Economía peruana a la baja. Actores sociales han sido fundamentales para el freno a las inversiones extractivas

Humala en la encrucijada corta presupuestos de las regiones que se le han enfrentado



15 de agosto de 2013
Las vacas flacas

La confirmación de un nuevo momento en la economía

Editorial La República

El ministro de Economía y Finanzas ha formalizado el ingreso del país a una etapa distinta en materia económica. El titular del MEF ha señalado que en el futuro cercano tendremos volatilidad, inestabilidad y vientos que soplan en menor intensidad, es decir, vacas menos gordas o más flacas.

El nuevo viento se advierte hace meses. Las exportaciones peruanas cayeron el primer y segundo semestre de este año con tasas de -14% y -10,4% y se espera una caída de -10% anual del 2013 y -15% en las exportaciones tradicionales. Son caídas similares a las que experimentan otras economías de la región que crecieron en los últimos años a tasas parecidas a la peruana, como Brasil y Colombia. Las economías emergentes sienten de modo creciente la desaceleración de las tres grandes economías del mundo, la Unión Europea, EE.UU. y China. El comercio mundial solo ha crecido 1,1% en el primer trimestre del año.

Los datos para los que el país se prepara son a la baja. Es obvio que el Perú no crecerá este año a la tasa de 6,2% proyectada inicialmente. También es cierto que otros valores de la economía se reducirán seriamente, como la inversión privada, aunque algunos comportamientos claves estarán bajo control como el índice de precios y el tipo de cambio. En cualquier caso, el clima no es positivo y de ello se hizo eco ayer el centro brasileño de estudios económicos Getulio Vargas que dio cuenta que el Perú retrocedió al 3er. lugar como el país con mejor clima para los negocios en América Latina.

Si no hacen falta más indicadores que confirmen esta situación, en cambio se adolece de evidencias sobre la preparación del país para este nuevo ciclo. El desorden que se aprecia alrededor de la caída de los ingresos por el canon indica que si la distribución de los recursos en la época de las vacas gordas fue desorganizada, la administración de la escasez tendrá un signo similar. Sucede lo mismo con las demandas para la reactivación de la inversión, que está derivando en una campaña para la rebaja general de impuestos o en la demanda de destrabar proyectos que polarizan a la comunidad con las empresas.

Varios elementos de política deberían estar a la base de una actitud nacional frente a la desaceleración aunque hay dos centrales. El primero es la defensa del crecimiento, un proceso que se constituye en el centro del auge económico de los últimos 12 años y que ha permitido una distribución de la renta nacional y la reducción de la pobreza. Esta defensa conduce a acelerar los cambios en la composición del crecimiento, diversificando las exportaciones para evitar una dependencia mayor de los precios internacionales de los metales; esta agenda, uno de cuyos componentes es la industrialización, debe ser expuesta al país.

Un segundo elemento de política es el reforzamiento de la inversión pública y privada. Ello exige decisión para garantizar la viabilidad de proyectos de envergadura, como la modernización de la Refinería de Talara o el Gasoducto Surandino y otros de impacto regional.

También implica audacia en el Estado para agilizar los emprendimientos privados que no significan conflictos sociales y acelerar las concesiones y las asociaciones público-privadas, entre otras. En esa misma línea se encuentra la advertencia para evitar, sin caer en el populismo, las prédicas reduccionistas del gasto que ya se dejan escuchar como respuesta a las demandas laborales del sector público, la repetición del esquema donde los que pierden son siempre los mismos.

El país requiere de unidad y consenso en este nuevo momento; esto solo se logrará con un activo liderazgo público y una gestión eficaz de los intereses públicos y privados, combatiendo todo pesimismo, y dialogando y decidiendo de cara al país.
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Ministro de Economía y Finanzas.
Luis Miguel Castilla sobre crisis: Gobierno va a reaccionar
Jueves, 15 de agosto de 2013 | 12:08 pm

Aseguró que se tiene previsto ejecutar medidas que ayudarán a confrontar el difícil contexto económico internacional que se manifestó en Perú con la reducción del canon minero.

