Venezuela. Notas al margen 2: Los juegos de hambre que concluyen la conspiración

La agenda sobre las dos cuencas más ricas geológicamente hablando (la cuenca del Orinoco y del Amazonas) del planeta, es dominarlas humanamente hablando para así explotar su maravillosa biodiversidad. El empeño histórico ha sido tal en este sentido, que poco a poco, si hay una agenda revolucionaria hoy en día sobre esta vasta región del mundo contrapuesta a esta macabra intención colonial, es la de salvar y emancipar esa inmensa riqueza humana y natural.



Notas al margen 2: Los juegos de hambre que concluyen la conspiración
Por: Roland Denis | Viernes, 24/03/2017
Aporrea
https://www.aporrea.org/actualidad/a243180.html

Ver Notas al margen 1: Los juegos de la guerra conspirativa interna en http://clajadep.lahaine.org/?p=18143

Estos días la GN sacó violentamente, quemándoles sus casas al igual que un centenar de hectáreas sembradas de arroz en la Finca Las Mercedes en Barinas, a decenas de familias campesinas quienes habían legalizado su situación como ocupantes de tierra y comenzado su obra productiva. De la misma manera sobre el sur del Orinoco hacia la zona de San Fernando de Atabapo un contingente militar bloquea toda entrada hacia la zona donde viene efectuándose una minería ilegal intensiva de oro y coltán, cuidada por los mismos militares. En otras palabras, es imposible emprender una obra emancipatoria en nuestros países sin transformar por completo o acabar previamente con las fuerzas de poder –en este caso militares, totalmente y deliberadamente corrompidos– que operan como estamentos de respaldo al orden neocolonial destinado a bloquear las fuerzas productivas propias o actuar directamente como agentes del mismo saqueo.

El problema, de acuerdo con Mariátegui, esta en la propiedad de tierra y tuvo plena razón, pero no es solamente esto, es que estamos metidos en un orden civilizatorio (la “modernidad capitalista” y sus dioses metafísicos enmascarados, como dirá el líder encarcelado de las fuerzas de liberación kurdas en su libro sobre los Orígenes de la Civilización) cuya agenda sobre las dos cuencas más ricas geológicamente hablando (la cuenca del Orinoco y del Amazonas) del planeta, es dominarlas humanamente hablando para así explotar su maravillosa biodiversidad. El empeño histórico ha sido tal en este sentido, que poco a poco, si hay una agenda revolucionaria hoy en día sobre esta vasta región del mundo contrapuesta a esta macabra intención colonial, es la de salvar y emancipar esa inmensa riqueza humana y natural.

Después de acometer la obra de saboteo mayor a todos los componentes esenciales del horizonte transformador planteado en este país hacia los años 2000, los años 2010 en adelante, han servido en un inicio para ordenar definitivamente a los agentes de gobierno, herederos del “chavismo con Chávez”, que terminarán de crear las condiciones para el paso al juego esencial. Pasando, una vez con el “coroto en las manos” a las embestidas, en función de garantizar, como decíamos en el artículo anterior (Notas al margen 1: Los juegos de la guerra conspirativa interna), el control pleno de las realidades humanas (noosfera) como de esa “anomalía natural” riquísima que se haya sobre nuestra tierra y su subsuelo (biosfera). Plan que tanto la izquierda como la derecha han criticado por “rentístico” pero en realidad muy poco tiene que ver con rentismo o no, aunque podríamos decir que hay mucha mentalidad e interés rentístico en ello. De lo que se trata, como en las peleas de defensa personal del Tai-Chi, es de utilizar con absoluta “suavidad y rapidez” toda la fuerza del contrario (la revolución popular bolivariana en este caso) para derrotarlo, destruirlo y terminar de concretar la obra imperial-apropiativa mayor.

