Entrevista al Consejo de Comunidades Indígenas Benito Juárez, de la región Loxicha

Nota de Clajadep:
Nos han llegado dos notas contradictorias, una cuestionando a la OPIZ y la otra a favor. Publicamos ambas.

Primera entrevista al Consejo de Comunidades Indígenas Benito Juárez

Loxicha: Historia de represión, saqueo e impunidad

Jorge Lofredo
jorge.lofredo@gmail.com

Son al menos tres las razones más destacadas que permiten un acercamiento y explicación a la brutal represión sufrida en la región Loxicha, habitada por indígenas zapotecos en la sierra sur de Oaxaca, y considerada por el ex gobernador oaxaqueño Diódoro Carrasco Altamirano en 1996 como bastión de la guerrilla.

1. Loxicha fue usado como el campo de ejecución y experimentación de la contrainsurgencia, menos disimulada a la ejecutada en Chiapas: aquí se desencadenó como una gran cacería nocturna, con arrestos ilegales y desapariciones forzadas y ejecuciones clandestinas, como es el caso, entre otros, de Celerino Jiménez Alamaráz. Además, la participación de la Policía Judicial del Estado fue fundamental en las acciones represivas que convirtió al lugar en una “zona liberada” para la militarización e instalación de Bases de Operaciones Mixtas.

2. Esta experiencia, sirvió para que el entonces gobernador priísta, Diódoro Carrasco Altamirano, pudiese presentarse como el hombre fuerte ante el ex presidente Ernesto Zedillo luego del levantamiento zapatista, de la aparición del EPR y del enfrentamiento con el magisterio oaxaqueño (Sección XXII del SNTE). Diódoro Carrasco, luego de concluido su mandato al frente del Ejecutivo estatal, ocupará el cargo de Secretario de Gobernación. La “razón de estado” era no permitir una nueva Lacandona, y fue en Loxicha donde el experimente contrainsurgente se puso en práctica.

3. Asentados en tierras ricas, dentro de los límites de esta geografía se presenció el crecimiento de una organización social e indígena que será violentamente reprimida; sin embargo, el nivel organizativo estaba menos desarrollado que otras regiones indígenas vecinas. Así, Loxicha era un eslabón político y militar más débil y, por tanto, posible para experimento de estas características, además de asentarse en el “corredor” cartográfico militar entre Chiapas, el istmo de Tehuantepec y Guerrero.

El desmembramiento de la organización comunal y la ruptura del tejido social es la consecuencia primaria de las políticas militares, en tanto que la pobreza y el rezago continúan como una forma de control social y territorial. En este contexto puede entenderse el surgimiento de esta nueva organización indígena: el Consejo de Comunidades Indígenas Benito Juárez (CCIBJ). Esta es la primera y hasta la fecha única entrevista que la organización ha ofrecido y que aquí se ofrece en su totalidad.

Entrevista al Consejo de Comunidades Indígenas Benito Juárez
por Jorge Lofredo

I. Sobre la nueva organización

1. Poco o nada se conoce del CCIBJ, con excepción de lo que se expresa en los tres documentos que han dado a conocer públicamente. Debido a ello ¿podrían detallar y profundizar sobre la historia del nacimiento y de la existencia de la organización? ¿Sólo tienen existencia en Oaxaca o también en otros estados? ¿Sólo representan a los Loxichas, o también a otros pueblos?

El CCIBJ es una organización que inició su gestación cuando Juan Sosa Maldonado decidió pasar por encima de los acuerdos de las comunidades indígenas loxichas y del Consejo de Representantes de la OPIZ. Por medio de dichos acuerdos nuestras comunidades desconocieron políticamente a Juan Sosa Maldonado como integrante, representante y presidente de la OPIZ, al momento de descubrir desfalcos económicos y actitudes negativas de dicha persona hacia las formas de organización de las comunidades y el derecho de éstas ha determinar su propio destino. El CCIBJ es lo que fue la OPIZ o, para decirlo de otra forma, es el resultado del desprendimiento definitivo de las comunidades que respaldaban a dicha organización, a pesar de las amenazas y los criminales intentos, por parte de Juan Sosa Maldonado, de impedir dicho desprendimiento mediante la desaparición política forzada de nuestros compañeros Marcelino y Anselmo Santiago Pacheco, así como del asesinato del compañero Leoncio Luna Antonio, quien fungiera como último presidente interino de la OPIZ. El CCIBJ tiene presencia en el estado de Oaxaca y más específicamente en la Sierra Sur.

2. ¿Cómo se definen políticamente? ¿Apoyaron o apoyarán algún partido o candidato? ¿Qué opinión política tienen sobre las elecciones?

