17.04.07 - BRASIL
El Campamento Tierra Libre - que marca las movilizaciones del Abril Indígena - comenzó a ser montado desde ayer y ya reúne a cerca de 1.000 indígenas de diferentes regiones brasileras, en el Distrito Federal, en Brasilia. Análisis del Pacto de Aceleración del Crecimiento (PAC), derechos indígenas, demarcaciones, salud y educación son algunos de los puntos que van a orientar los debates que se realizarán hasta el día 19 - Día del Indio.
La programación de hoy comienza con un debate sobre el actual marco político, el PAC y la situación de los derechos de los pueblos indígenas. A la tarde, los participantes salieron del campamento para asistir a un acto público que recordó el 10º aniversario del asesinato del indio Galdino Pataxó, a quien le fue incendiado su cuerpo por jóvenes de clase media de Brasilia, hecho que llamó la atención de la comunidad internacional.
Los debates proseguirán el miércoles, esta vez los mismos estarán orientados hacia las estrategias de los movimientos indígenas e indigenistas sobre el rumbo de la política indigenista del Gobierno de Lula. La tarde estará dedicada a la discusión, elaboración y aprobación del Documento Final del Campamento Tierra Libre 2007, además de definir acciones y agenda de movilización.
Para el jueves, están agendadas dos audiencias. La primera, a las 9h, con el Senado Federal para discutir las demandas de los pueblos indígenas. La segunda, a la tarde, con la Ministra presidente Ellen Gracie Northfleet, del Supremo Tribunal Federal, que tendrá como punto esencial el papel del poder judicial en las cuestiones indígenas.
Ayer, durante la entrevista colectiva con líderes indígenas y grupos indigenista, fue destacado que el propósito del Campamento Tierra Libre es hacer que todas las demandas indígenas sean discutidas y llevadas hasta la esfera presidencial.
Manifestaciones en Maranhão
En el municipio de Estreito, situado entre los Estados de Maranhão y Tocantins, cerca de 500 indígenas y pueblos ribereños continúan acampados en las inmediaciones de la Hidroeléctrica de Estreito, donde protestan contra la construcción del emprendimiento, que afecta a cientos de comunidades.
De acuerdo con la asesoría de prensa del Consejo Indigenista Misionero - Tocantins, a lo largo del río Tocantins existen 12 hidroeléctricas. “Tanto las comunidades indígenas como las ribereñas tienen una relación muy estrecha con el río, el impacto en la pesca es muy grande”, explica Laudovina Pereira, del Cimi.
Los indígenas reivindican la paralización legal de las obras de la hidroeléctrica y exigen además que las comunidades sean escuchadas por la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara y del Senado.
Ayer la carretera Belem-Brasilia estuvo bloqueada por cerca de 11 horas y sólo fue liberada, a las 19h30, después de que un acuerdo fue realizado con el Ministerio Público Federal, en Maranhão.