Brasil: Quilombolas de Lapinha, en Minas Gerais, ocupan hacienda inactiva
En la madrugada del último día 3, 72 familias del Quilombo de la Lapinha, municipio de Matias Cardoso, en el Norte de Minas Gerais, junto con otros hermanos quilombolas de la comunidad Brejo dos Crioulos, en el municipio de São João da Ponte, ocuparon un área inactiva de aproximadamente 500 hectáreas en la Hacienda Lagoa da Lapinha
La tierra está ubicada en el municipio de Matias Cardoso, en las márgenes del Río São Francisco y actualmente no desempeña ninguna función, está abandonada. Según Zilah de Matos, agente pastoral de la Comisión Pastoral de la Tierra (CPT) del Valle del São Francisco existen tres motivos principales para que las familias consigan mantenerse legalmente en la tierra. “En primer lugar, la propiedad está dentro de un territorio tradicionalmente quilombola, el espacio tampoco está cumpliendo ningún papel social y, finalmente, fueron cometidos varios delitos ambientales en el lugar”, esclarece.
Inmediatamente después de la ocupación, una persona se presentó como representante del dueño de la tierra, pero hasta el momento todavía no probó legalmente la posesión. También la CPT, después de una amplia investigación, no consiguió ubicar en la Alcaldía o en los registros de propiedad locales la existencia de algún documento o registro que pruebe quien es el dueño legal de la Hacienda Lagoa da Lapinha.
En la década del 70, las comunidades tradicionales quilombolas y campesinos de zonas bajas de esa región fueron expropiadas, pasando a vivir en pequeñas áreas en las islas o en tierra firme, en las márgenes del Río São Francisco. Con la creación del Proyecto Jaíba, las comunidades tradicionales que vivían allí quedaron con un espacio todavía más limitado. Esto ocurrió porque debido a los grandes impactos ambientales del Proyecto, el Gobierno del Estado creó parques estaduales, reservas biológicas y otras formas de unidad de conservación como forma de compensación ambiental.
El año 2006, buscando un espacio para vivir y trabajar dignamente, varias familias quilombolas del Quilombo de la Lapinha (Matias Cardoso y Manga) ocuparon la Hacienda Casa Grande/Calindó, de propiedad de la Empresa Fazendas Reunidas del Valle del São Francisco - FAREVASF. Para conseguir retomar la tierra los propietarios presentaron en la justicia una acción de reintegro de posesión, sin embargo, en audiencia de Justificación, las familias consiguieron hacer un acuerdo y tener la posesión de un área de 22 hectáreas. La decisión tramitó por tres años y recién en julio de 2009 el Juez Especial Agrario de Minas Gerais dictó sentencia juzgando improcedente la acción.
Algunas familias consiguieron instalarse en la tierra, pero de acuerdo con Isla, el espacio es insuficiente para que todos puedan vivir y trabajar. “Las 22 hectáreas sólo alcanzaron para montar las carpas-viviendas. Son muchas familias, además, todas son numerosas. Algunas familias quilombolas tienen de 8 a 10 personas, otras tienen 12. También existe el hecho de que ellos viven esencialmente de la producción agrícola y de la pesca. El espacio no está posibilitando la vivienda y la actividad productiva al mismo tiempo”, dice.
Aún hoy, las comunidades viven un intenso y largo proceso de preconcepto y marginación, ya que es necesario invadir las tierras que tradicionalmente eran suyas para poder encontrar una vivienda digna. Buscando agilizar, ante el Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria - Incra, las acciones de regularización y los laudos antropológicos que prueban el origen de la tierra, las familias quilombolas están movilizando y promoviendo constantes acciones políticas.
Quilombo: lugar donde se juntaban esclavos negros que huían de la esclavitud en la época colonial, y otras personas fuera del sistema.
Quilombola: comunidad de remanentes de esclavos negros libertos. También se llaman así sus habitantes.