Autor: “Revista Ecologista”
Cortaron la luz y el barrio completo optó por energía alternativa
Sábado, 3 de junio. Más de 10.000 personas avanzan bajo la lluvia en una de las manifestaciones más concurridas que Vitoria-Gazteiz recuerda. Entre las naves industriales de Uritiasolo y los campos que rodean la ciudad asoma una antigua barriada fruto del desarrollismo franquista de finales de los 50 y construida para alojar a los miles de jornaleros que emigraron a la capital vasca.
Tras más de cuatro horas la manifestación entra en Errekaleor (río seco en euskera). Diez personas encaramadas a los tejados encienden, una a una, bengalas rojas. “Bienvenidas y gracias” parecen decir… El silencio de la manifestación se rompe al grito de ”Errekaleor, bizirik!” (Errekaleor, vivo, vive).
Se trata de la experiencia de autogestión más grande del Estado español,