Autor: “Salva”
Progresista del orden y progresista anti sistema plurinacional, el juego latinoamericano de la renovación sin cambios
Para la izquierda latinoamericana, la formación del gabinete de Gabriel Boric en enero de 2022 dejó la foto de la nueva ministra de defensa, Maya Fernández Allende cuando era bebé, en brazos de su abuelo Salvador Allende. Estará a cargo del ejército de Pinochet, que derrocó a su abuelo. Para los mercados chilenos, lo que se transmitía era el nombramiento de Mario Marcel como ministro de economía, ex presidente del Banco Central y “de credo Neoliberal”, según definió Daniel Jadue del Partido Comunista, participante de la coalición de gobierno junto al Frente Amplio.
El Salvador: La lucha por el sitio Tacushcalco
El Pueblo Indígena “Nahua Pipil”, a través de sus organizaciones indígenas y campesinas en la región cultural conocida como “Los Izalcos”, del departamento de Sonsonate al occidente de El Salvador, lucha actualmente por la defensa de sus territorios ancestrales, de sus bienes naturales y culturales, y por la defensa de su identidad cultural indígena. Este pueblo lleva 500 años resistiendo los embates del despojo y el saqueo de sus territorios.
Por una política de luchas reales y no de grandes molinos de viento
¿Vivimos tiempos de cambio político? Dependiendo de la óptica puede parecer que los tiempos se aceleran y nada permanece, pero también que nada va a cambiar. ¿Cómo pensar la actualidad latinoamericana a contramarcha de esa sentencia? Hay resistencia, siempre, pero ¿qué horizontes aparecen más allá de la continuidad? ¿De la renuncia nihilista o, pero, de integrarse a las filas de los que gobiernan sin cuestionar?
La elección de 2018 en Brasil y el neoliberalismo sudamericano como fantasma
López Obrador, en México, muestra un camino, que si se fuera posible en Sudamérica, tendría mucho de repetición en relación al ciclo de gobiernos progresistas concluido en varios países. Con sus ministros-empresarios y propuestas dirigidas a mejorar el funcionamiento del capitalismo nacional, el paralelo con Lula es claro.
Sobre el Marx tardío. Reseña del libro “Marx y Rusia” (2022), de Carlos Taibo
El verdadero capitalismo y el falso socialismo amenazan ambos la existencia física y espiritual de la especie humana, permanentemente entregada a la destrucción por la técnica y por la guerra. Aunque rivales, en esos dos órdenes sociales la fabricación de mitos persigue el mismo objetivo: enmascarar la verdad en provecho del beneficio y del poder.
Kurhamutsperakua Juchari Ireta. Ir obedeciendo a la comunidad
La memoria es identidad. K’eri Ireta, la expresión con que otras comunidades conocen a Cherán, se volvió a repetir el viernes 15 de abril de 2011: Cherán K’eri, comunidad mayor o Cherán grande. Por ello, nuevamente reafirmamos la actitud de reivindicar la dignidad de nuestros abuelos, la del pueblo p’urhépecha. Asimismo, contamos los acontecimientos presentes en un procesode identificación y memoria del “nosotros”, desde un México que no está completo del todo, porque no contempla el derecho de los pueblos. En México, y en Michoacán en particular, existe una subordinación institucional universal y una negación histórica de los derechos de nuestros pueblos.
El “fin de ciclo” progresista y sus derivas (Partes 1 y 2)
Todo ejercicio de poder, todo gobierno se para sobre lo posible, pero el progresismo latinoamericano hizo de ese lugar una narrativa militante. La figura de la “correlación de fuerzas” se utiliza de manera abstracta y amañada. Frase de mago, abracadabra que, al pronunciarse, nos paraliza. Le pone nombre, justificándola, a la desmovilización social.
