Importante entrevista a Óscar Olivera, dirigente de los fabriles de Cochabamba y de la Guerra del Agua

10.Mar.09    Análisis y Noticias

LO QUE HEMOS DEJADO DE HACER DERECHO, QUE HACE LAS EDADES

Oscar Olivera fue una de las principales personas encargadas de las luchas en Bolivia en los últimos años ha apoyado la candidatura de Evo Morales, sin embargo, considera que la situación actual de los movimientos sociales es uno de los más difíciles que ha visto “porque el gobierno ha excluido, ignorado e incluso despreciado los que quieren tener una voz independiente “. Su análisis sobre la polarización de los descuentos que el gobierno con la derecha, y las señales de embriones que comienzan observó en la sociedad.

Basta Ya de Italia (www.yabasta.it)

La primera imagen sobre Bolivia podria llevar a pensar que los movimientos sociales estan pasando por su mejor momento, de la mano de la llegada del cocalero Evo Morales al poder. Las escenas muestran a un gobierno enfrentando a la derecha y representando a los sectores populares. Pero hay otras voces, y otras miradas sobre la situacion, que hacen mas compleja y matizada esa polarizacion. Hace 30 anos que estoy metido en estas luchas como dirigente obrero, como obrero del gas, como portavoz de movimientos sociales importantes pero le confieso que nunca he visto las grandes dificultades que en estos momentos tenemos los movimientos que hemos venido luchando toda la vida, por la situacion de confusion y por como nos sentimos excluidos, ignorados, olvidados y hasta despreciados.
Oscar Olivera es dirigente de la Federacion de Trabajadores Fabriles de Cochabamba y ha sido portavoz de la Coordinadora de Defensa del Agua y la Vida que motorizo la Guerra del Agua en 2002, una pueblada que logro torcer algo de la historia neoliberal de Bolivia, y revertir la privatizacion del agua, que incluia aunque parezca una broma- la privatizacion del agua de lluvia. Aquellas luchas, entre tantas otras, fueron abriendo el panorama a la candidatura de Evo Morales, que llegò a la presidencia en enero de 2006. Y que Olivera apoyò sin imaginar acaso que quedarìa tiempo despuès en una posiciòn crìtica donde ademàs siente que los movimientos sociales estàn pasando por una de las peores etapas de debilidad que ha conocido.
-Como ve la situacion boliviana?
Para empezar, muchos sectores emblematicos de las luchas sociales se fueron al gobierno, como funcionarios o apoyadores incondicionales de la estructura estatal. El MAS (Movimiento al socialismo) agrupa a un montòn de gente de diferentes lineas, desde neoliberales hasta troskistas. Por eso tiene una actitud zigzagueante. Nosotros seguimos defendiendo la voz autonoma de los trabajadores, la gente comùn. Pero la dificultad justamente es que los movimientos sociales han perdido en gran parte su voz y su accionar frente a ese aparato estatal.
La pelea de fondo
-Sin embargo la imagen publica que aparece es la del gobierno enfrentando a sectores de la derecha que parecen representar una amenaza.
Estado, desde la oligarquia, hasta el MAS al que basicamente, y yo dirìa uqe solamente, le interesa lograr la reeleccion de Evo Morales. El punto de poder real me parece que està en la pelea por la tierra, y eso no creo que pueda ser resuelto por una consulta popular. Ese va a hacer un escenario de confrontaciòn màs temprano que tarde. Pero hoy lo que se ve es una agenda de disputa acordada entre el gobierno y la oposicion, que està al margen de lo que la gente querrìa discutir.
-Cual es esa agenda acordada entre gobierno y oposiciòn?
Allà està el Impuesto Directo a los Hidrocarburos IDH- que supone la discusiòn de la renta petrolera producto de los contratos con las multinacionales que Evo Morales hizo a partir de mayo de 2006, que de ninguna manera significaron la nacionalizaciòn sino simplemente arrancar un poco mas de las rentas a las trasnacionales. Lo que està en disputa es como y quien define el destino de esa renta. Se disputan recursos como un botìn y no una verdadera nacionalizaciòn.
-En qué consistirìa?
