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MEMORIA Y RESISTENCIA DE LOS PUEBLOS ORIGINARIOS
“No tiene mi tierra oro, ni trigales ni ganados, ni tampoco verdes prados, ni otros signos de riqueza, pero tiene por grandeza el Ajayu que nuestra pachamama le ha dado”
AsphaSumaj
Bajo la lluvia de Abril, con sus rostros dignos un grupo de hermanos de las comunidades de Iruya, Santa Victoria Oeste, Nazareno se concentran en la plaza San Martín, su objetivo marchar por las calles céntricas de la ciudad colonial de Salta denunciando que se reconozcan sus derechos como pueblos originarios a la titularización de sus tierras, a que ante cualquier proyecto en este caso minero se consulte a las comunidades. La marcha se da inicio aproximadamente a las 10 de la mañana irrumpe en el seno mismo de esta ciudad colonial, los indios estamos en pie de lucha nos acompañan nuestras Wiphalas, ponchos, ojotas, sombreros, chuspas son los símbolos que dan identidad a esta nueva protesta. Caminamos ante la indiferencia de unos o la sorpresa de otros y la sensación de que nuestro Pachakuti ya es un hecho, empuñamos nuestras Wiphalas nada menos que en la ciudad más Colonial de esta Argentina. Y las proclamas ¡¡Jallalla pueblo Kolla!! Kausachun dan fuerzas a esta nueva resistencia. Luego se decide marchar al lugar donde se concentra el poder de turno que dice representar al pueblo llamado Gran Bour. Y me acuerdo de Rodolfo Kusch, un pensador que supo entender nuestra lógica ancestral en un articulo el decía que había dos realidades, la de una tarima donde se construían casas, negocios, estudios, comercios en definitiva la suma del poder y que les lleva a tener miedo. ¿Miedo a que? Pues a que le saquen la tarima y se caigan en el pozo. ¿Y que hay dentro el pozo? Pues nada menos que cien millones de indios, negros y mestizos el pozo de la América profunda. Esa es la sensación lo que representa el “Gran Bour”, por un lado los que nos dicen representar y no escuchan. Y por el otro lado la dignidad de las comunidades que ancestralmente vienen luchando. Los que están también en esa tarima son algunos medios de comunicación que de una manera sutil minimizan estas manifestaciones pero la realidad es una y el pueblo Kolla una vez más salio a pelear por su dignidad y sus derechos. Muchos se preguntaran ¿y que se logro en la marcha? Como buscando respuestas concretas. Y lo concreto esta en que hay un pueblo movilizado que no necesita de representantes, fuimos testigos como en una asamblea el 11 de marzo se determino el plan de lucha seguro que hay falencias pero es la determinación de l as comunidades la que organiza su lucha y va ejerciendo sus derechos como pueblos originarios, derecho que merece ser respetado y que nos autodeterminan como pueblo –nación Kolla. Esta autodeterminación parte de La naturaleza, desde sus leyes más elementales señala el curso que cada cuerpo - comunidad en ella debe proseguir, como parte complementaria de la Allpamama. (Madre tierra)
Es así que un arroyo pequeño en el tiempo espacio que le corresponde encontrara un cause natural que le conducirá a encontrarse con otros arroyos de aguas diferentes para hacerse un gran rió, que en su paso dará fertilidad a la tierra de los comuneros o Qamiris, para finalmente llegar al mar.
Una semilla Muju llevada por los azares del viento encontrara un lugar húmedo y fértil, propicio para echar sus raíces, y crecerá con las lluvias hasta hacerse un gran árbol, determinando la existencia de un extenso bosque, en hermandad con otros árboles y vegetales incluso diferentes a él.
En los territorios del Tawantinsuyu conviven una infinidad de formas de vida, desde moluscos, peces, mamíferos, aves y pequeños insectos, hasta comunidades humanas. Cada una de ellas se ha configurado a través del tiempo como respondiendo a un proceso universal de Autodeterminación Qamawi de las formas de vida en el cosmos y microcosmos Ayllu.
Toda esta sabiduría nos lleva a plantear el desafió de seguir luchando , la memoria de nuestros ancestros así lo determinan junto a los Ajayus (espíritus) de los abuelos ,de la batalla de Quera, el malon de la Paz , los hermanos del Ecuador, de Bolivia, de Chiapas.
Y como dice el Abuelo Antonio en Chiapas “La lucha es como un circulo se sabe donde empieza pero nunca donde termina.
Desde Abra Pampa. Jallalla- Kausachun pueblo Kolla. Wayra Quique