Como pueblos indígenas hemos sufrido las políticas discriminatorias, ladronas y represivas aplicadas, en las dos últimas décadas, por los gobiernos neoliberales y, principalmente, por el caciquismo priísta del estado de Oaxaca. En consecuencia, nos pronunciamos contra el trato vejatorio, depredador y autoritario de que hemos sido objeto. Y nos pronunciamos a favor de la economía solidaria, sustentada en la reciprocidad y el servicio mutuo, así como en la democracia participativa y directa, que ha caracterizado la práctica de los pueblos y comunidades indígenas. Oaxaca ha sido un estado gobernado por el PRI durante muchas décadas, partido que ha sumido en la más oprobiosa miseria a nuestro pueblo y aun más a los pueblos originarios. Por su parte, el panismo ha estado gobernando el país en lo que va del sexenio, sin que se hayan producido cambios favorables en la situación que viven y soportan nuestros pueblos indígenas. Antes al contrario, nuestra situación se ha deteriorado cada vez más. Y si todos los partidos son iguales (como lo han demostrado sus prácticas clientelares) ¿por qué apoyar al PRD? Es más, ¿podría el sistema de partidos y el tipo de democracia delegativa, cupular y autoritaria que priva actualmente en México solucionar efectivamente los problemas que históricamente arrastramos? Consideramos que no. Y, en particular, estamos en desacuerdo que se destinen más recursos económicos a la contienda electoral que a paliar –por lo menos– la marginación y la pobreza.

3. ¿Cómo se organizan internamente? ¿Usos y costumbres? ¿Cuáles son los principios para la toma de decisiones? ¿Practican el centralismo democrático?

Efectivamente, nosotros somos participes de los usos y costumbres. Una forma de organización que ha permitido a los pueblos originarios sobrevivir más de 500 años al genocidio implementado por las políticas depredadoras y excluyentes a las que hemos sido sometidos, los principios para la toma de decisiones en nuestra organización es el de La Asamblea de Representantes en la que se decide la política a seguir y las acciones a tomar por la Organización.

4. ¿Son una organización pública o clandestina? ¿Consideran a la vía armada como uno de los medios para expresarse?

La nuestra es una Organización pública, por lo cual no practicamos la vía armada como medio de expresión. Pero creemos que el pueblo tiene en todo momento el inalienable derecho de hacer valer su voluntad y ejercer su derecho a la legítima defensa si es reprimido, y si el gobierno es incapaz de crear, junto a éste, políticas encaminadas a superar el rezago y la marginación en el que se vive.

5. ¿Qué organización política, económica, social, cultural, etc., proponen para la región? ¿Cuáles serían las políticas que debieran instrumentarse para que la región pueda abatir el rezago y la pobreza?

Una organización basada en el respeto de los derechos, la cultura y la visión de los pueblos originarios de nuestra región con políticas que permitan a los pueblos indígenas hacerse realmente dueños de sus recursos naturales y por tanto de su destino, pues no se puede ser libre si se depende de otro económicamente y menos de un gobierno autoritario.

6. ¿Cómo visualizan la actitud de la sociedad oaxaqueña ante la situación pasada y actual ocurrida en la región Loxicha?

Cuando en 1996, el gobierno Estatal y Federal comenzó una campaña de hostigamiento y represión en contra de las comunidades indígenas de nuestra región y especialmente hacia las comunidades de San Agustín Loxicha, y comenzamos a hacer marchas y plantones para expresar nuestro desacuerdo con la militarización, las detenciones arbitrarias, los asesinatos selectivos a las que eran sometidos muchos de nuestros hermanos indígenas, mucha gente nos brindo su apoyo, incluido el apoyo económico. Hoy en día las cosas han cambiado para mal; el nuestro, es un estado que esta viviendo una nueva etapa de represión abierta y de GBI, por parte del gobernador Ulises Ruiz Ortiz y por la oligarquía estatal que lo respalda, quienes se han dedicado a reprimir y detener a luchadores sociales, han coartado la libertad de expresión y de prensa, cosa que muestra su espíritu fascista y neoliberal, por lo que hoy en día, ante el aislamiento, nuestras comunidades han dejado de ser apoyadas y acompañadas por otras organizaciones y gente de buena voluntad. Por decisión del Gobierno ni siquiera se hacen públicos los asesinatos, desapariciones y vejaciones que sufrimos, hechos perpetradas por paramilitares, entregadores, caciques y por gente como Juan Sosa Maldonado, Israel Ochoa Lara y otros que se dicen luchadores sociales y que tienen asolada nuestra región.

7. ¿Aspiran a formar un cabildo en Loxicha?

Efectivamente, nuestra aspiración es la de formar un cabildo, que sea capas de resolver organizadamente, desde el pueblo, las necesidades más apremiantes de nuestra región.