Luego de reconocer que se viene una época de ‘vacas flacas’ para el país, el ministro de Economía y Finanzas, Luis Miguel Castilla, sostuvo que ello no afectará a las obras que están proyectadas o en construcción.

El ministro de Estado afirmó que el Poder Ejecutivo seguirá apoyando a los gobiernos regionales para que ninguna obra quede inconclusa, a consecuencia de la caída del canon minero generado por la crisis económica internacional.

“El Gobierno va a reaccionar, estamos viendo unas normas para justamente apoyar a aquellos distritos que son pobres que reciben canon muy pequeño. Para los otros distritos que sí tienen recursos, vamos a otorgarle el acompañamiento técnico”, señaló en TV Perú.

Castilla admitió que la reducción del monto de dinero obtenido por el canon minero significa todo un reto para el Ministerio de Economía, pero se tiene previsto una serie de mecanismos que le hagan frente a este difícil contexto.

Comentó que se continuará dialogando con las autoridades regionales a fin de concretar los proyectos, mediante un acompañamiento técnico de parte del Gobierno, a través de su ministerio.

En otro momento, señaló que las regiones de Cusco, Arequipa, Puno, Ica y Pasco han sido las más afectadas por la menor repartición del canon minero por la caída del precio de los metales y diversos motivos.
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Humala aclara que será complicado reponer recortes del canon a las regiones
Jueves, 15 de agosto de 2013 | 11:06 am

Efectos de la crisis. En su visita a Arequipa, mandatario señaló que la reducción de esta partida es consecuencia de la crisis internacional. Pidió que se gasten los dineros sobrantes.

La respuesta del presidente Ollanta Humala fue clara. El gobierno no repondrá el canon minero a las regiones, tal como lo solicitaron los presidentes regionales y alcaldes del país.

En su visita a Arequipa y en breves declaraciones a la prensa, el mandatario aclaró que la reducción de esta partida no fue provocada por el gobierno. Influyó el contexto internacional. La caída del precio de los metales generó que las empresas mineras tengan menos utilidades y caiga el Impuesto a la Renta, cuyo 50% se transfiere como canon.

Aunque también algunos analistas señalan que la reducción también se produjo por la nueva estructura tributaria que fijó el gobierno. El nuevo gravamen minero afectó el canon.

Durante la inauguración de una planta de durmientes, en su discurso recalcó que el mundo vive una crisis y los efectos de ésta ya llegaron al Perú, y a eso se atribuye el bajón del canon.

¿Cómo cubrir el hueco en los presupuestos de los gobiernos subnacionales? El mandatario plantea que se utilicen los saldos de balance, los dineros que no pudieron usar las regiones en años anteriores. Según el Ministerio de Economía, hay más de S/. 4,400 millones que tienen municipios y gobiernos locales. Humala recuerda que Arequipa tiene más de S/. 500 millones que aún no gastó.

No descartó la ayuda del gobierno para que los proyectos no se paralicen. Solo precisó que funcionarios del MEF harán un diagnóstico de la cartera de proyectos, región por región, y se priorizará. Dijo que si el Ejecutivo ayuda, lo hará con “responsabilidad”, porque hay otros departamentos con más necesidades.

“Hay doce regiones sin canon que preguntan ¿quién tiene corona? Aquí nadie tiene corona”, señaló.

VISITÓ AREQUIPA

El presidente Ollanta Humala Tasso pisó suelo arequipeño a las 8.45 de la mañana. Estuvo acompañado de los ministros de Vivienda, René Cornejo, y de Transportes, Carlos Paredes. Participó del izamiento de la bandera y de la misa Tedeum, más no de la sesión solemne.

El presidente contó con un despliegue de seguridad que imposibilitó acercarse a él. Después del acto religioso, el mandatario se quitó la banda y empezó a saludar a algunos militantes. Recibió algunos chiflidos de ciudadanos que le exigían que cumpla sus promesas electorales.

El Presidente recorrió la primera cuadra de la calle San Francisco a pie. Ello generó problemas al personal de seguridad, quienes empezaron a empujar a todas las personas que trataban de acercarse al mandatario.