O avanço conservador contra a autonomia e pluralidade indígena no Brasil
A situação dos povos indígenas no Brasil se encontra atravessada pela urgência. As armas que sustentaram os golpes do desenvolvimento” brasileiro contra os povos indígenas nas últimas décadas - incluindo as normas, as fraudes, e a violência nua - hoje estão ainda mais articuladas e explícitas, e se apresentam como projeto político de destruição do marco normativo de proteção estatal dos índios. Diante da guerra declarada, o movimento indígena promove um processo incessante de reflexão, (re)organização e resistência.
Territorialidad Indígena enfrenta expansión del agro en la corte suprema brasileña
La tesis que es juzgada, conocida como “marco temporal”, impone la fecha de promulgación de la Constitución, en octubre de 1988, como límite administrativo para solicitar el reconocimiento de tierras. Es la traducción jurídica de la presión económica y propietaria para interrumpir procesos no iniciados ni resueltos hasta la actualidad, blindando especialmente las regiones “productivas” o potencialmente atractivas para el capitalismo rural.Por dentro, pero también por fuera de la lógica estatal y del derecho donde hoy se da la pelea, los pueblos nos enseñan un mundo que no es una versión “cultural” del nuestro, sino otro, que resiste hace milenios y, aunque la ley beneficie el despojo, no ha podido ser definitivamente pacificado.
El paro nacional de colombia y los movimientos sociales en medio de la lluvia de oportunismos electorales
Quizás uno de los grandes retos de estos movimientos sociales emergentes, que se articulan en enjambres de acción colectiva esta en como ajustar de manera justa su horizontalidad constitutiva para poder ensamblar estrategias de representación y accionar colaborativo de cara al juego de poderes que busca mantener el status quo aún a costa de la sociedad misma.
La Convención chilena y el desafío arduo de ser constituyente por un camino de lucha y reinvención
No se trata de los representantes individuales que decidirán qué forma tendrá el país, con el riesgo siempre latente de que la constitucionalización sea ficticia, utópica y lejana de un constitucionalismo material, efectivo, dado por la estructuración del mundo y que no pasa por convenciones ni se detiene en simbolismos. La relación entre una Constitución formal y otra informal realmente existente es algo a construir políticamente, la misma no es dada y puede ser tenue, si la Convención se queda en declaraciones y politiquería.
El “fin de ciclo” progresista y sus derivas (parte II)
Algo se mueve por fuera de lo posible, ¿algo imposible? Entre la máquina neoliberal y su “There is no alternative” implícito –o incluso fracasado neoliberalismo devenido refeudalización corporativista– y el posibilismo progresista, suerte de liberalismo sensiblero, izquierda que ladra, pero no muerde; es decir, entre el realismo de la impotencia y el realismo político, se cuela una potencia que busca su propia realidad.
A educarse, compañeros. Aula magistral: Las varias caras progresistas en campaña sucia contra el candidato indígena del Ecuador
La solución de Katz y otros apunta a Bolivia, donde “los líderes del MAS introdujeron el Estado plurinacional, el respecto a las lenguas y costumbres de las comunidades y la orgullosa reivindicación de la tradición indigenista”. Para ellos es la incorporación de la agenda indígena para poder proseguir con la agenda del desarrollo. Desde el seguimiento de los procesos políticos sólo puede significar intervenir desde el Estado em el movimiento indígena para dividirlo y, quitando del camino elementos de resistencia y lucha contra el modelo extractivista, conceder reformas cosméticas mientras el modelo basado en negocios privados o del Estado en la explotación de recursos naturales se desarrolla con la fuerza y legitimidad hegemónica que hoy en América Latina el progresismo constata que ha perdido.
El “fin de ciclo” progresista y sus derivas (parte I)
La posición realista formo parte también de la contestación, se montó sobre el deseo multitudinario de salir de un estado de situación asfixiante, tanto como en la capacidad de múltiples espacios, colectivos, tramas más o menos amplias, de impugnar la experiencia neoliberal y explorar otros caminos. Sólo que, si en el primer caso, el realismo tuvo que ver con el dinamismo de las lógicas financieras, empresariales, corporativas o incluso policiales; el más reciente realismo de raigambre popular, aletargó todo signo de dinamismo de ese deseo multitudinario más o menos organizado.
