Atenco y la Otra, Otro Camino

16.May.06    Análisis y Noticias

San Cristóbal de las Casas, Chiapas, 12 de mayo 2006

“Hoy supimos que la mayoría de nuestros compañeros son gente tzotzil”, dice un joven adherente de la sexta, al referirse a la marcha que recorrió San Cristóbal, y que venía formada principalmente por contingentes de gente de los Altos y de los barrios tzotziles de esta ciudad.

La construcción de otra cosa ha iniciado. Desde el día 4 de mayo han tenido lugar marchas, mítines, asambleas, y un módulo de información ha quedado permanente en la Plaza Catedral, “hasta que salgan libres todos nuestros compañeros presos políticos”.

Iniciamos el 4 con marchas de no más de 15 individuos, ayer marchamos más de 900, en esta ciudad que a momentos parece que no la mueve nada.

En el módulo de información se reparten cada día más de 2000 volantes, boletines y hasta historietas informativas, los transeúntes los reciben con interés y muchos regresan para actualizar su información. El público más atento e indignado por los hechos de Atenco resulta ser los vendedores de esta ciudad, mujeres, niños, hombres y ancianos, ahora que el presidente municipal de San Cristóbal ha prohibido el comercio en esta enorme plaza, para que no se vea fea, sin dar alternativas a la forma de sobrevivir a una fuerte población indígena que vive en esta ciudad.

Un Joven Tseltal se encontraba vendiendo en el momento que pasó la primera pequeña marcha, se integró a las actividades y desde entonces no falla ni un día. Un adolescente que pasa dice” tenemos que hacer una manta que denuncie a los tres partidos”. Un señor de Chanal dice “está muy mal que todo sea en español, se tiene que dar la información en tzotzil y tseltal porque queremos saber bien qué pasa y no todos sabemos español ni sabemos leer”. Una señora que vende chales dice: “de por sí bien sabemos cómo es lo que pasa allá porque aquí hacen lo mismo”. Otro señor de La Hormiga solicita al módulo de información que se hagan grupos para dialogar, porque muchos quieren contar lo que les pasa que es igual como sucedió en Atenco. También llega al módulo una doctora diciendo que su papá es uno de los presos políticos de Atenco sólo por ser defensor de los derechos humanos.

Ayer el punto de encuentro fue la plaza de San Diego, en donde se reunieron alrededor de 800 personas, 580 bajaron de Los Altos de Chiapas y son compañeros de la organización Las Abejas, de Acteal. Llegaron compañeros de COCIDEP, La Hormiga, ONGs, organizaciones de mujeres, estudiantes, católicos concientes, maestros, señoras con niños, ancianos, luchadoras y luchadores sociales, personas.

Fue una marcha ordenada, pero que señaló enérgicamente las injusticias y abusos cometidas en Atenco. “Atenco no está sólo”, “el gobierno es un gobierno violador y represor”, “la lucha no se vende”, “Atenco no se vende”, “queremos justicia para las presas”, “el abuso sexual es una arma criminal”, “presos políticos libertad” “el pueblo unido jamás será vencido, el pueblo callado jamás será escuchado”, “si Ramona viviera con nosotros estuviera” son algunas de las voces que se escucharon.

A lo largo de la marcha espontáneamente por altavoz un orador en tzotzil explicó los motivos de la marcha. A la altura del mercado, vendedores se sumaron a la marcha, los puestos de música apagaron sus sonidos para dar voz al contingente que pasaba. Llegamos a la plaza catedral alrededor de 900 personas y unos 300 más ya esperaban en la plaza, en su mayoría pobladores indígenas de esta ciudad.

Se escucharon las palabras de oradores en español y tzotzil pidiendo la libertad incondicional, no bajo fianza, incondicional de todos los presos políticos, castigo a los gobernantes responsables, con especial énfasis por los abusos sexuales a las compañeras y llamando a la unidad de todos porque somos personas que ya no vamos a permitir que siga tanta injusticia, tanta mentira y que nos estamos organizando de manera civil y pacífica. Una comisión de Bochil denunció la represiónpor parte de la policía estatal que han sufrido en los últimos días campesinos por defender su espacio de trabajo en el mercado.

A partir del 11 de mayo la ciudad de San Cristóbal de las Casas no es la misma, gracias a los compañeros que con su lucha nos han enseñado y a los compañeros, que por luchar, hoy están presos.

Hoy sabemos que somos muchos los que estamos dispuestos a construir otra ciudad, otro estado, otro país y que los Pueblos Indígenas nos siguen poniendo el ejemplo.