Vías de Ecuador cerradas en segundo día de protestas indígenas contra política económica
Indígenas y campesinos seguían este miércoles protagonizando cortes de ruta en varias provincias de Ecuador, en rechazo al aumento de los precios de los combustibles y en medio de un estado de excepción por la violencia del narcotráfico.
La poderosa y opositora Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaie) decidió extender la protesta iniciada el martes, jornada que acabó con un saldo de 37 detenidos, cinco policías heridos y dos militares retenidos por manifestantes, quienes se encontraban en buen estado, según reportó el gobierno.
La Conaie, que participó en revueltas sociales que derrocaron tres presidentes entre 1997 y 2005, montó bloqueos con piedras, tierra, troncos y neumáticos en llama varios puntos la Panamericana, en la salida norte de Quito, constató la AFP.
Los manifestantes talaban árboles de un cerro aledaño para fortalecer las barricadas sobre la Panamericana, la principal arteria que conecta la capital ecuatoriana con Colombia por la zona andina.
“Cerramos los carriles con el material de unas volquetas. El gobierno ha hecho pendejadas con subir a cada rato la gasolina”, expresó Dennis Viteri, un obrero textil de 28 años, a la AFP.
El Servicio Integrado de Seguridad ECU911 también reportó cortes de ruta en las provincias de Imbabura (norte de Quito), Cotopaxi, Tungurahua y Chimborazo (las tres al sur).
Además de los cortes de ruta, el martes hubo una marcha de nativos, obreros, profesores y estudiantes en Quito, en la que se registraron choques con la policía cerca de la sede del Ejecutivo.
Las protestas se desarrollan en medio de un estado de excepción por 60 días decretado por Lasso el 18 de octubre para combatir la criminalidad ligada al narcotráfico, con un repunte de homicidios y masacres carcelarias que este año dejan más de 2.000 muertos en el país.
El gobierno, que también enfrenta una crisis económica agravada por la pandemia, desplegó militares en las calles para apoyar a la policías en el combate a la violencia, sin suspender derechos como los de protesta y reunión.
Tras la jornada del martes, Lasso dijo por Twitter: “Hoy se logró controlar las manifestaciones gracias a un trabajo colaborativo con las fuerzas públicas, quienes velaron por los DDHH de los participantes. Este gobierno garantiza el derecho a la protesta, cuando esta sea pacífica y se dé dentro del marco de la ley”.
- Un “daño al pueblo” -
El anterior gobierno ecuatoriano de Lenín Moreno (2007-2021) buscó eliminar gradualmente los subsidios a los combustibles, medida atada a acuerdos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para recibir préstamos.
La organización indígena lideró violentas protestas en 2019 contra esa medida que dejaron 11 muertos y obligaron a dar marcha atrás a Moreno, quien en mayo de 2020 dictó reajustes mensuales de precios según la cotización del petróleo, que está en alza.
Lasso -que asumió en mayo de 2021- mantuvo ese mecanismo hasta que el pasado fin de semana decretó aumentos de hasta 12% en los combustibles, trepando el diésel de 1,69 a 1,90 dólares y la gasolina corriente de 2,50 a 2,55 dólares.
A pesar de que congeló los nuevos precios sin precisar durante cuánto tiempo, esos incrementos enardecieron el rechazo social en Ecuador, un exportador de crudo que importa combustibles ante la falta de capacidad en sus refinerías.
“Pedimos al gobierno que deje los combustibles a precios justos. No se da cuenta que está haciendo daño al pueblo”, manifestó Juan Chusig, un desempleado que arrastraba ramas para reforzar una barricada en la salida norte de la capital ecuatoriana, sin presencia de la fuerza pública.
La Conaie reclama una reducción de precios a 1,50 dólares para el galón de diésel y a 2,10 dólares para el de gasolina.
- “Vamos a seguir” -
“No tenemos para poder sobrevivir, nos ha afectado demasiado la pandemia, estamos tratando de que se regularice (la situación) y tener una vida digna como nos ofreció el presidente Lasso”, declaró Hermelinda Pilaguano, de 51 años y dirigente del barrio San Francisco de Oyacoto, donde los manifestantes avivaban hogueras.
Patricio Guamán, un artesano de 46 años y vecino de ese mismo barrio, dijo que “vamos a seguir, no vamos a parar porque en sí todo el pueblo se está levantando (…) Todos estamos unidos porque estamos de mal en peor”.
“Fuera Lasso fuera”, coreaban los indígenas, que representan el 7,4% de los 17,7 millones de habitantes, de acuerdo con el último censo de 2010. Pero el dirigente nativo y excandidato presidencial Yaku Pérez sostiene, citando estudios antropológicos, que llegan a un 25%.
Ecuador registra 47% de pobreza y miseria, 28% de subempleo y desempleo, una deuda externa de casi 46.000 millones de dólares (45% del PIB) y un déficit fiscal de 5% del PIB.