La muerte del Mallku y la revolución india que no fue
Como forma de expresión de las comunidades en su tránsito entre el campo y la ciudad, el indianismo fundó partidos, radios, revistas, participó de gobiernos, propuso política agrícola y también se involucró en la lucha armada. El indianismo se relaciona también con una espiritualidad y visión de mundo propia de los Andes. También tuvo expresiones filosóficas, de pensamiento histórico y político. Habiendo nacido cerca del sindicalismo campesino, cuenta también en sus filas con iniciativas que desde los años 90 rechazan la forma sindicato en una búsqueda de reconstrucción local de instituciones ancestrales desde el territorio, en busca de reconocimiento estatal pero sin disputar sus instituciones.
La política sudamericana como péndulo inestable
Sudamérica terminaba 2019 con revueltas en las calles e inestabilidad política. La inestabilidad mostraba un campo de indefinición sin tendencia común ni nuevo paradigma que unificara la política regional en una única dirección. Al margen de la economía, con situaciones variables en los distintos países, lo que parecía una constante es que los arreglos políticos e institucionales que acompañaron al neoliberalismo en las últimas décadas, tanto en sus versiones de liberalismo pro mercado, como en la socialdemocracia o el progresismo, se muestran agotadas.
El trabajo abusivo y precario del capitalismo de plataforma y apps
La pandemia direccionó la atención de muchos para las empresas de plataforma y aplicaciones informáticas, con gran crecimiento reciente por ocuparse de servicios online que se destacaron con el confinamiento. El llamado capitalismo de plataforma o digital, gig economy, industria 4.0 ya mostraba una alta valorización de empresas de transporte, comunicaciones, redes sociales, comercio online, entretenimiento, software, infraestructura de red, inteligencia artificial, y muchos otros servicios antes del COVID-19, pero la pandemia permitió un nuevo impulso y crecimiento de la especulación financiera vinculada a este sector de la economía.
Las plantas y los animales en el centro de una nueva sensibilidad subversiva
Se percibe actualmente una confluencia de intereses de investigación académica, activismo político, reflexión ética o filosófica, trabajos de arte o inspiración literaria, derecho y ciencias naturales en lo que se puede entender como un cambio en el lugar atribuido por la cultura y la ciencia occidental a plantas y animales; así como a la propia idea de lo que se entiende por vivir.
Sentidos de la elección boliviana
Pero no puede dejar de observarse que la opción del MAS y Evo Morales, no es el de la profundización de un proceso de cambios a partir de reformas, tampoco una vuelta a las bases, como partido movimiento o retorno a las banderas de lo plurinacional, lo comunitario, la autonomía. El gobierno, y también el voto de la mayoría, consagra un MAS que asume su lugar de administrador de la sociedad actual. En la confrontación discursiva con la derecha boliviana y regional, el MAS se presenta como buen gestor, garante de estabilidad para que inversiones, negocios y emprendedorismo prolifere.
Peripecias del Sur y Autonomía: Conflicto y política sudamericana
Ni la oposición partidaria del progresismo desplazado en Bolivia o Brasil, ni el gobierno de la Argentina, ni las nuevas izquierdas como el PSOL en Brasil, los Frentes Amplios de Perú y Chile, o los restos del correísmo y del Frente Amplio en Ecuador y Uruguay han generado fuerza social que permita imaginar la construcción de una sociedad diferente. Todas esas fuerzas alimentan el Estado en oposiciones o gobiernos que se vuelven administradores sin margen de acción, o actúan apenas en el plano de la denuncia discursiva. El desafío es justamente esa fuerza social que no sea gobernada, que sea ella misma la que decide por sí y mantiene el poder en manos de todos.