Autor: “Maurizio Lazzarato y Antonio Negri”

Trabajo inmaterial. Formas de vida y producción de subjetividad

En el plano ideológico, los diferentes tipos de “resistencias”, podemos fácilmente atribuirlas (sin por ello querer reducirlas) a la hegemonía de una visión teórica, heredada de un cierto marxismo ortodoxo y de una cierta tradición de “movimiento obrero organizado”, que ve la emergencia de la clase (y de sus organizaciones) como una consecuencia de la relación con el capital: identificando el destino de los trabajadores con la relación salarial, hipoteca la vitalidad de las luchas a la evolución de la curva de empleo (formal y preferiblemente de tipo industrial!) De manera paradojal y grotesca, un batallón de críticos fieros del capital acaba postulando que el horizonte de las luchas depende de la sumisión a la “maldición” del trabajo asalariado. Es desde este punto de origen general, que se oscurece cualquier posibilidad de pensar la constitución del trabajo (y por tanto su crítica) “fuera” de la relación con el capital (que se convertiría en la “maldición” del trabajo asalariado “disponible”) y también otros ángulos ideológicos que hacen del trabajo material un valor en sí. Estos recusan el concepto de trabajo inmaterial por el simple hecho de que continúan repitiendo el enredo de un “desenvolvimiento de las fuerzas productivas (que) posibilitan la ruptura con las antiguas concepciones religiosas” (Lessa, 2000, p. 43) y de una noción de trabajo que termina reivindicándose en el método marxista (la centralidad ontológica del trabajo), o subordina la instrumentalización dinámica y técnica (y de sus “transformaciones de la naturaleza”).