II. Caracterización de la represión en la región Loxicha, grupos paramilitares y guerrilleros

8. ¿Cuál es la explicación política, social, económica, cultural, histórica, etc., que puede ofrecer la CCIBJ acerca de las causas de la represión sobre Loxicha?

La explicación pude empezar por el lado histórico, bajo el entendido de que hace más de 500 años la represión no ha cesado en contra de los pueblos y culturas originarias y simplemente ha habido momentos en el que es agudizada y en otros es contenida , ahora bien socialmente el indígena ha sido uno de los sectores más discriminados por parte del gobierno y por otros sectores sociales, económicamente hemos sido de los sectores más depauperados y marginados, políticamente no se nos ha tomado en cuenta para decidir nuestro destino y culturalmente hemos sido reprimidos por que como pueblo hemos resistido las embestidas del colonialismo, neocolonialismo, imperialismo y neoimperialismo y seguiremos resistiendo por que creemos que un mundo en el que nosotros también seamos tomados en cuenta y participemos activamente, lo podemos lograr si luchamos por él.

9. ¿Cómo evalúan las consecuencias actuales de la represión desatada sobre Loxicha?

La consecuencia que ha traído consigo la represión en la región Loxicha ha sido la esperada por el Estado. Por una parte, ha logrado dividir, desorganizar y enfrentar a la población indígena. En el año de 1996 la población era aproximadamente de 35,000 habitantes (La Jornada 26 de diciembre de 1996) para el año 2000 la población se había reducido dramáticamente a 22,495 habitantes (de acuerdo al XII Censo General de Población y Vivienda 2000 efectuado por el INEGI) lo que quiere decir que ha habido una gran cantidad de asesinados, desaparecidos, detenidos y sobre todo desplazados. En este sentido tenemos que lamentar que hay muchas familias que han perdido alguno de sus miembros. Por otra parte ha logrado romper con las formas colectivas de trabajo que son la base del desarrollo de las comunidades, por lo que una vez más nuestra cultura e identidad se encuentra en peligro.

10. ¿Cómo pueden caracterizar las acciones represivas? ¿Cómo parte de un plan político mayor o localizado en el lugar?

Cada acción violenta planeada por el gobierno y ejecutada por sus órganos represivos en contra del pueblo Loxicha pretende desactivar la resistencia y la lucha de los pueblos originarios por defender su patrimonio, su cultura y su cosmogonía. Ahora bien cada acción represiva implementada por los gobiernos Federal y Estatal pueden ser acciones con carácter local, pero que tiene repercusiones a nivel estatal y nacional, explicamos el por qué, cada una de las acciones represivas en contra de un Municipio, una Agencia, una ranchería o inclusive una organización social, política etc. llevan implícito el mensaje de que contra el Estado no se puede y por tanto organizarse está de más, lo que ha hecho que mucha gente decida marchar por su camino, a solas.

11. ¿Continúan operando grupos paramilitares o parapoliciales en la región? ¿Podrían especificar nombres, modos de operar, familias que los sustentan u otras caracterizaciones que consideren agregar? ¿Cómo estaban integrados estos grupos que accionaron en la región? ¿Qué lapso ha durado la represión?

Los grupos paramilitares siguen operando en la región con toda impunidad, algunos paramilitares son Bernardo Hernández Santiago, Fernando Santiago, su hijo Adrián Santiago de Tierra Blanca San Vicente, gente de Lucio Vásquez, de Primitivo Almaráz Hernández, Lorenzo Martínez Enríquez, Juan Martínez Ruiz, Aquiles Martínez Ruiz, Virgilio Enríquez Santiago, Alberto Enríquez Luna, Rogelio Cruz Fabián, Donato Enríquez Martínez, Pablo Enríquez Matías, Félix Santiago Santiago, Alejandro Matías Antonio, Emiliano Mendoza José, Eucario Mendoza José, Juan Martínez Santiago, Onésimo Ruiz Santiago, Arturo Felipe Almaráz, Faustino Sebastián Valencia, Flavio Almaráz Pacheco, Donaciano Santiago Santiago, Apolinar Martínez Mendoza, Lázaro Ramírez Juárez, entre otros. Los modos de operar siguen siendo los mismos de 1996: acompañan a los militares, van con la cara tapada con trapos denunciando gente como supuestos guerrilleros, y ponen emboscadas en los caminos, principalmente los domingos, día de Plaza, los grupos estaban integrados en su mayoría por gente de Lucio Vásquez Ramírez y por conocidos caciques como Primitivo Almaráz Hernández sus hijos y algunos familiares, la diferencia es que ahora se han aliado con grupos seudo democráticos como el de Juan Sosa Maldonado, pues todos ellos han perdido el poder político que tenían en la región. La palabra “Represión” en el diccionario tiene varios significados entre ellos el de: Acto, o conjunto de actos, ordinariamente desde el poder, para contener, detener o castigar con violencia actuaciones políticas o sociales. Lo que nos lleva a que la represión se viene dando desde que como pueblo fuimos sometidos hace más de 500 años por las potencias europeas y hoy por los políticos al servicio de las políticas de rapiña de las potencias extranjeras especialmente EUA, pero podemos decir que dicha represión se agudizo en 1996 cuando el Estado utilizó toda su fuerza y brutalidad en contra de la población Loxica, hoy en día la represión se sigue manifestando de una forma más sutil y refinada con la Guerra de Baja Intensidad (GBI).

