En sorprendente giro político, ideológico y táctico, Farc proponen autonomía y autogobierno campesino y comunitario en la mesa de negociaciones con gobierno colombiano, que rechaza nuevas propuestas

¿Presión de las comunidades o jugada propagandística?



FARC proponen autogobierno campesino

Domingo, 10 de Febrero de 2013

LA HABANA, EFE

Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) pidieron ayer el autogobierno de los territorios campesinos como parte de un nuevo grupo de propuestas sobre el tema agrario que presentarán al Gobierno colombiano, en la mesa de los diálogos de paz en La Habana.

El número dos de las FARC, Luciano Marín Arango, alias “Iván Márquez, afirmó que esos diez puntos “para el reconocimiento político y de todos los derechos del campesino”, se suman a las sugerencias que ha estado aportando la guerrilla para “dinamizar” el proceso y “buscar fórmulas” de aproximación.

En el nuevo documento, las FARC proponen que los territorios campesinos tengan “autonomía política, administrativa, económica, social, ambiental y cultural, y en la administración de justicia a través de los mecanismos de la justicia comunitaria”.
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Gobierno no añadirá más temas a la agenda pactada con las Farc: De la Calle
Colprensa | Bogotá | Publicado el 10 de febrero de 2013

El jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, aseguró en declaraciones desde la Habana, Cuba, que el Gobierno y la guerrilla de las Farc solo discutirán los temas planteados en la agenda de cinco puntos acordada desde el principio de la segunda fase de negociaciones.

“A lo largo de estos días, las Farc han hecho públicas varias propuestas sobre diversos temas del acontecer nacional. Al respecto quiero decir que una cosa es lo que las Farc dicen en público, como parte de su plataforma que tendrán que defender en democracia si se reintegran a la vida civil, y otra cosa es lo que se habla en la mesa. Nos acogemos estrictamente a la agenda pactada en el acuerdo general y no vamos a abrir la agenda a temas nuevos, planteados por las Farc en su plataforma”, sentenció De la Calle.

El jefe negociador del Gobierno agregó que las propuestas que ha hecho públicamente la guerrilla de las Farc frente al tema minero-energético y a la idea de frenar la construcción de mega proyectos para la generación de energía eléctrica “no forman parte de las discusiones de la mesa”.

Y recalcó que las discusiones “no se crearon para hablar de lo divino y lo humano”. “Hay un derrotero claro de los temas motivo de estos diálogos y no vamos a desviarnos. Esperamos que las Farc cumplan lo pactado en el acuerdo general, que es el marco de referencia para las negociaciones”.

El jefe negociador del Gobierno señaló que mientras se desarrollan las negociaciones “ni un solo día el Gobierno ha dejado de cumplir su responsabilidad de perseguir el crimen y la ilegalidad en todo el territorio nacional, el Gobierno no ha dejado de cumplir su deber con la seguridad y el orden público”.

Así mismo, dijo que espera que los subversivos liberen prontamente a los policías y soldados secuestrados “y que lo hagan mediante un procedimiento ágil: rechazamos vehementemente el secuestro”.

En ese sentido advirtió que “cada acto como estos atenta directamente contra el proceso de paz. Con razón los colombianos se indignan cuando hay secuestros y ocurren muertes y ataques”.

Cabe anotar que el negociador recalcó que uno de los puntos centrales de la agenda de negociación es el de las víctimas. “El Gobierno lo toma muy en serio y no concebimos un acuerdo para la terminación del conflicto sin que la guerrilla le ponga la cara a las víctimas. Llegado el momento, propondremos formas para que ello ocurra”.

Frente al ritmo de la negociación aseguró que este ha mejorado pero sostuvo que hay que mantenerlo. “Mientras nos mantengamos discutiendo la agenda pactada, las negociaciones pueden avanzar a un buen ritmo, al necesario para concretar los acuerdos y ponerle fin al conflicto”, dijo.

El discurso del jefe negociador se dio al terminar un nuevo ciclo de conversaciones entre el Gobierno y la guerrilla de las Farc. Las dos delegaciones se volverán a sentar en la mesa de negociación el próximo 18 de febrero.

