vino haciendo al Estado. Es bastante triste, pero desde esa época mis bisabuelos, según consta en los expedientes, le solicitaban al gobierno que les regularizara su situación territorial. Ellos se murieron y quedaron mis abuelos, solicitando exactamente lo mismo. Pasaron los años, los abuelos también se murieron y entonces, pasan las generaciones. Nuestros padres también se están muriendo y bajo ningún concepto la nueva generación que está peleando por lo nuestro va a aceptar la creación del área protegida porque sería entregar todo por lo que ellos fueron peleando”.

Las convicciones son firmes. “La tierra es nuestra, es territorio indígena, es de la comunidad. Ellos hablan de tierra fiscal y no, no es tierra fiscal. Es territorio indígena y lo vamos a defender como tal. No estamos hablando del bosque en sí nada más, porque tomaron como área protegida todos los campos de los pobladores que ellos consideraron como fiscaleros. El gobierno se apropió del discurso ecologista para someternos una vez más a los que somos originarios de las tierras”. Pero no resultará fácil.