12. ¿Qué papel han jugado las Bases de Operaciones Mixtas (BOM) en el período represivo?

En la región Loxicha existen 4 BOMs: Paraje El Portillo de las Flores, Magdalena Loxicha, La Sirena Miramar, Loxicha y San Agustín Loxicha, ¿qué quiere decir esto?, que tienen tomada la región en puntos estratégicos, los que han servido al ejército federal para controlar las entradas y salidas de la población y con esto el libre tránsito de la misma. Y por otro lado han traído consigo la inestabilidad social, es bien sabido que dichas Bases de Operaciones Mixtas fueron y son bases también de los paramilitares que operan conjuntamente con el ejército federal y también el hecho de que con la llegada del ejército se han presentado la drogadicción y la prostitución en nuestras comunidades (está documentado el caso de indígenas que fueron contagiadas por los soldados de VIH-SIDA).

13. ¿A quiénes hacen responsables materiales e intelectuales de la represión?

Es bien sabido que los responsables de la represión son los gobiernos Federal y Estatal, en particular el ex presidente de la República Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada actual presidente del país, el ex gobernador estatal Diódoro Carrasco Altamirano, José Murat Casab ex gobernador estatal, el ex procurador de justicia estatal Roberto Pedro Martínez Ortiz, el ex director de la Policía Judicial del estado José Trinidad Rodríguez Ballesteros y el actual gobernador Ulises Ruiz Ortiz principalmente, pero también los grupos de paramilitares, guardia blancas, entregadores y caciques que ellos mismos impulsaron como una política contrainsurgente que únicamente a golpeado a las comunidades de la región Loxicha.

14. Tal como ustedes señalan, debido a la aparición del Ejército Popular Revolucionario (EPR) el pueblo zapoteca y sus comunidades han tenido que pagar una cuota muy grande de su libertad y su sangre. ¿Hubo y/o hay grupos guerrilleros en Loxicha? En caso de repuesta afirmativa, ¿cuáles, cuándo, dónde?

A finales de la década de los 70s llegó a San Agustín Loxicha lo que se conoció como “La Organización”, dicha “Organización” fue una herramienta para una parte del pueblo con la cual se pudieron resolver ciertas necesidades que se tenían, como la expulsión de los caciques priístas. A principios de los 90s dicha “Organización” se radicaliza y comienza a haber una nueva forma de organizarse, lo que no significa que todo el pueblo estaba de acuerdo con ello y mucho menos que el pueblo participara masivamente en dicha estructura.

15. ¿Qué lectura hacen de las acciones militares del EPR en Oaxaca en 1996 y en cuánto éstas, objetivamente, han influido para que se desate la represión en la región?

El operativo militar impulsado por el EPR en el estado de Oaxaca y en el país, trajo consigo la justificación política y la respuesta violenta y brutal de los gobiernos Estatal y Federal en contra de las comunidades indígenas principalmente y del EPR, lo que fue denominado por Ernesto Zedillo como “toda la fuerza del Estado”. La lectura que nosotros podemos hacer, es que la decisión de realizar las acciones militares fue una decisión de la organización armada que no contempló las repercusiones hacia las comunidades y no una decisión tomada por éstas, y que después de realizadas las acciones militares y llegada la represión a los pueblos de la región, la organización armada decidió replegarse y con ello el peso de la represión recayó en las comunidades.

16. Luego del ataque del EPR en La Crucecita, la región Loxicha ha sido señalada, particularmente desde el gobierno de Diódoro Carrasco Altamirano, como “bastión del grupo armado”. ¿Qué posición adoptan frente a esa afirmación?