Mientras tanto, De La Calle aseguró que los negociadores del Gobierno continuarán desarrollando diálogos con los diversos sectores de la sociedad colombiana entre los que están los gremios, el Presidente de la República y los ministros.

“Para continuar concretando nuestros puntos de vista tenemos presente que nada está acordado en la mesa hasta que todo lo esté”, concluyó el jefe negociador de la comitiva del Gobierno.
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TeleSur
Latinoamérica
Domingo 10 de Febrero de 2013, 03:43 pm
FARC: estamos en un proceso de paz y no de sometimiento

En rueda de prensa, una vez concluido el cuarto ciclo de Diálogos de Paz que se desarrolla en Cuba, Iván Márquez subrayó que se trata de un proceso de paz y no de sometimiento, así como insistió en la importancia de dar acceso a la tierra al mayor número de colombianos.
El jefe de la delegación de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Iván Márquez, subrayó este domingo que las conversaciones son “un proceso de paz y no de sometimiento”.

“Este es un proceso de paz no de sometimiento, habrá que preguntarle al pueblo si quiere que se arroje al olvido el tema del saqueo minero energético pretendido por la voraz política neoliberal, que atenta contra la soberanía y al sostenibilidad ambiental”, explicó Márquez.

Destacó que han avanzado y coincidido en el “propósito de dar acceso progresivo a la tierra a la mayor parte de colombianos que no la posean o la posean de manera insuficiente”.

Uno de los mayores aspectos que se deben discutir en los diálogos es el ‘’dar acceso a la tierra al mayor número de colombianos que no la poseen'’ dijo y Márquez y añadió que en el grupo armado ‘’estamos dentro de la agenda desarrollándola y nutriéndola'’.

Agradeció las propuestas que “con su sabiduría las organizaciones sociales y políticas nos han hecho llegar”.

Asimismo subrayó que si el gobierno persiste en sus proyectos minero - energéticos ,deberá prescindir de la idea de desarrollarlos sobre el territorio que el país necesita con urgencia, para garantizar su soberanía alimentaria”.

Ruben Zamora, también integrante de la delegación de FARC, pidió al gobierno de Colombia la declaración de un estado de emergencia sanitaria y humanitaria para las cárceles del país, así como la liberación inmediata de los prisioneros de guerra con enfermedades terminales.

El vocero de las FARC denunció la violación flagrante a los derechos humanos “que comete el gobierno de Colombia sin que se le vea intención alguna de rectificación”.

“Alrededor 9 mil 500 prisioneros políticos viven el calvario del sistema penitenciario colombiano, que en realidad se ha convertido en un laberinto de tortura vejaciones y muertes para los reclusos de cualquier índole”, señaló Téllez.

Agregó que “el 90 por ciento de los prisioneros políticos son actores civiles encarcelados con la intención de desmantelar las organizaciones populares y aplastar la inconformidad popular, frente a la injusticia social que existe en Colombia”.

“El panorama carcelario es de hacinamiento, fetidez, suicidio, asesinatos y enfermedades (…) Prisioneros ciegos, lisiados, paralíticos o muertos a causa de la desatención médica”, explicó el delegado de las FARC.

Más temprano, el jefe de la delegación del Gobierno colombiano en los Diálogos de Paz, Humberto de la Calle, enfatizó que el Ejecutivo no abrirá la agenda de conversaciones a temas nuevos planteados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) desde su plataforma política.

La cuarta ronda de negociaciones entre la guerrilla y el Gobierno de Colombia llegó a su fin este domingo y se espera que reanuden las conversaciones el próximo 18 de febrero en La Habana.

El pasado 19 de noviembre el Gobierno colombiano y las FARC establecieron una mesa de negociaciones para alcanzar el fin del conflicto armado con el tema de la política del desarrollo agrario integral entre las prioridades de discusión, para construir una “paz estable y duradera”.

Otros puntos de la agenda establecida incluyen temas como las garantías para la participación ciudadana, el fin del conflicto armado y la solución al problema de las drogas ilícitas.