Autor: “Claudia Cuellar Suárez y Huáscar Salazar Lohman”
Bolivia: Proyecto hidroeléctrico Rositas. El despojo detrás de un “sueño”. Ejemplo de la ocupación capitalista de los territorios
La producción de sentidos críticos y la capacidad de generar organización de resistencia y de lucha en este nuevo contexto dominante, está surgiendo en comunidades como contraposición a las consecuencias del modelo de despojo promovido por el gobierno. Las comunidades en resistencia a los proyectos de Rositas, Chepete-Bala, Tariquia, etc. –y principalmente las mujeres– son quienes están poniendo el cuerpo y sus esfuerzos frente a la agresión del Estado. La ficción de un gobierno produciendo “masa crítica” —que quizá lo máximo que ha logrado son los denominados “guerreros digitales”(15)— acompañado del apoyo internacional de grupos de intelectuales que alimentan esa ficción, está siendo rebasada por la crudeza de una realidad, en la que los sujetos en lucha nos están demostrando que no solo se trata de criticar al gobierno –actitud asumida abiertamente por la derecha tradicional del país–, sino de organizar los sentidos críticos en torno a horizontes emancipadores que van mucho más allá de la mera idea de “demandar” al Estado o de “cambiar de gobierno”, se trata de producir capacidad organizativa y de decisión más allá del Estado y de sus formas políticas monopolizadoras.
Nosotros agregamos que esa es la gran falla de muchas luchas continentales antimineras, muchas batallas ecologistas y de defensa del medio ambiente, así como las luchas campesinas lideradas por el bloque de partidos llamado Vía Campesina, más preocupados de la toma del poder que de los derechos sociales y de la tierra.