La afirmación de que la región Loxicha y principalmente el municipio de San Agustín Loxicha es, fue o ha sido bastión de grupos armados se ha convertido en la justificación política del gobierno para militarizar la región, despojarnos de nuestras tierras y darlas a las compañías mineras como la Kennecott Canada Exploration Limited de origen canadiense y la nacional Rutilio Mexicano, interesadas en la extracción de importantes yacimientos minerales como el uranio y el titanio. El proyecto se llama Elvira. Esto lo descubrió un grupo de investigadores de la UNAM y para dicho grupo estos minerales son útiles para la alta tecnología, la industria aero-espacial, para construir plataformas marítimas y para la tecnología computarizada, la coincidencia entre la existencia de recursos minerales útiles para este tipo de industria, y la existencia de conflictos aparentemente de carácter étnico, ínter comunitario, agrario, religioso, y hasta de grupos armados, como en el caso de Loxicha, no suele ser tal, Se han documentado casos en todo el país en donde conflicto y riqueza mineral o forestal en territorios indígenas hace pensar en una estrategia de desplazamiento de las poblaciones originarias de sus territorios. Por lo que creemos que dichos minerales y las riquezas naturales son lo bastante valiosas e importantes para el Estado y sus amos neoliberales como para tratar de echarnos de nuestras propias tierras de cualquier manera, inclusive muertos si decidimos defender lo que por derecho nos pertenece.

17. ¿Qué papel y lectura hacen cuando ocurre la caída del cabildo Loxicha en 1996?

Entendemos que el gobierno utiliza una política terrorista, represiva e injustificada, ya que hace la suposición de que el Sr. Fidel Martínez Martínez era eperrista, pues encuentran su cadáver en las proximidades del lugar donde ocurrió el ataque del grupo armado, para nosotros era una persona honrada que representaba los intereses del pueblo en general, ahora bien si aceptásemos la versión del gobierno y bajo el supuesto de que era eperrista (recuérdese que el cuerpo del señor Fidel Martínez, presentado por el gobierno estatal no pudo ser reconocido por la misma familia) y participó en el operativo militar de La Crucecita, ello no implica que el cabildo de San Agustín Loxicha, (Agustín Luna Valencia; el suplente Isaías Ambrosio Ambrosio; el secretario municipal Manuel Nicandro Ambrosio José, el agente municipal de San Francisco Loxicha, Emiliano José Martínez, y su suplente, Benito Matías) y fuente ovejuna el pueblo Loxicha fuesen eperristas. Nuestro papel en aquel entonces fue el de la denuncia y la movilización en contra de la represión que ejercía el gobierno en nuestra contra.

III. Sobre la OPIZ, las diferencias internas y la organización de los zapotecos

18. ¿Por qué han optado por crear una nueva organización y no intentar disputar la titularidad y la representación de esa organización? ¿Consideran que la Organización de Pueblos Indígenas Zapotecos (OPIZ) es un espacio agotado para la representación de los zapotecas? ¿No es acaso dividir la representación y, por consecuencia, ofrecer facilidades a quiénes no les conviene una organización zapoteca fuerte y unida?

Cuando en el 2003 fue desconocido Juan Sosa por varias anomalías como haber amenazado de “desaparecer” a los presos, haber desfalcando a la OPIZ, porque sin ningún derecho se autonombró como presidente de la OPIZ, porque confrontaba a la OPIZ con la Unión de Pueblos contra la Represión y Militarización de los Loxichas (UPRLM) en lugar de intentar un acercamiento, porque su relación política con los compañeros no era buena, etc., Juan Sosa y su camarilla intentan disputar la titularidad de la OPIZ desapareciendo primero a Marcelino Santiago quien fue elegido como Presidente de la OPIZ por el Consejo Directivo y el Consejo de Representantes de nuestras comunidades, desapareció después al compañero Anselmo Santiago Pacheco, elegido como Presidente interino por el Consejo Directivo y el Consejo de Representantes de la OPIZ, al ser desaparecido su hermano Marcelino, y asesinó -junto con otros como Daniel Santiago Matías, “Vidal” o “El Flaco” y otras personas desconocidas- al compañero Leoncio Luna Antonio elegido Presidente de la OPIZ por el Consejo Directivo y el Consejo de Representantes de la OPIZ, al ser secuestrados y desaparecidos los compañeros antes mencionados, porque Leoncio Luna fue el único que denuncio a Juan Sosa por la desaparición de Anselmo Santiago, pues Leoncio estaba presente cuando nuestro compañero fue secuestrado y desaparecido. Por todo lo anterior, en lugar de disputar la titularidad de la OPIZ y agudizar el conflicto interno, decidimos formar una organización representada y dirigida por los mismos indígenas y no por gente externa que llegó a imponernos sus decisiones valiéndose incluso del secuestro y la desaparición forzada. Además, la OPIZ ya estaba dividida (recordemos el caso de la Unión de Pueblos contra la Represión y Militarización de los Loxichas (UPRLM)) y se había desvirtuado el carácter de su lucha por todos los problemas políticos que se habían estado viviendo.