Los movimientos sociales planteabamos que los impuestos a los hidrocarburos fueran a parar a la reconstituciòn de una empresa pùblica con fuerte control social, y no a una empresa estatal como es ahora, que ha sido cooptada por un partido politico y cuya gestiòn es totalmente cerrada a la poblaciòn. Se planteaba originalmente para establecer una nueva base econòmica para un plan nacional de desarrollo con otra visiòn. No una visiòn capitalista sino una visiòn de las comunidades de productores, sindicatos, capaz de fortalecer a la pequena economia campesina y que pueda garantizar a largo plazo el bienestar de la gente.
-Y que ocurriò con esa idea?
En la practica lo que ha hecho el gobierno es establecer una serie de bonos (se refiere a beneficios para jubilados, la llamada Renta Dignidad) que en la practica significa que esas rentas petroleras se estàn consumiendo hoy sin pensar en el manana, y han entrado en el mecanismo de una campaña electoral. Porque ademos, no hay un control social de lo que se hace, nadie sabe cuales son los ingresos ni las perspectivas. Entonces uno se encuentra en una pelea por esa renta donde la derecha quiere utilizarla de una manera conica y corupta, y por otro lado el gobierno la usa para campa?as electorales.
Constituciòn = reelecciòn?
Para Olivera existe otro elemento de negociaciòn entre el gobierno y la derecha:
El gobierno ha propuesto a la oligarquìa compatibilizar la nueva constituciòn con sus reclamos de autonomia, y para nosotros le està abriendo las puertas a la derecha para que introduzca sus reformas a partir de sus intereses, mientras el gobierno se niega a abrir su constituciòn a la izquierda, para definir temas elementales como la construcciòn de una institucionalidad que permita la fiscalizaciòn, la participaciòn y la decisiòn de la gente en la cosa pùblica.
-Pero el gobierno reivindica justamente ese elemento de mayor participaciàn en la nueva Constituciòn que debe refrendarse.
No, eso es un aspecto totalmente desterrado. Vea usted, mucha gente no habla por temor a los insultos y agresiones del gobierno a cualquier voz critica, el calificativo peyorativo, pero de todos modos creo, aunque me resulte duro decirlo, que esta Constituciòn busca lisa y llanamente la reelecciòn de Evo Morales para que siga gobernando sin transformar absolutamente nada, sin que haya un cambio verdadero en la vida de la gente.
-Ningùn cambio?
Creo que estàn aplicando una linea reformista, eso no serìa malo, pero no se trata de hablar de capitalismo y de imperialismo, cuando en la practica el plan del gobierno presenta polìticas capitalistas y la entrega de nuestros recursos naturales a las empresas petroleras y mineras. Siguen dando en concesiòn grandes minas para la exportaciòn de minerales, mientras expulsan comunidades y contaminan las aguas. En esas situaciones se ve muy disimuladamente que lo que no pudo hacer los gobiernos de derecha, lo hace Evo Morales, y lo estan haciendo gobiernos de los llamados progresistas en nuestra America. Brasil es un ejemplo, con sus represas en el noroeste boliviano, que vana influenciar seriamente en la vida cotidiana de muchìsimas comunidades y van a crear un absoluto cambio ambiental. Yo creo que el imperialismo està muy contento con lo que estos gobiernos estàn haciendo, que es lo que no habìan podido hacer los gobiernos de derecha por la fuerte resistencia social. Y a la vez, como se plantea una polarizaciòn, eso no deja espacio para reflexionar y debatir seriamente con el gobierno de cara a estas cosas. Parecerìa que hay que tomar partido, y callarse.
-Y si uno acepta la logica de la polarizaciòn solo queda por decir: mejor el gobierno que la derecha.
Claro, pero si usted le pregunta a las personas de los barrios populares, a los obreros, clase media, desocupados, muchos le van a decir que desde que està este gobierno nada cambiò, o que las cosas estèn peor. Se dice que el gobierno trabaja solamente para un sector de la poblaciòn, los hermanos indigenas, relegados durante siglos. Eso seria muy justo, pero el pueblo abarca tambièn a muchos otros sectores. Sin embargo se hace una politica tradicional, de armar un escenario de supuesto dialogo, solo con expertos y caciques que negocian en nombre de nosotros las politicas que les convienen a ellos, sin solucionar los problemas de la gente. Esto va generando un clima de tristeza y frustracion frente a un gobierno completamente sordo, que solo acepta la subordinaciòn de los movimientos. Y a los que no nos subordinamos, nos dicen proimperialistas, vendidos o derechistas. Escuchar eso de un hermano, de un gobierno que nosotros hemos colocado, es sumamente doloroso.