Primera jugada: La corrupción de todxs los principales personajes y espacios de mando del poder constituido como premisa fundamental conspirativa…

Todo un tejido de personajes se ha movido alrededor de esto, por lo general señores y señoras de alto gobierno, de alta función de partido militar y administrativamente y, asimismo, personajes que, dentro y fuera de las oficinas de gobierno, anónimos y hasta clandestinos, son parte de un juego de agencias e intereses que, como en la película de los Juegos del hambre, hacen el papel de jefecillos de distrito que conocen la realidad inmediata que los maneja, y dirigen en sus zonas, pero que no tienen ni idea de los intereses mayores en que están metidos. Por supuesto que nada funcionaría sin ellos, sus bolcillos están llenos al igual, y asimismo en muchos casos sus “carteras de poder”, que hacen el papel de correajes sin pausa para el cumplimiento de la acometida estratégica, que por lo general no entienden o, sencillamente, si toman conciencia de donde están metidos, nada les importa colaborar, ya que sus intereses están totalmente individualizados, sus unidades de trabajo son tribales y hasta mafiosas.

Pero hasta cierto punto demasiado tiempo se ha perdido tratando de saber quién es el monstruo mayor, quien es el jefe que está detrás de ellos. Pidiendo auditorías, limpiezas, buena voluntad de los mandatarios mayores en esta historia hasta donde ella ha llegado: Chávez y Nicolás. No es mi interés en este caso repetir nombres de personajes que todos conocemos y he nombrado, aunque tampoco tengo el “informe final de inteligencia” (¡ahora parece que lo tiene Nicolás y lo va a echar al público!) de donde se podrían desentrañar muchas de estas redes que se han hecho cada vez más obvias y de una evidencia tal, que como fotografías que se revelan en el uso de los ácidos dentro de los “cuartos oscuros” sobre los negativos, día tras día el mismo juego imperial muestra al mundo los revelados que les conviene, cumpliendo simplemente su indoblegable papel de gendarme global.

Segunda jugada: el paso a la “devaluación total de los valores y la vida material colectiva”; los “juegos del hambre”…

Lo cierto es que más allá de la corrupción local, sus zonas, redes y personajes, a lo que nos interesa también tenemos un revelado que empezar a mostrar, aunque solo sea el comienzo de una investigación muy larga. Toda esta cantidad de juegos conspirativos internos sobre todo el propósito revolucionario que mostramos –hasta donde pudimos en la primera parte de este trabajo–, decantan en primer lugar en “los juegos del hambre”. Para llegar hasta donde estamos “y aquí no ha pasado nada”, y de hecho no pasa, nadie es responsable y todo sucede aparentemente porque unos “riquitos” y una página web le hacen la guerra económica “a la revolución” –una explicación cuando menos insolente para una población pobre que deteriora todos los días sus condiciones de vida– era necesario generar ese desastre que comienza desde muy temprano. De lo contrario, como ha pasado en otros contextos revolucionarios, el “brinco hacia atrás” hubiese tenido que hacerse bajo el despotismo puro. Fallando su primer intento en los años 2002 y 2003, a través de los golpes oligárquicos, la estrategia habría de ser su contrario stalinista. Es decir montando un régimen despótico puro “de izquierda”, lo mismo –pero en su extremo opuesto ideológico– al fascismo del 11 de Abril. Pero para eso no podían contar con Chávez, personaje penetrado por los valores libertarios de la vida desde temprano, más allá de sus neuróticos atavismos al poder, además, el ataque desde fuera hubiese sido inclemente y mortal, y aquí no hay “déspotas patriotas y valientes”, ni mucho pueblo que los siga.

Lo cierto es que una vez destrozados tres ámbitos básicos: todos los planes principales de transformación revolucionaria, la autonomía política y de conciencia del grueso del movimiento popular, y preparada una subjetividad colectiva clemente de dioses, mediatizada, identitariamente debilitada, despolitizada y desarmada, el paso a una fragmentación definitiva tanto de nuestro espacio nacional como de la misma colectividad en sus sectores más pobres, era una operación más a mediano plazo posible y sin tanto riesgo.