19. En su carta-denuncia a Juan Sosa Maldonado se describen diferencias políticas al interior de la OPIZ, hechos de corrupción y lo denuncian a su titular como responsable de desapariciones. Frente a estas graves acusaciones, y más allá de las denuncias, ¿han considerado llevar adelante otro tipo de actividades?

Por el momento sólo el de la denuncia pública por medio de los medios informativos, llegada otra etapa consideraremos el de la denuncia penal.

20. En una carta de noviembre 2005, firmada por Juan Sosa Maldonado, titular de la OPIZ y por la Lic. Yesica Sánchez Maya y por el Lic. Israel Ochoa Lara de la Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos (LIMEDDH), señala que “así, en poco más de dos años se han revivido los peores días de la era diodorista, con la ejecución de aproximadamente tres decenas de indígenas zapotecos y un número creciente de detenciones arbitrarias con plena colaboración de quienes en la Región Loxicha, diciéndose pertenecer a una Tendencia Democrática Revolucionaria y a una Izquierda Democrática Popular, utilizan a los indígenas como objetos desechables de una maquinaria de guerra diseñada desde los escritorios del CISEN”. ¿Qué opinión les merecen estas afirmaciones?

No sabemos con que calidad moral puedan hacer ellos dichas afirmaciones, cuando están siendo acusados de desaparecer a dos personas y asesinar a otras tantas, creemos que primero deben de responder a dichas acusaciones. Sabemos que estas personas han asumido una posición de defensa hacia el EPR en otros estados, concretamente en Guerrero, por los problemas que éste tiene con otras organizaciones armadas. Creemos que las otras organizaciones tienen el derecho y la obligación de aclarar estas acusaciones, ahora bien toda acusación debe estar fundamentada y deben presentar pruebas de lo que afirman si no quieren caer como ellos dicen en políticas diseñadas desde los escritorios del CISEN.

20. ¿Qué posición asumen ante la Unión de Pueblos contra la Represión y Militarización de los Loxichas (UPRML)? ¿Forman parte de esa organización, esa organización se ha sumado a la vuestra, se han conjuntado, coordinan, etc.?

La UPRML es una organización que en un primer momento se retira de la OPIZ por los desacuerdos que tenía con esta organización y en particular por la disputa que tuvieron del albergue de Loxichas en la ciudad de Oaxaca, de donde son expulsados por Juan Sosa los compañeros que después serían la UPRML, cuando nosotros desconocemos a Juan Sosa en el 2003, e íbamos a dar una conferencia de prensa en el que trataríamos de acercarnos a la UPRML es desaparecido nuestro compañero Marcelino Santiago Pacheco, hecho que impide la conferencia y el acercamiento. En estos momentos sabemos que Donasiana quien fuera la representante de la UPRML está trabajando con Juan Sosa y de su organización desde ese momento y hasta el día de hoy no se sabe nada.

IV. Ante los presos políticos

21. Ha sido y continúa siendo arduo tanto el camino recorrido como por recorrer de los indígenas loxichas, ya por sus reivindicaciones sociales (plantones, marchas, huelgas de hambre, etc.) como así también por los presos de la región. Precisamente sobre el tema de los presos, ¿qué posición política expresa el CCIBJ frente a este tema?

Efectivamente en su momento hubo al menos 200 detenciones ilegales, 150 casos de tortura, 32 cateos ilegales, 22 ejecuciones extrajudiciales, 22 desapariciones forzadas, 137 personas presas por motivos políticos y de conciencia y un número indeterminado de abusos sexuales, hostigamiento, amenazas de muerte y procesos penales irregulares, viciados de origen (ver Misión Civil de Observación de Derechos Humanos 21-24 marzo 2002). Los gobiernos estatal y federal han utilizado a los presos como rehenes políticos para tratar de subyugar al pueblo de la región Loxicha, de Oaxaca y de México intimidando con esto a toda persona que desee organizarse, recordemos que la mayoría de presos obtuvieron su libertad por falta de pruebas lo que demuestra que fueron utilizados como chivos expiatorios, por lo que exigimos la inmediata libertad de los presos políticos y de conciencia de la región Loxicha y del país.

22. ¿Hay presos políticos que se identifican o forman parte de su organización?

Sí.

23. ¿Ha impulsado el CCIJB plantones, marchas, u otras acciones por la liberación de los presos o por otros asuntos? ¿Pueden especificarlas?

No por el momento.

V. Sobre los gobiernos estatales, las elecciones y los candidatos

24. ¿Qué lectura hacen de los gobiernos de Diódoro Carrasco Altamirano, José Murat Casab y Ulises Ruiz Ortiz? ¿Expresan para el CCIJB una línea de continuidad?

