Autor: “UST”

La finca amurallada

Hasta hace poco tiempo no parecía haber opción. Se votaba por el menos malo o para evitar que llegara alguien peor. Pero hoy existe un camino alternativo. La resistencia organizada toma ya forma y perfil. La respuesta está en el aire. Viene de abajo.


Entre miedo y esperanza

La esperanza humilde de quien confía en los dones de la naturaleza y en la capacidad de hombres y mujeres ordinarios de organizarse, actuar conjuntamente y hacer las cosas que tienen sentido


Amurallados

Clases políticas de todos los colores ideológicos nos siguen conduciendo a la barbarie. Disputan entre sí el control relativo que aún tienen sobre los dispositivos de la opresión e intentan sembrar la ilusión de que sustituir a quienes actualmente los manejan podría darles otro sentido. Lejos de conducir a la emancipación, adoptar ese camino nos hundiría aún más en la barbarie actual. Por eso va quedando claro que nuestra esperanza no puede venir de arriba. Por eso mismo, aumenta cada día el número de quienes abrigan esa esperanza, para que no se enfríe, nutriéndola desde abajo.


México: La capacidad de respuesta

Los maestros se reorganizan. Están modificando con sentido autocrítico estrategias que los alejaron de padres y comunidades y les crearon un clima social adverso, agudizado por la propaganda gubernamental. Se acercan a ellos de nuevo para mostrar que la lucha actual no es meramente gremial, sino una lucha social y política por la supervivencia.


La lucha interna

La presión externa es formidable y seguirá aumentando. Pero el enemigo principal está adentro… a menudo plenamente internalizado.


Aprender libertad

La propuesta del CNI es sobre todo una invitación a luchar por la libertad. Hoy. Aquí. Ahora. No a partir de mayo, durante la campaña o después de las elecciones. En todo momento. En todo lugar. Y eso exige, ante todo, aprender a identificar las rejas que nos mantienen en una prisión.


Aprender a gobernarnos

El país tiene aún inmensas reservas de saber autónomo. Que en las capas populares esa posibilidad colectiva de gobierno propio ha sido condición de supervivencia. Y que si lidiamos con la tormenta de ese modo, practicando a todos los niveles formas propias de autogobierno, organizándonos para eso, estaremos preparados para hacer lo que tenemos que hacer dentro de 18 meses.


México: El Consejo de Gobierno de los autogobiernos

Propuesta audaz de las autonomías autogobernadas para levantar la candidata indígena a las elecciones presidenciales desde las experiencias mismas, mostradas y demostradas en su capacidad real de gobierno democrático.


Encrucijada

A ras de tierra, en la vida cotidiana, la gente construye autonomía y rompe, pasito a pasito, su dependencia del mercado y del Estado. Se ocupa por sí misma de comer, sanar, aprender, habitar.
La esperanza surge, sobre todo, cuando se observa cada día que alguna persona ha logrado al fin vencer al fascista que todos llevamos dentro, el que nos hace desear que alguien gobierne nuestra vida. Cada día, alguien, muchos, millones, empiezan a concebir y llevar a la práctica formas comunales de gobernar su propia vida.


México: Profundizar la rebelión política en curso

Ante la tormenta, en este momento de peligro, es urgente profundizar la rebelión política en curso. Pero no será fácil. Se intensifican arriba y abajo esfuerzos por detenerla o mutilarla.
Para profundizar la rebelión política en curso y escapar a la simulación con que se intenta impedirla, es indispensable desgarrar ese marco mental. La propuesta del CNI proviene de otro marco y se basa en otra experiencia; ambos son parte y expresión del empeño descolonizador y emancipador, antirracista, anticapitalista y antipatriarcal que se ha formado bajo la tormenta.


La hora de la autonomía

La lucha por la autonomía en la América Latina se libra entre quienes la afirman en sus propios espacios, particularmente entre los pueblos originarios, y la proyectan al conjunto de la sociedad, y quienes
buscan regularla y controlarla dentro del régimen existente, como una forma de descentralización política de los poderes verticales del Estado.


