La otra campaña: Marcos en Tlaquiltenalgo

14.Abr.06    Análisis y Noticias

Jueves 13 de abril de 2006

Temen que empresario abra, por la fuerza, gasolinera en Cuautla

Denuncia Marcos hostigamiento contra bases de apoyo del EZLN en Morelos
Efectivos de la policía federal detuvieron en una camioneta a simpatizante zapatista

La Jornada

Tlaquiltenalgo, Mor. 12 de abril. En la cuna de Rubén Jaramillo (quien nació aquí hacia 1900) y flanqueado por los combatientes jaramillistas Félix Serdán y Cirilo García Vázquez, el subcomandante Marcos se encontró con los adherentes a la Sexta declaración de la selva Lacandona del sur de Morelos. Y fue el espíritu de Jaramillo, zapatista originario y jefe rebelde él mismo, asesinado con toda su familia por el gobierno de Adolfo López Mateos en 1962, lo que dio clima y sentido a la otra campaña hoy, aquí y en Zacatepec.

Al dirigirse esta mañana a “los trabajadores del campo y la ciudad” reunidos en el auditorio del comisariado ejidal de Zacatepec -cerca del histórico ingenio Emiliano Zapata- quienes expresaron sus múltiples inconformidades con los gobiernos federal y estatal, el subcomandante Marcos denunció una nueva agresión policiaca contra la otra campaña, esta vez en las cercanías de Cuautla.

“El día de hoy, a las 9 de la mañana, un compañero de la caravana de la otra campaña que nos está acompañando por toda la República fue detenido cuando se dirigía a la iglesia de Tetelcingo. A una cuadra del lugar este compañero fue detenido por la policía federal y subido a una camioneta de esa corporación con burlas e insultos. Le ordenaron que se desnudara y le revisaron todas sus cosas. Fue acosado y le fueron recogidos varios números de los periódicos Machetearte y La Trincherita, que están informando sobre la otra campaña, y le dijeron que por qué traía esa propoganda y que si era muy zapatista y que cuál era su misión. En esos momentos salió la caravana y le dijeron los policías ahí van tus compañeros; mira, ya te dejaron. Lo tuvieron detenido poco más de media hora en esa camioneta y después de ese tiempo y de acosos y burlas le dijeron bueno, como no traes nada, ya vete”.

Esa es la denuncia de lo que está haciendo el gobierno con quienes están en esta lucha pacífica y civil, agregó el delegado zapatista. Los agentes que detuvieron al joven y lo mantuvieron sujeto por el cuello, vestían camisetas verde olivo.

Con relación a la pretensión gubernamental de destruir la barranca de Los Sauces, en Cuernavaca, para “unir Acapatzingo y Tabachines”, según la versión oficial, inexacta pues no se trata de eso sino de un ecocidio importante, La Jornada de Morelos informó hoy que el grupo ambientalista Guardianes de los Arboles y los vecinos de Acapatzingo obtuvieron tres nuevos amparos; dos de ellos impiden las obras hasta el 18 de abril, y el otro hasta el día 26. Como expresaron los grupos que defienden los sauces de la barranca, “no se repetirá la historia del Casino de la Selva; esta vez no nos van a derrotar”.

Mercedes Segués, representante de los vecinos, acusó al gobernador Sergio Estrada Cajigal de informar falsamente sobre la legalidad de dicha obra. No obstante, el subsecretario de Gobierno, Rafael Martínez Flores, insistió en que la obra es legal, y se dijo dispuesto a desalojar a los “ecologistas” mediante la fuerza pública, pues la obra vial “no es un capricho”. Nadie ha dicho que sea un capricho. Los inconformes lo denuncian como un “negocio” de las autoridades.

En Zacatepec, al cabo de un acto poblado de proclamas obreras y banderas comunistas, el subcomandante Marcos expresó: “Después de lo que hemos visto en Morelos le pedimos respuetuosamente a Estrada Cajigal que vaya y fornique a su progenitora, para no decir que chingue a su madre porque luego no sale en el noticiero”.

El delegado zapatista aludía a la participación de un campesino que, dirigiéndose a las cámaras de Televisa, exigió que transmitieran lo que se decía en la asamblea de Zacatepec.

Por la tarde, en el predio de Tlaquiltenango donde se reunió la otra campaña, don Félix Serdán sostuvo que los presentes, la mayoría muy jóvenes, eran sus hermanos y hermanas, porque, justificó, “nos une un ideal para cambiar tanta basura. Aprendamos con las gotitas de agua que forman arroyos y barrancas que llegan a los ríos impetuosos que se llevan toda la basura. En esta época la basura nos está ahogando. Luchemos contra esta basura”. También hizo una breve semblanza del zapatista Rubén Jaramillo, quien combatió “desde los 15 años a los 62, o sea, toda su vida, por vías legales cuando se pudo, y defendió su vida con las armas cuando no se pudo. Como el general Emiliano Zapata, fue incorruptible”.

Durante dicho acto, el delegado Zero anunció la salida del Chómpiras el próximo día 17, cargado con cuatro toneladas de maíz de comunidades zapatistas de Chiapas rumbo a El Batán, Querétaro; la Yerbabuena, Colima, y al puerto de Veracruz para enviar al pueblo cubano.