Por ello desde el año 2013, hecha la tarea destructiva de mediano plazo desde la segunda mitad de los años 2000 hasta la muerte de Chávez, comienza una devaluación incontenible e hiperinflacionaria que devalúa además de la moneda y la fuerza de trabajo, todos los ámbitos de la vida colectiva: su salud, su seguridad, su dignidad, su autoestima. Paralelamente se logra resquebrajar lo que los filósofos posestructuralistas franceses llamarían el espacio liso (arboleda colectiva libre, igualitaria, directa, incluyente) del territorio donde privan los intercambios directos, el desplazamiento abierto, el desarrollo de los entes autogestionarios ligados a un mercado desmonopolizado, la organización popular autogobernante, para dar paso al estriamiento (un orden vertical y autocrático) cada vez mas represivo, monopólico, burocrático, violentado por una infinidad de lacras criminales fusionadas al Estado mafioso. Se fracturó y debilitó por completo el mundo de la noosfera humana.

Tercera jugada: el comienzo de la reentrega territorial; anuncio con orgullo del próximo saqueo…

Preparadas todas las condiciones por más de diez años donde este demonio contrarrevolucionario va tomando lógica, poder, y estrategia propia por dentro de lo que dice llamarse revolución, desde el año pasado 2016, empieza el paso de las entregas finales. Ya decíamos, primero se entregaron desde los años 80 hasta hoy más de 500 mil millones de dólares que flotan felices y privatizados en el espacio financiero mundial (un desfalco histórico total), ahora le toca al suculento bocado de la biosfera, después de cuatro décadas y más de lenguajes, inversiones y manipulaciones patrioteras y soberanistas con ella.

Formalmente empieza utilizando un plan concebido por el movimiento minero de reapropiación territorial, reconstrucción ambiental y multiproducción colectiva de un inmenso arco minero (más de 100 mil Km cuadrados), el cual se retoma hasta nominalmente, se hace demagogia por unas semanas con él y, rápidamente, esto pasa a convertirse en un festín que inaugura la entrega a los grandes capitales mineros internacionales, dejando, desplazando, cuando no matando (bandas paramilitares que nadie ataca) al movimiento indígena y minero. Son centenares los trabajos críticos que se han hecho al respecto por el impacto –hasta emocional– de la actitud entreguista del gobierno y sobretodo de sus agentes internos: militares, ministros, funcionarios, después de tanta palabrería de culto “patriotista” y el tamaño del descarado despojo anunciado y el modo archicorrupto por demás en que se viene implementando. No repitamos todo lo dicho al respecto, en muchos casos estemos de acuerdo con muchos detalles o no, lo cierto es que ya no cabe la menor duda, de que el decreto del “arco minero” ha sido el paso al movimiento conclusivo de estos largos, complejos y horrorosamente destructivos, “juegos de la conspiración”.

Los próximos pasos son más complejos ya que están sostenidos sobre industrias que tienen larga data, obviamente la industria petrolera y petroquímica o anexadas a ellas como es el caso del plan gasífero. De todas maneras, la implosión sobre estas industrias, acometida desde el todo el período de Ramírez que no dejan de rodearlo y chupárselo una cantidad interminable de agentes transnacionales directos o indirectos, pero que en este caso no operan más que como acompañantes de un plan mucho mas elaborado y de tinte “socialista”.

Una de las torpezas de Chávez donde se ve la “mano pelua” de una izquierda mundial totalmente penetrada que se convierte a la conciencia de muchos de ellos, como es el caso de Alí Rodríguez, padre original de esta situación, en verdaderos cabrones de la guerra conspirativa contrarrevolucionaria. Se trata de la sobredimensión destructiva a escalas de “primer brazo industrial, financiero y social del Estado”, sin contraloría interna ni externa y por tanto inmensamente corrupta, con 120 mil trabajadores, que obliga a un sobre endeudamiento de PDVSA y de lo cual todo el enjambre transnacional se aprovecha, ya con la presidencia de Elogio del Pino ha comenzado una apertura autodisolvente de una industria que dejaron sin respiro productivo y financiero, una clase trabajadora especializada igualmente en fuga y comprada por otros emporios petroleros fuera del Venezuela, y sin generación de tecnológica propia.

Las aguas, la industria eléctrica ligada a ellas por medio de los grandes embalses, los suelos ricos, la riqueza maderera, las cuencas de ríos, las industrias areneras, de asfalto, es el orden en que se disponen seguir los procesos apropiativos de la biosfera que no tendrá fin, porque no se trata solo de “industrias”. Todas estas industrias por igual están en situaciones paupérrimas, desesperadas por planes y recursos que ya no tenemos ya que se volaron como parte de la “energía etérea” expulsada por la fuga descomual del desfalco.