México: Hora de imaginar y actuar

Contar con un consejo de gobierno en que todas y todos podamos ver en qué consiste la integridad moral, la digna rabia, el talento desinteresado de servir. Ante la fragmentación creciente del país y de las organizaciones, podría crearse al fin un dispositivo eficaz y confiable de articulación, para enfrentar concertadamente la violencia y el despojo que nos abruman. Se tratará de ponernos a trabajar, organizadamente, para cuidar la vida y proteger lo que aún tenemos de los vándalos corruptos que arrasan todo a su paso, sin importarles lo que queda del país, la Madre Tierra y la vida de todas y todos.


Hora de escuchar

Pedir al gobierno federal que se vaya y al estatal que se haga a un lado, porque no saben gobernar al pueblo de Oaxaca.


Gobernarnos

Ante el desastre que se perfila, la fuente de esperanza puede estar en la posibilidad de que la propia gente ejerza desde abajo capacidad de gobierno, al constatar que arriba se perdió esa capacidad.


La batalla de Oaxaca

Minutos antes de la masacre que dejó 6 muertos y más de cien heridos, el autor escribe estas notas:
Oaxaca está ardiendo. Hay conciencia clara del momento de peligro. Por eso, desde todos sus rincones, se apela hoy al coraje, tanto al que expresa la indignación moral que comparte un número creciente de personas como el que significa valor, entereza, capacidad de caminar con dignidad y lucidez en estos tiempos oscuros. La batalla acaba de comenzar.


Al derecho y al revés

Reconstruir hoy, como expresión suprema de resistencia, no es reparar o remediar instituciones cada vez más contraproductivas, amenazantes e irracionales. En rigor, nada puede salvarlas.
Lo que ha de reconstruirse no está ahí, sino abajo.
Reconstruir o reformular nuestras propias normas en comunidades y barrios, en el seno de nuestras organizaciones renovadas.
En el tejido apretado de hombres y mujeres reales que se conocen entre sí, que pueden ver lo que son en los ojos del otro, de la otra, en los espacios en que nosotrear es un estado de cosas y una manera de ser, podemos seriamente decir la verdad, decírnosla.
El empeño autónomo organizado, el que viene de abajo, el que se afirma en la dignidad ante todos los desastres y sabe que vivir es luchar, se extiende cada vez más y empieza a aparecer como una red de refugios interconectados y autosuficientes en medio de la tormenta que anuncian ya otra posibilidad.


Comienza en México la Campaña Nacional en Defensa de la Madre Tierra y el Territorio

Autonomía de comunidades y barrios que establecen sus propias normas de comportamiento y convivencia.


La separación entre la vida privada y la vida pública

Tendríamos que aspirar a que no hubiera más moral del comportamiento del Individuo, de la Persona, que nos importa un bledo: que se tratara, simplemente, del comportamiento y de la vida de la comunidad, de lo común. Eso quiere decir romper este sacramento, que es el principal del Régimen, de la separación entre la vida privada y la vida pública.
De qué diablos nos sirve que aquí discutamos grandes cosas contra el Estado, contra el Capital, que examinemos con cierta lucidez los mecanismos de esos mostruos que nos oprimen, si luego llegamos a casa y nos encerramos a reproducir el individualismo.
Nos tienen viviendo como fragmentos del común mirándonos al espejo roto de Narciso para saber cual es la más bonita o el más macho.


México: Tejidos de resistencia. Ante la militarización de Oaxaca, Defensa Comunitaria

Conozca la “Guía para la Defensa Comunitaria”


La resistencia a obedecer

Revolucionar significa que al fin sabemos que no hacen falta líderes, plataformas, partidos, estrategias o programas revolucionarios. Y que no se trata de tomar o destruir los aparatos podridos de la dominación; de conquistar el “capital”, como si fuera una cosa, no una relación.