Militarizada la refinería de Ecopetrol en Barrancabermeja
Los rumores de privatización de la petrolera estatal llevaron a los trabajadores de la Unión Sindical Obrera a declarar el estado de urgencia.
En una camioneta negra, los miembros de la Unión Sindical Obrera (USO) recorrieron anoche las calles de Barrancabermeja invitado a los pobladores a marchar hacia las puertas de la refinería de Ecopetrol para evitar la privatización.
“Familiares, amigos, pensionados, obreros, vamos todos a Ecopetrol porque el Presidente la va a privatizar este fin de semana”, gritaba, a través de un megáfono, un sindicalista desde el vehículo.
Las vías de acceso a la refinería fueron acordonadas por la Fuerza Pública y ningún trabajador podía entrar ni salir.
Los obreros que finalizaban el turno a las 10 de la noche se encontraban en las instalaciones al cierre de esta edición.
A las 9: 00 p.m., el complejo industrial fue militarizado sorpresivamente y cerca de 4 mil personas, entre trabajadores y habitantes del puerto petrolero, se agolparon en la puerta principal de la compañía para protestar ante la posibilidad de una reestructuración de la empresa.
El secretario de actas de la USO, Roberto Schmalbach, anunció anoche que el sindicato conoció en horas de la tarde de ayer que el decreto para liquidar a la compañía sería firmado en las próximas horas por el presidente Álvaro Uribe Vélez.
“Una fuente del alto Gobierno nos confirmó esa versión y estamos a la expectativa porque en cualquier momento sería declarada una huelga nacional. Nosotros no vamos a permitir que Ecopetrol sea entregada a unos socios”, agregó el dirigente sindical, quien sostuvo que en el día de hoy ninguno de los 740 empleados entrará a la refinería en esta ciudad.
Ante el rumor de que el decreto saldría en cualquier momento, los empleados que iban a ingresar al turno de las 10: 00 p.m. desistieron de hacerlo y empezaron a gritar arengas en contra del Gobierno Nacional.
Esta nueva tensión se produce 48 horas después de que la gerencia de Ecopetrol le solicitara a la Fiscalía General de la Nación abrir una investigación por dos presuntos sabotajes que ocurrieron el pasado miércoles, y que redujeron de 225 mil a 188 mil barriles la refinación de crudo.
Aunque ayer en la noche la planta operaba normalmente, luego de que hace dos días fue nuevamente abierta tras una parálisis de 12 días que la sacó de funcionamiento por un cortocircuito, y que la mantuvo en manos del personal directivo, el dirigente sindical aseguró que el estado de la refinería podría verse afectado si Uribe Vélez ordena liquidar la petrolera estatal.