Pero las industrias son un medio para el dominio biosférico conjunto, creado una condiciones incluso químicas –alimentarias, medicinales– sobre la noosfera humana (es decir, sobre el funcionamiento natural de nuestros cuerpos, nuestra incidencia inteligente sobre ellos y la naturaleza conjunta), desde donde se van apropiado de ella como un todo. Ver el problema por compartimientos aislados entre industrias que son tomadas por los sabuesos transnacionales únicamente (investigarlas, nombrarlas, ver sus interrelaciones, ha sido importante pero es también una vieja trampa y una debilidad teórica de la izquierda sometida al cientificismo positivista como diría Ocalam, líder revolucionario kurdo).

La lógica de mando del capitalismo actúa hoy como un todo invasivo desde la naturaleza como objeto-mercancía, hasta el cuerpo material e inmaterial –espiritual, imaginario– humano, que poco a poco van entendiéndolo y planificándolo con el fin de convertirlo en parte del proceso delirante de acumulación de subsunción real del trabajo y el mundo en el capital. Se trata de una encrucijada civilizatoria terrible, y en este caso de industrias que se entretejen, fusionan, entrando en una lógica infernal que ellas mismas aunque lo quisieran o existiesen supuestos sectores más conscientes entre ellas, y donde algunos ponen ilusiones (el capitalismo ruso o chino por ejemplo, el Brics) por meras razones geopolíticas, ya es muy tarde.

Cuarta y última jugada: ya Nicolás hizo lo necesario, se cierran los juegos conspirativos, devolviéndole el poder a la oligarquía…

Sea lo que sea, “el plato está servido”, la obra de neutralización, fragmentación y debilitamiento sistemático de la voluntad y la base material sobre la cual pisó la revolución, para cumplir de lleno el plan conspirativo en todas sus dimensiones, está hecho y proyectado en sus nuevas dimensiones. La última parte, propiamente política, el recambio de los estratos de los que son a la final la misma clase propietaria en el poder, es la jugada necesaria y compleja. Sin entender nada de lo que vino anteriormente para que esto sea posible, con esto nos marean todos los días para que nos quedemos emocionalmente pegados y seguir la confusión. Se trata de la transición hacia un gobierno propiamente de derecha, del estrato “godo” de la sociedad, con el cual sería mucho más cómodo terminar de acometer todo esta épica imperial contra nosotros (Leopoldo López-halcones norteamericanos, Polar-Mendoza, cualquiera). Es precisamente lo que se está “Dialogando”, y donde, como es natural, se mueven pasiones y miedos, avances y retrocesos, negociados que dan un paso y se rompen, lealtades y trampas, pero si a ver vamos, y con más paciencia que los fachos desesperados, “todo va en buen camino”: Leopoldo o cualquiera de estas personalidades inventadas mediáticamente, será efectivamente y cómodamente “nuestro próximo presidente”. Excelente maniquíes o expresiones directas de la godarria banca y acomodada, y seguro que serán increíble e histéricamente aplaudidos.

Los “juegos del hambre”, terminan aquí en un verdadero juego de muerte y el triunfo de unos supuestos rebeldes cuya única rebelión ha sido el odio y la amenaza permanente contra todas las esperanzas liberadoras que tanta y tan larga lucha costaron. Esta “voltereta” de los sueños humanos hacia sus expresiones más conservadoras, miedosas, autoritarias, que no harán otra cosa que seguir profundizando la desigualdad entre nosotrxs, es la operación quirúrgica de la subjetividad para la cual las grandes cofradías del dominio humano, desde las iglesias hasta los imperios viejos y actuales, se han convertido en unos monstruosos especialistas. El “laboratorio venezolano” en ese sentido, hasta los momentos, mientras no aparezca de nuevo la cara aún viva y deseante de la voluntad de ser libre de este pueblo, ha sido su nuevo éxito paso a paso logrado.. Vamos en la próxima entrega con las hipótesis que manejamos respecto a las grandes conexiones internacionales que han manejado este macabro juego conspirativo desde hace tantos años…