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MARACAIBO. COOPERATIVAS WAYUU DECIDIERON SUSPENDER DESPACHOS DE COMBUSTIBLE
Los cooperados argumentan que les han puesto trabas para pagar las pólizas. También exigen seguridad para los camiones que entren a Colombia. El Ministerio de Energía inspeccionará hoy la planta para determinar si puede recibir el producto.
Los miembros de las 11 cooperativas del programa binacional de venta de combustible venezolano a Colombia acordaron ayer en la tarde, por unanimidad, no vender ni un gota de combustible al vecino país hasta tanto no respondan por la pérdida de 85 camiones incinerados en el atentado de las Farc del pasado lunes.
La decisión fue tomada a pesar de que, el presidente de la República, Hugo Chávez, y el ministro de Energía y Petróleo manifestaron este martes la decisión de no interrumpir el comercio y continuar los despachos de combustible.
“Hemos tomado esta decisión para que nos respondan por daños a nuestros vehículos y para que nos garanticen la seguridad de los carros que entren a llevar el producto”, dijo Oscar González, coordinador de la cooperativa Macuira Wayuu.
Otro de los cooperativistas, Miguel Polanco, miembro de la cooperativa Transporte Wayuu, dijo que pese a que el Gobierno colombiano ha ofrecido un seguro hasta ahora han puesto demasiadas trabas para otorgarlos.
“No va entrar ni una gota de combustible porque además de vigilar La Raya, también vamos a impedir el paso de la gasolina por trochas como Monte Lara, Castilletes, el río Limón y la Mina de Carbones del Guasare. Seremos garantes de que ni siquiera por contrabando entre el combustible”, aseguró Polanco.
Los cooperativistas exigen además una reunión binacional, puesto que ayer en la sede del Comando Regional 3 (Core 3) de la Guardia Nacional, en Maracaibo, no acudió ningún representante del vecino país.
“No podemos exigirle más a Venezuela de lo que nos ha dado y nos sigue dando. Lo más urgente es una reunión binacional, donde hay que sentar al Gobierno colombiano, para exhortarlos y comprometerlos a que nos respondan por nuestros vehículos, porque eso ocurrió en Colombia y son carros venezolanos”, dijo Rosario Henríquez Ipuana, vicepresidenta de la cooperativa Ayatawacoop, arrendataria de la planta que fue atacada este lunes por las Farc.
Inspecciones
Antes de la determinación tomada por los cooperativistas, se efectuó en la mañana de ayer una reunión en el Core 3 con Gladis Parada, directora general de Mercado Interno del Ministerio de Energía y Petróleo (Menpet), quien reconfirmó lo afirmado por el ministro Rafael Ramírez: “Efectivamente vamos a apoyar a los indígenas wayuu que fueron víctimas de la situación que se vivió en Maicao. Vamos a buscar un mecanismo para suministrarles los camiones necesarios para mantener el esquema”.
Pero aclaró que no van ser suministrados la totalidad de los 85 camiones siniestrados.
“No vamos a retribuirlos todos. Primero vamos revisar cuántas unidades quedaron en buen estado, para saber cuántas se requieren para dinamizar el programa, y las que ya se tienen entrarían en actividad de inmediato, para seguir con el programa”, explicó Parada.
Yurexbeth Colina, jefe de Seguridad, prevención y ambiente del Menpet, anunció que hoy junto con otros representantes de la misma dependencia, inspeccionarán las condiciones de la planta Ayatawacoop, en Maicao, para determinar si es apta para recibir más combustible y reactivar el comercio binacional.
Sobre las condiciones de seguridad industrial con las que cuenta la planta dijo: “En el área no había ningún tipo de seguridad y se utilizaban los vehículos de Venezuela para almacenamiento, lo cual no vamos a permitir que continúe. Mientras tanto estarán en nuestro país y se despachará por pedido”.
Colombia aumentará controles en frontera con Venezuela
Bogotá, agosto 16 (DPA).- El gobierno colombiano reforzará los en la zona de frontera con Venezuela para evitar que se incremente la venta de gasolina ilegal tras el ataque que las FARC reconocieron que hicieron el lunes contra la principal planta almacenadora de combustible en la región.
El ministro colombiano de Minas y Energía, Hernán Martínez, informó que se solicitará la cooperación de las autoridades venezolanas para fortalecer los controles y evitar un “disparo” de venta ilegal del combustible.
“Tenemos que intervenir un poco y poner unos vehedores para estar seguros que no haya contrabando y pediremos a la Policía Aduanera de la frontera para que nos ayude a mirar un poco las cuentas para verificar que allí no haya nada indebido y que las cosas se estén manejando como es”, dijo Martínez.
El pronunciamiento se conoce en momentos en que las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) reconocieron su autoría en la destrucción de la planta almacenadora, argumentando que su ofensiva fue un ataque “contra las fuentes de financiación del paramilitarismo”.
“El ataque a la estación gasolinera en proximidades de Maicao es una acción directa contra las fuentes de financiación del paramilitarismo de Estado, causante de las más grandes desgracias humanitarias en la Guajira colombiana”, cita un comunicado del grupo insurgente emitido.
Los rebeldes afirmaron que su ataque es un mensaje para que los paramilitares comprendan que los pueblos indígenas del departamento de la Guajira no “quieren más masacres como las de Bahía Portete y Dibulla, que suman más de 800 guajiros asesinados por ‘paracos’, al mando del jefe paramilitar ‘Jorge 40’, amigote del presidente Alvaro Uribe”.