Los gobiernos estatales desde el de Manuel Zárate Aquino hasta el de hoy con Ulises Ruiz Ortiz, han sido gobiernos represivos, que se han enriquecido a costillas del pueblo y que han desarrollado políticas neoliberales que han hecho incierto el futuro del pueblo oaxaqueño y principalmente de los sectores más desprotegidos como lo es el indígena.

25. ¿Qué opinión les merece la candidatura de Gabino Cué Monteagudo y el apoyo que le ha otorgado el Partido de la Revolución Democrática (PRD)?

No creemos que Gabino Cué siendo un cacique de la Sierra Norte sea realmente una opción viable y tenga la voluntad política de gobernar en beneficio del pueblo de Oaxaca. El PRD ha otorgado su apoyo a cualquier persona que decida incorporarse al proyecto de AMLO sin importar su procedencia política (como la de Gabino Cué ex priísta) ni su solvencia moral.

26. ¿Tienen vínculos con algún partido político?

NO

27. ¿Tienen pláticas o vínculos con alguna instancia del gobierno estatal?

NO

28. ¿Qué posición asumen ante el gobierno federal y las instancias institucionales de asuntos indígenas?

La opinión que nos merece es el de la ineficiencia y la falta de compromiso, pues fue Fox el que prometió en su campaña que iba a resolver el problema indígena de Chiapas, por lo que podemos decir que no ha habido la suficiente voluntad política ni siquiera para aprobar los acuerdos de San Andrés, lo mismo podemos decir de las instituciones de asuntos indígenas pues sólo hay que ver en que condiciones se encontraban las comunidades indígenas antes del presente sexenio y en que condiciones se encuentran en este momento, creemos que lo poco que se ha hecho no son más que paliativos que no sirven en lo más mínimo para que los pueblos y culturas originarias puedan salir del atraso y la miseria, pero que son usados como política estatal para hacerse de votos y apoyo de parte de los indígenas hacia ellos.

VI. Posición ante los conflictos entre comunidades indígenas y el EZLN

29. A lo largo de todo México se han producido enfrentamientos entre comunidades indígenas, y Oaxaca es el estado donde existen los “focos rojos” más preocupantes. ¿Qué lectura política asume el CCIJB con respecto a estos enfrentamientos? ¿Cuáles serían los medios, según su organización, para resolver estos conflictos?

A lo largo de nuestro estado los problemas más comunes son los problemas agrarios, lo que trae consigo una creciente ola de violencia; todo esto ha sido impulsado por el gobierno y la Secretaría de la Reforma Agraria y de su falta de voluntad política para resolver dichos problemas. Desde nuestra perspectiva los medios para evitar los conflictos agrarios se deben basar en una reforma agraria que modifique el art. 27 constitucional evitando por tanto la enajenación de la tierra y a la vez la disputa por la misma entre pueblos y comunidades indígenas hecho que sólo trae el desplazamiento de sus habitantes y el consecuente apoderamiento de empresas e intereses dedicados a la explotación de la flora y fauna destruyendo por tanto el patrimonio de los mexicanos.

30. ¿Cuál posición asume el CCIBJ sobre la matanza de Agua Fría?

A 10 años de la matanza sostenemos que los responsables de este hecho son los caciques priístas y los pistoleros locales que hacen en las comunidades indígenas su voluntad apoyados por los gobiernos estatales que permiten la impunidad para resguardar sus intereses políticos y económicos en las distintas regiones de nuestro estado.

31. ¿Cómo define la organización la situación indígena a nivel nacional?

Bastante crítica, ya que actualmente los pueblos indígenas han comenzado a perder su cultura, sus tradiciones, su lengua y por tanto su raíz, lo que ha traído la perdida de identidad y la destrucción del tejido social que compone a las comunidades y por tanto la división y problemas internos que terminan en la confrontación violenta entre los indígenas.

32. ¿Qué posición asumen ante el Ejército Zapatista de Liberación Nacional? ¿Qué caracterización hacen?

El EZLN representa una nueva forma de hacer política en beneficio e interés de los pueblos originarios, por lo que merece nuestro más profundo respeto y respaldo.

33. En el marco de “La Otra Campaña”, ¿se han reunido con el ELZN? Si la respuesta es negativa, ¿se han vinculado con el EZLN en otra circunstancia? ¿Podrían especificar?

No nos hemos vinculado con el EZLN ni en La Otra Campaña ni en ninguna otra circunstancia, no por que tengamos diferencias con ellos sino por que nuestras propias circunstancias no nos lo han permitido.

34. ¿Están vinculados con otras comunidades indígenas? ¿Cuáles?

