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Martes 18 de julio de 2006
Promete el gobierno estatal que no habrá más represión y se buscará el diálogo
Suspende Ruiz la Guelaguetza: ‘’los maestros no ganaron, Oaxaca perdió'’
Tras el anuncio, los mentores retiraron por la tarde el plantón que mantenían en el Cerro del Fortín
El obispo Arturo Lona exhorta a dar oportunidad al gobernador de enmendar sus errores
La Jornada
Oaxaca, Oax, 17 de julio. El magisterio de la sección 22 del SNTE y las organizaciones sociales agrupadas en la Asamblea Popular del Pueblo de Oaxaca (APPO), lograron su objetivo táctico: que se suspendiera la fiesta tradicional de la Guelaguetza, el primer lunes en el cerro. Desde el domingo, mentores y pobladores bloquearon los acceso al Cerro del Fortín, y este día el gobernador del estado, Ulises Ruiz, anunció que la fiesta se pospone hasta nuevo aviso.
A la lucha de casi dos meses que llevan ya los maestros, en demanda de mejoras salariales y recategorización, se sumaron diferentes organizaciones sociales que los apoyan, porque también han sido afectadas por el gobierno de Ulises Ruiz. Esa confluencia de grupos decidió boicotear la Guelaguetza, y le ganó al gobierno.
La noche del domingo fue quemado el entarimado del auditorio del Cerro del Fortín, donde se celebra la Guelaguetza. Los baños donde se cambian los integrantes del grupo de baile fueron casi destrozados. El olor penetrante del humo hacía imposible permanecer en el auditorio al aire libre, con capacidad para casi 10 mil personas.
El dirigente de la sección 22, Enrique Rueda, se deslindó de los actos vandálicos ocurridos el domingo en el Fortín, y dijo que seguramente los causantes de ello fueron “porros” al servicio de Ulises Ruiz.
Por la mañana de este lunes, todavía se sentía tensión en los accesos bloqueados por el magisterio y la APPO para el auditorio. Se pensaba que serían desalojados, y desde la noche del domingo se rumoró que “llegó al aeropuerto un avión Hércules con personal de la PFP. Va a intentar desalojarnos”, decía el magisterio.
Este lunes, el gobernador Ulises Ruiz dirigió un mensaje a los habitantes de Oaxaca, en el que señala que son 26 años de demanda del magisterio “que no se van a resolver en 15 minutos”. Acusó a los maestros de la sección 22 de actuar y exigir respuestas apartándose del estado de derecho, y han provocado daños y perjuicios a los comercios, establecimientos, empresas modestas, al turismo y a los servicios. “Desde que asumí el gobierno puse en claro que el diálogo sería el mecanismo para resolver las tensiones.”
Sin embargo, insistió en que el magisterio ha sido rebasado por grupos sociales que demandan “mi renuncia, y eso lo tiene que analizar el Congreso del estado”. Más tarde, el mandatario estatal ofreció una conferencia de prensa en la que destacó que el gobierno estatal continuará construyendo “la posibilidad de resolver el conflicto. Mi gobierno ha ofrecido propuestas para los 17 puntos que presentó el magisterio, como su demanda de rezonificación a la zona tres, porque en Chiapas ya la tienen”.
Negó que el hecho de “posponer la fiesta de la Guelaguetza signifique que haya ganado el magisterio y el movimiento social. Perdió Oaxaca, porque es una fiesta de todos, y no habrá ventas, se han dejado de recibir recursos adicionales, por la derrama turística, pero continuaré buscando el diálogo con el magisterio”.
Anunció que se comunicó con el presidente Vicente Fox para solicitarle apoyo y el Ejecutivo le respondió de manera favorable, según dijo, y enviará este martes funcionarios del IMSS, Infonavit, Economía y Seguridad Pública para buscar apoyos para los comerciantes y empresarios afectados, es decir, “se buscarán créditos blandos, posponer pagos al IMSS e Infonavit, entre otras opciones”.
Tras el anuncio del gobernador, a las 18:40 horas, los maestros se retiraron del plantón que mantenían en el Cerro del Fortín y regresaron en marcha al Zócalo.