El sitio de la gasolinera de Cuautla

La ciudad de Cuautla tiene bajo su suelo algunas de las fuentes de agua más ricas de Morelos, y precisamente en la colonia Manantiales están las mejores. El empresario Rafael Anguiano Aranda decidió hacer ahí lo único que parece importar por acá: buenos negocios. El Frente de Defensa del Agua decidió salirle al paso. Y este martes recibió al delegado Zero y la otra campaña para exponer su situación alarmante y su lucha firme, que ha permeado las resistencias campesinas, estudiantiles, obreras y barriales de la región cuautlense.

El frente es un movimiento de vecinos que se unieron hace tres años contra la gasolinera Milenium 3000, propiedad de Anguiano Aranda. El frente está conformado por ciudadanos de diversas “preferencias políticas y partidistas quienes, ante la amenaza ambiental, la expropiación de su derecho al lugar, y al no encontrar respuestas gubernamentales ni de los partidos políticos, conformaron un movimiento incluyente, ajeno a las campañas partidarias”.

Según expusieron sus miembros ante el delegado zapatista, la autorización estatal y municipal para la construcción de la gasolinera fue fraudulenta. “No se tomó en cuenta la existencia del rico acuífero ubicado a un metro bajo la gasolinera, así como los peligros que acarrea para la salud de la población y el ambiente”. Al progresar su resistencia, el Frente, principalmente impulsado por las mujeres de la colonia, descubrió que están sobre el segundo acuífero de Morelos (el Cuautla-Yautepec), que a sólo 350 metros de distancia alimenta el manantial brotante El Calvario, del que se abastece 80 por ciento de Cuautla. Aunque la gasolinera no se abre aún, la salud de la población de la ciudad ya corre riesgo porque los tres tanques de la gasolinera están llenos y dos de las sustancias componentes de la gasolina, el etermetilterbutílico y el benceno, son cancerígenos.

El Frente de Defensa del Agua ha puesto al descubierto la corrupción municipal, estatal y federal. “Sobre todo, descubrió que el gobernador Sergio Estrada Cajigal hace negocios propios con la concesión de construcción y operación de gasolineras en el estado, y el nexo que tienen éstas con el lavado de dinero. Descubrió cómo el director de la Comisión Estatal de Agua y Medio Ambiente de Morelos, Javier Bolaños, mientras consentía atropellos e ilegalidades que afectan el agua de Cuautla, impulsaba programas de privatización del agua en todo el país, pues dirige la Asociación Nacional de Empresas de Agua y Saneamiento y fue uno de los organizadores del cuarto Foro Mundial del Agua”, expresa el frente en un comunicado.

Los cuautlenses en resistencia han denunciado los vínculos de Anguiano con la red de corrupción de los directores de las Terminales de Almacenamiento y Distribución de Pemex, “quienes supervisan y autorizan la construcción de las gasolineras, pero también algunos de los que controlan el mercado negro de pipas de gasolina”, señalan los vecinos de Manantiales, quienes a lo largo de su proceso de resistencia han sufrido agresiones y amenazas, y aunque su lucha no ha tenido eco en los medios, conforma un movimiento cada vez mayor dentro de Cuautla, se alía con otros movimientos en Morelos y el estado de México y en otros estados para la defensa del agua, los lugares y sus comunidades.

La calle adyacente, bloqueda al principio con los árboles derribados para abrir paso a la gasolinera, se ha convertido en una especie de “centro político” y lugar de reunión para Cuautla. Asambleas, mítines, tocadas. Existe allí un campamento permanente, que sirvió ayer para recibir al subcomandante Marcos.

“La llegada del delegado Zero cayó en terreno fértil porque encontró energías políticas sanas y vitales. Permitió a los habitantes de la Manantiales mirarse en el espejo nacional de las luchas engarzadas en la otra campaña. Espacio de encuentro, solidaridad y reconocimiento con el resto de los sectores sociales que entretejen luchas en defensa de los explotados y excluídos, por la autonomía indígena, los recursos, el ambiente y el derecho al lugar en que se vive”, declararon hoy los vecinos.

La lucha contra la gasolinera, ya construída pero aún sin operar, cuenta con tal consenso que hasta los candidatos de todos los partidos a la presidencia municipal se dicen contrarios de su apertura. El frente informa que el agua peligra ser envenenada con gasolina, gracias a las “reiteradas violaciones a la autonomía municipal de la magistrada María del Carmen Quijano y otras instancias estatales”. Anguiano Aranda, lejos de ser un “empresario ejemplar” como dijera Marco Adame, candidato a la gobernatura por el Partido Acción Nacional (PAN), “es un empresario corrupto cuya ambición pone en peligro el medio ambiente y las vidas humanas”. También es primo del magistrado Sergio Salvador Aguirre Anguiano, cuyo voto en la Suprema Corte permitió exonerar recientemente a Estrada Cajigal de un juicio político.

Esta noche, el frente de ciudadanos de Cuautla temía un intento de Anguiano por abrir mañana jueves su gasolinera a la fuerza. Dicen que buscaría tenerla abierta un día, pues ya con eso podrá gestionar un amparo. Esta mañana, el frente tuvo fricciones con la policía fiscal, y más tarde un conato de forcejeo con la policía del estado, que se presentó en la gasolinera para confrontar a los vecinos.