¿Se dieron cuenta ahora? Gobierno nicaragüense investiga notarios y abogados por títulos de propiedad en el pulmón de Centroamérica, la reserva de la biosfera Bosawas, que tiene el 14% del territorio del país y representa el 10% de la biodiversidad mundial.

La complicidad del gobierno está fuera de toda duda. Comunidades indígenas salen a defender el entorno.



Nicaragua investiga a notarios por escriturar a particulares parte de reserva
Fuente: EFE | 2013-05-13

Managua, 13 may (EFE).- Al menos 13 notarios nicaragüenses son investigados por supuestamente escriturar ilegalmente a nombre de particulares tierras de la reserva de la biosfera Bosawas, considerada un “pulmón” de Centroamérica y que sufre un proceso acelerado de degradación, informaron hoy las autoridades.

“Se está investigando a 13 notarios” en los municipios de Siuna y Puerto Cabezas, en la Región Autónoma Atlántico Norte (RAAN), y en los municipios norteños de Jinotega y Matagalpa, dijo a periodistas el vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Marvin Aguilar.

Aguilar explicó que los abogados bajo investigación aparentemente se dedican a inscribir “propiedades comunales a nombre de particulares” en Bosawas.

El magistrado mencionó que la Corte Suprema está inspeccionando “escritura por escritura, los protocolos de los abogados que están denunciados”.

Por ley las tierras indígenas de Nicaragua son comunales, no se pueden donar, vender, ni comprar, y Bosawas es parte de la comunidad aborigen mayagna.

La reserva forestal Bosawas, la mayor de Centroamérica, concentra el 14 % del territorio nicaragüense, al menos un 10 % de la biodiversidad mundial y es uno de los mejores ejemplos de bosque tropical húmedo y de bosques de nubes de la región.

Sin embargo, ha sido invadida por colonos que depredan los bosques y han generado un conflicto con los aborígenes que en abril pasado se cobró la vida de un indígena mayagna, etnia que habita desde tiempos ancestrales esas tierras.

Según datos oficiales, desde el 2010 Bosawas pierde un promedio de 42.676 hectáreas por año. Los mayagnas calculan que en diez años la reserva no existirá.

Por su lado, la fiscal adjunta de Nicaragua, Ana Julia Guido, dijo a periodistas que “se ha identificado a un poco más de diez abogados que están en el lugar y probablemente (se encuentren) otros en diferentes sitios del país”.

El Gobierno de Nicaragua anunció recientemente que ejecutará un plan para “sanear” Bosawas, es decir, para expulsar a los colonos de esa reserva.

En tanto, la directora de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Irina Bokova, se comprometió la semana pasada a ayudar a proteger la reserva de Bosawas, tras advertir que las reservas de biosfera de Nicaragua “son los pulmones de Mesoamérica”.

La Unesco incluyó a Bosawas en su lista de reservas de la biosfera en 1997.