Por su parte, el secretario de Gobierno, Heliodoro Díaz, dijo que no habrá más desalojos ni se utilizará la violencia contra el magisterio, se buscará dialogar de manera prudente y se atenderá la demanda original, que es la del magisterio. También, dijo, se atenderá a través de la Secretaría de Gobierno a las organizaciones civiles.
Toledo, Lona Reyes y Mayrén Peláez llaman al dialogo
La Comisión de Intermediación, integrada por el obispo Arturo Lona Reyes, el pintor y maestro Francisco Toledo y el presbítero Wilfrido Mayrén Peláez, en conferencia de prensa -ofrecida la tarde del domingo- hizo un llamado para que el magisterio regrese a la mesa de diálogo: “permitamos que las fiestas populares se realicen (la Guelaguetza), pero encontremos de una vez por todas los caminos y las acciones suficientes para lograr un acuerdo digno y justo, en que la civilidad, el respeto, la tolerancia y la pluralidad sean la luz que oriente a todos a vivir en paz”.
Expusieron que las causas del movimiento magisterial “tienen que ver con el rechazo de una manera de hacer gobierno, que ya no representa ni satisface a las necesidades y demandas del pueblo oaxaqueño.
‘’Pero es inaceptable que esta legítima demanda sea exigida con métodos que ponen en riesgo a las propias bases del movimiento, que lastiman a terceros y que propician salidas duras o autoritarias que no quiere ni merece el pueblo”.
Ante ello se pronuncian por requerir al gobierno federal y a los congresos de la Unión y del estado de Oaxaca la apertura inmediata de una mesa de dialogo, en que se escuchen los argumentos de la APPO y del gobierno de Oaxaca; generar un proceso de reforma política estatal que revise las condiciones legales institucionales, culturales y reales de los distintos niveles y formas de poder y de gobierno.
Lo anterior, además de reinstalar la mesa de negociación con el magisterio oaxaqueño que cuente con la participación de las dependencias federales involucradas. A la APPO la llaman a la serenidad y para que exprese su reclamo por las vías legales, que “no propicie que la celebración de la Guelaguetza sea una página negra en la historia de Oaxaca; al gobierno estatal que no responda de manera autoritaria ante los reclamos y busque salidas políticas y no represivas, y al gobierno federal a que dé prioridad y soluciones al conflicto nacional y local que se expresa en Oaxaca”.
En entrevista, el obispo Lona Reyes dijo que “Oaxaca no se merece que se haya cancelado la Guelaguetza. En qué concepto nos deja. Es una fiesta tradicional, y todo indica que el magisterio está desbordado”.
Luego refirió que “al gobernador debe dársele la oportunidad de enderezar sus errores”. En las últimas tres semanas, dijo, el gobierno ha dado muestras de que está apenado, lo que pasa es que no ha tenido asesores, pero está dispuesto a subir a 85 millones de pesos la propuesta de apoyo al magisterio, “incluso podría llegar hasta 115 millones, y está dispuesto a dar los recursos para el hotel del magisterio; los mentores deben volver a la mesa”.
El obispo manifestó sentir que “a la comisión nos faltan el respeto, nosotros no merecemos eso, les hablamos por teléfono a los dirigentes y no nos contestan. Tenemos dignidad. Ojalá regresen al dialogo, todavía hay esperanza”.
Dijo que incluso le pedirá al gobernador Ulises Ruiz que sea humilde, que pida una disculpa por cómo actuó el 14 de junio.
El director general de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, Ismael Urzúa afirmó que la decisión de cancelar la Guelaguetza fue prudente y descartó que sea una muestra de ingobernabilidad.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Oaxaca, Freddy Alcántara, demandó a los gobiernos federal y estatal “aplicar un castigo ejemplar a todos aquellos que desestabilicen a la entidad y pongan en riesgo el estado de derecho”. El presidente de la Coparmex-Oaxaca, José Escobar Gómez, lamentó la suspensión de la fiesta del primer lunes del cerro, porque va a afectar al estado por mucho tiempo y a nivel nacional e internacional”.