Los ignorados
Olivera recuerda que él mismo, el aymara Felipe Quispe y los cocaleros Evo Morales y Dionisio Nunez eran calificados como los Cuatro Jinetes del Apocalipsis por las empresas periodisticas, la derecha y los politicos tradicionales. Cuando nos decìan eso, nos sentìamos bien, porque sabìamos que nos tenìan miedo. Pero cuando un gobierno como este habla asì, para nosotros es pesimo. Es un hermano el que te insulta. Por eso plantea: Hace 30 anos que estoy metido en estas luchas como dirigente obrero, como obrero del gas, como portavoz de movimientos sociales importantes pero le confieso que nunca he visto las grandes dificultades que en estos momentos tenemos los movimientos que hemos venido luchando toda la vida, por la situaciòn de confusiòn y por como nos sentimos excluidos, ignorados, olvidados y hasta despreciados.
Una actitud que parece decepcionarlo especialmente es la del vicepresidente Alvaro Garcìa Linera: en Cochabamba hemos tenido que salir a pelear por la perdida de empleos. Tomamos una serie de acciones concreta, paros, movilizaciones, contra empresas que despiden gente pero a la vez tienen relaciones comerciales con el Estado. Ese individuo (Garcìa Linera) dijo que estabamos financiados por la derecha. Como si no nos conociera, como si no supiera la justicia de los reclamos. El hizo su trinchera, como Evo Morales, aquì, entre los fabriles, luego de salir de la carcel. Los obreros fabriles lo acogieron de manera muy generosa y se nutriò de gran cantidad de saberes y opiniones. Eso le posibilitò ampliar su visiòn del paìs. Se involucrò en la guerra del Agua y los obreros creìmos que era parte de nuestra familia. Tal vez èl reacciona porque no nos dejamos tentar con canonazos de dinero ni cargos en el gobierno. Pero estos funcionarios llenos de soberbia, compartieron nuestras angustias y nuestros suenos?
Embriones de futuro
Hay cambios y mutaciones, considera Olivera, que tienen sus propios simbolos de mercado. Nosotros no hemos cambiado nuestras ideas. Ni siquiera nuestros telèfonos celulares. Ellos cambiaron hasta eso.
-Como define a la derecha que se enfrenta al gobierno?
Es una oligarquìa que miente, subsidiaria de las trasnacionales petroleras fundamentalmente, sumada a su ligazòn con mafias colombianas. Son sectores que ya todos conocemos, frente a los cuales el gobierno se muestra pasivo, sin intenciones de proteger a la gente. La propia representante presidencial en Pando, cuando fue la masacre (18 campesinos asesinados el 11 de septiembre) dijo llorando que el gobierno los habìa abandonado. Yo siento que a algunas gentes del gobierno no les interesa en absoluto la vida de los pobres. Se dedican a sus dialogos y negociaciones, a preservar sus propios puestos de funcionarios y su propio poder.
-La suya parece la descripciòn de una situaciòn sin salida.
No, estamos en un momento de confusiòn par el pueblo, pero mas que una dificultad hay que entenderlo como un desafìo. No perdemos los suenos y las esperanzas de que todo va comprendiendose y finalmente todos nos daremos cuenta de como son las cosas. El gran error serìa quedar invisibles, aceptar ese silencio. Por eso hay que pelear para que quienes han luchado por este proceso puedan tener una voz que les permita expresarse. Y se empiezan a notar las movilizaciones de campesinos que estàn recuperando su capacidad de indignaciòn frente a lo que pasò por ejemplo en Pando, o en Santa Cruz donde hubo ataques de la derecha. Y la gente se moviliza ya sin depender del gobierno, lo hace como una recuperaciòn autonoma de su propia capacidad de acciòn. Eso nos da mucha esperanza, es muy alentador. El gobierno obviamente tratarà de aprovechar todo para sacar su propia tajada. Pero que la gente està recuperando su posibilidad de pensar y expresarse, a uno le devuelve el aliento.