Sí, con algunas de la Sierra Sur del estado de Oaxaca.

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OPIZ, 22 AÑOS DE VIDA.

Decir 22 años es fácil, en un camino difícil para una organización que aun
enfrentando toda la fuerza del estado ha sobrevivido.
Pero sus orígenes van mucho más allá del 28 de julio de 1984, porque a la
extrema miseria y marginación se sumaba la explotación, robo, quema de casas,
pertenencias y asesinato de indígenas zapotecos de la Región Loxicha.

Enfrentando a caciques y pistoleros se impone la colectividad, haciendo valer
el sistema de usos y costumbres para elegir a sus autoridades comunitarias,
desterrando los vicios en las comunidades que caminaban hacia la posibilidad de
un desarrollo integral.

Loxicha, guerra silenciosa

En 1996, el gobernador del estado de Oaxaca y despues Secretario de
Gobernación, Diódoro Carrasco Altamirano, abrió las puertas del infierno para
los indígenas zapotecos de la Región Loxicha, que ya de por sí vivían el
purgatorio de la extrema miseria y marginación, esto con el improbable argumento
de que en las comunidades indígenas se había incubado al Ejército popular
Revolucionario.

En estos más de 9 años de Guerra de Baja Intensidad, cerca de 200 indígenas
hemos pisado las cárceles del país, incluida la cárcel de Máxima seguridad de
“La Palma” en el Estado de México, invariablemente todos fuimos torturados
física y psicológicamente. Tenemos un registro de más de 80 ejecuciones
extrajudiciales, 15 desapariciones forzadas y el desplazamiento forzado de la
población.

Pero hacer un recuento de está manera, no muestra ni por asomo el terror que
hemos enfrentado en las sesiones de tortura o el dolor de los familiares al
tener a sus parientes encarcelados, la impotencia y desamparo de los dolientes
de los ejecutados, pero nada se compara con la incertidumbre de quienes no saben
del paradero de sus seres queridos, pues a la desesperación de la perdida se
suma la angustia de la busqueda, el saber que puede estar sufriendo en esos
momentos crueles torturas o incluso que lo han asesinado sin que tenga una tumba
donde puedan rezar una oración por su eterno descanso y la paz.

Como en toda guerra, no han faltado los mercenarios, los traidores a sus
propios principios ideológicos, quienes, amparándose en organizaciones que se
dicen de izquierda, democráticas o populares y hasta de tendencias
revolucionarias que, con el fin del crecimiento cuantitativo no han reparado en
lucrar con el dolor y la sangre de nuestros hermanos, han entrado al sucio juego
del estado, contribuyendo a la corrupción de los líderes comunitarios, a la
creación de grupos paramilitares que se encargan de entregar y ejecutar a sus
propios hermanos, grupos paramilitares que en estos momentos se encuentran al
servicio del presidente municipal de San Agustín Loxicha, Oscar Valencia García,
quien es incondicional de quien detenta el cargo de Gobernador del Estado,
Ulises Ruiz Ortiz, gobernador que enfrenta un juicio popular tendiente a que
renuncie al cargo que ha mancillado.

El estado echa mano de la creación de membretes para utilizarlos en contra del
movimiento popular, con acciones que van desde pintas en contra del magisterio
hasta la agresión directa contra lideres sociales y espacios de difusión
independientes que se han constituido en la voz del movimiento popular.

Libramos esta guerra aquí en Oaxaca, así como en otras latitudes la ceguera de
la ambición destruye a pueblos enteros, donde la vida de los niños inocentes es
cercenada por las bombas asesinas de quienes sin ningún escrúpulo, en su loca
carrera por erigirse en los nuevos emperadores de este neocolonialismo, no
reparan en segar lo más sagrado para la especie humana, la vida.

Así, no es de extrañarse que en nuestro país la ultraderecha intente imponerse
a la voluntad popular con el fin de concretar sus planes neoliberales y extender
el manto de impunidad a los personeros del poder que le han declarado la guerra
a los pobres, los obreros, los campesinos, los maestros y los indígenas en una
criminalización constante de la protesta social donde ser luchador social o
defensor de Derechos Humanos para ellos es sinónimo de terrorista.

Seguiremos en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas, de los
Derechos Humanos y de la voluntad popular a pesar de que como en Chiapas,
Guerrero, Michoacán y en todo el territorio nacional, los grupos paramilitares
no dudan en asesinar por la espalda para, después de muertos, ante la
imposibilidad de defendernos nos acusen de crímenes que nunca cometimos.

ORGANIZACIÓN DE PUEBLOS INDÍGENAS ZAPOTECOS

Oaxaca de Juárez, Oaxaca; Julio de 2006

Juan Sosa Maldonado
loxicha@gmail.com