China, Greenspan y Cheney tumbaron los mercados bursátiles

01.Mar.07    Análisis y Noticias

Miércoles 28 de febrero, IAR Noticias

Que el capitalismo “globalizado” está cada vez más paranoico y demente lo atestiguó ayer la impresionante caída de las bolsas mundiales que se derrumbaron como un castillo de naipes sin causas sólidas que lo justificaran, más allá de de las especulaciones coyunturales de los analistas y expertos.
En principio se decía que la fuerte caída que sacudió los mercados bursátiles de todo el mundo, el martes, obedeció a temores sobre una desaceleración más fuerte que lo previsto en Estados Unidos, así como a los temores sobre el fin de la burbuja de la economía china, que desencadenaron una ola mundial de ventas.
El índice bursátil más importante de China sufrió ayer su mayor desplome en una década, provocando una reacción en cadena que desató fuertes pérdidas en muchos mercados globales, desde Mumbai, Londres y Nueva York a São Paulo, Ciudad de México y Buenos Aires.
Las caídas se produjeron sin que hubiera una “noticia específica” que causara alarma respecto de la salud de la economía mundial, según The Wall Street Journal, el más influyente diario financiero del Imperio.
Si bien los inversionistas extranjeros tienen poco acceso directo a las acciones de empresas en China, el prolongado auge bursátil ha aumentado la importancia de las bolsas chinas en el mundo.
Por eso, para muchos analistas no fue una “sorpresa” que los mercados emergentes, especialmente el latinoamericano, estuvieran entre los más afectados. Las bolsas latinoamericanas, en especial, experimentaron un día de fuertes ventas.
Los precios de las acciones cayeron el miércoles en varios países de Asia y el Pacífico, siguiendo una tendencia de los mercados mundiales que comenzó en el mercado de valores de Shangai, China, el martes.
Las acciones chinas registraron la mayor caída en un día de los últimos diez años, con un descenso de casi el 9 por ciento en el índice de Shanghai respecto al cierre de la sesión anterior.
Este indicador bajó 268,81 puntos y cerró con 2.771,79 puntos, un retroceso del 8,84 por ciento, el mayor desde febrero de 1997, cuando descendió un 8,91 por ciento.
Wall Street sufrió el martes una fuerte baja, con el índice Dow Jones perdiendo más de 400 puntos en los últimos negocios de la jornada, siguiendo la tendencia en otros mercados.
A las 20:15 GMT, el Dow Jones Industrial Average, índice de las principales acciones, caía 404,89 puntos (-3,21%) a 12.227,37 puntos, luego de perder más de 500 puntos hacia las 20H05 GMT .
El índice de valores tecnológicos Nasdaq perdía 88,44 puntos (-3,53%) a 2.416,08 puntos y el índice ampliado Standard and Poor’s 500 perdía 3,21% (-46,58 puntos) a 1.402,79 unidades.
De acuerdo con los analistas el desplome se debió a tres factores:
1) el desplome del mercado chino,
2) el ataque contra el vicepresidente de EEUU, Dick Cheney, en una base militar de EEUU en Afganistán,
3) las declaraciones del ex presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, quien dijo que EE.UU. podría entrar en recesión a finales de año, son algunos de los factores que influyeron en la caída en las bolsas.

La “bola de cristal”
The Wall Street Journal atribuye fundamentalmente el derrumbe bursátil a la famosa “bola de cristal” de Greenspan , y a la notable influencia que ejerce el ex presidente de la Reserva Federal en los mercados bursátiles mundiales.
El lunes, Greenspan dijo vía satélite a una audiencia en Hong Kong que existía la posibilidad de que EE.UU. entrara en recesión. Greenspan no dijo que una recesión fuera probable. De hecho, resaltó que la mayoría de los economistas lo consideran improbable, según el Journal.
Sin embargo, el “pesimismo” que los inversionistas extrapolaron de sus comentarios empezó a crecer a medida que los titulares se difundían a través de las mesas de negociación y contribuían a una ola mundial de ventas de acciones, un alza en los mercados de bonos y un aumento en las expectativas de que la Fed recortará las tasas de interés.
Según el Journal, el poder de los comentarios de Greenspan fascinan y frustran a muchos en los mercados.
“De alguna manera, sigue siendo un maestro”, dice Thomas Joseph Marta, un estratega de renta fija para la firma de valores RBC Capital Markets. “Aunque manda Bernanke, la bola de cristal de Greenspan adquiere un mayor peso”.
Según el especialista en temas económicos de la BBC, Andrew Walker, en muchas oportuniaddes los mercados estadounidenses y europeos han caído en respuesta a los mercados asiáticos.
Esta vez, y de forma inusual, dice Walker, el empujón vino de Shanghai.
Según Walker, el mercado en Shanghai cayó en picada luego de que los bancos y los fondos de inversión vendieran sus acciones para aprovechar el rápido aumento del valor de las acciones, las cuales se han desempeñado con vigor desde el año pasado por el crecimiento económico del país.

Bolsas europeas en baja
En tanto, los principales mercados europeos abrieron a la baja este miércoles.
Tras el desplome de ayer de Wall Street, los principales indicadores europeos abrían en negativo, y París perdía un 1,87%, Fráncfort un 1,54%, Milán un 1,37% y Londres un 1,27%.
El índice FTSE-100 de la bolsa de valores de Londres, Reino Unido, abrió con un descenso de 96,8 puntos, el 1,54% menos, situándose a 6.189,3 unidades.
El índice DAX 30 de Francfort, Alemania, cayó inicialmente 139,28 puntos, el 2,04%, hasta 6.680,37 puntos.
Por su parte, el índice SMI (Swiss Market Index) de la bolsa suiza perdió, en la apertura, 163,61 puntos, el 1,83% menos, hasta las 8.746,61 unidades.
En París, Francia, el indicador CAC-40 abrió con pérdidas del 2,19%, bajando a 5.466,05 puntos, mientras que la bolsa española arrancó con una caída del 1,85%.
Este miércoles hubo también importantes descensos en Australia, Nueva Zelanda y Malasia.
Sin embargo, la bolsa de Shangai se recuperó y cerró con un aumento del 3,94%, a 2.881,07 puntos, aparentemente dándole la razón a diversos analistas que habían señalado que la caída del martes sería breve, ya que los fundamentos económicos son fuertes.