POR PRODUCIR GASES QUE OCASIONAN CANCER
Vecinos expresaron un rotundo no a incineradora de basura patológica
ITAUGUA (Antonia Delvalle Castillo, corresponsal). A espaldas de la comunidad y con total impunidad se construye la nueva planta incineradora de residuos patológicos, denunciaron ayer los vecinos durante una movilización en la que pidieron también el cese del funcionamiento de la actual y obsoleta instalación. Ni autoridades sanitarias ni municipales dieron la cara.
Tras concentrarse frente al hospital Nacional y luego de los respectivos pronunciamientos, los vecinos marcharon pacíficamente hasta la antigua planta incineradora y luego hasta la futura instalación.
Con numerosas pancartas que rezaban: “MSP y BS no olvides que debes: prevenir, asistir y curar”, “No es solo el medioambiente, somos nosotros”, “Merecemos respirar aire puro y no humo tóxico de desechos patológicos”, “No al incinerador”, entre otros se manifestaron cerca de 2.000 vecinos del barrio Itauguá Guazú, quienes conformaron una Coordinadora Ciudadana para la Defensa del Medioambiente de Itá e Itauguá. Tras los respectivos pronunciamientos, los vecinos marcharon pacíficamente hasta la antigua planta y luego hasta la futura.
Con el argumento de que corren el riesgo de contraer cáncer y otras afecciones, los pobladores están en total desacuerdo con la construcción de la nueva planta incineradora de residuos peligrosos, biológicos, infecciosos (RPBI) y afines (medicamentos vencidos y otros), que realiza la empresa Sermat SA -cuyo titular es el ingeniero Pedro Losano- en un predio del Ministerio de Salud ubicado detrás del Hospital Nacional.
La obra, que se inició hace unos o dos meses y culminaría en igual cantidad de tiempo, está bastante avanzada y se lleva a cabo mediante un convenio con la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa), dependiente de dicha cartera de Estado.
“Recién ahora, después de que denunciamos por la prensa, dicen que por poco la obra no es la octava maravilla del mundo. Sin embargo, estaban construyendo a espaldas nuestras. Por lo visto que gente de buen peso está detrás de esto, porque ni una autoridad del ministerio ni de otras entidades asoman la cara para intentar explicarnos algo”, acotó José Gómez, uno de los oradores.
Manifestó que tiene conocimiento de que, en principio, la planta iba a ser instalada en territorio chaqueño. “Seguramente los ganaderos, que son de peso y mucha plata, se opusieron porque sus ganados ya no iban a producir carne de calidad y además sus animales corrían riesgo de muerte si comían pasto contaminado. Trajeron la planta a Itauguá porque pensaron que existe gente pobre de conocimiento y de recursos, donde solo iba a morir gente y no ganado”, afirmó.
Añadió que organizaciones ambientalistas internacionales como Greenpeace recomiendan la no incineración de la basura, por la contaminación que produce y el acto grado de toxicidad.