Autor: “Raúl Zibech”
¿Cómo abrazarnos desde abajo? Las autonomías después del progresismo
Luego de una larga década de gobiernos progresistas, los debates sobre la autonomía y las prácticas autonómicas parecen haber mutado; abandonaron el escenario y se han refugiado en los pliegues menos visibles de los movimientos anti-sistémicos.
La mente piensa con ideas, no con información
En reciente entrevista el filósofo alemán nacido en Corea del Sur, Byun-Chuk Han, señala: “Estamos muy bien informados, pero de alguna manera no podemos orientarnos”. Sus argumentos sobre las consecuencias sociales de la sobreinformación que padecemos ya habían sido analizados en su libro Infrocracia, publicado un año atrás.
Salud rebelde y movimientos anti-capitalistas
Hace más de medio siglo el partido Panteras Negras fue, probablemente, una de las primeras organizaciones en poner en marcha un sistema de salud alternativa a la del sistema hegemónico. El folleto “Autodefensa médica. Panteras Negras y zapatistas”*, no sólo revela las similitudes entre ambas experiencias en la salud, sino que detalla los logros del movimiento negro estadounidense.
El inevitable retorno de las primaveras
Hacía años que el auditorio del Cideci no lucía desbordado. Como siempre, de pueblos, de mujeres y varones de abajo, de veteranos luchadores sociales, de jóvenas que se acercan a estos eventos engalanadas de rebeldías. Cada quien ocupaba su sitio: en las primeras filas los pueblos y organizaciones que participaron en la caravana El Sur Resiste; en la segunda fila, invitados e invitadas, y al final las delegaciones internacionales. Bettina Cruz abrió el encuentro nacional el 5 de mayo, en una mesa presidida por las mujeres que coordinaron la caravana, bajo el lema “Capitalismo corporativo mundial, patriarcado planetario, autonomías en rebeldía”.
México: Caravana El Sur Resiste
El jueves 4 de mayo finalizó el recorrido de la caravana El Sur Resiste, organizada por las agrupaciones locales del Congreso Nacional Indígena (CNI). Luego de recorrer siete estados y decenas de espacios que resisten el extractivismo y los megaproyectos del capital, de escuchar cientos de voces de pueblos originarios y de sectores populares, llega a San Cristóbal de las Casas, donde se celebrará un foro internacional los días 6 y 7 de este mes.
Aprendizajes históricos para un nuevo ciclo revolucionario
Desde la revolución rusa de 1917 contamos con un siglo de experincias revolucionarias triunfantes. Un tiempo suficiente como para sacar algunas conclusiones o para adelantar reflexiones acerca de los límites y problemas que han enfrentado estas experiencias que, en su conjunto, involucran una parte importante de la humanidad. Unas cuantas fueron motivo de debate entre intelectuales y militantes. Otras son más polémicas y se circunscriben a la experiencia latinoamericana.
México. Comunidades de Los Panchos: Crecer hacia adentro
Los nueve espacios urbanos de la Organización Popular Francisco Villa de la Izquierda Independiente (OPFVII) consiguieron el milagro de salir de la pandemia y de los cinco años de gobierno “progresista” –dos infortunios que afectan especialmente a los sectores populares organizados- más fuertes y autónomos, gracias al despliegue de toda su capacidad de construcción colectiva.
Bolivia: El Estado Plurinacional sirvió para someter más a los pueblos indígenas
“Evo ha sido uno de los verdugos más implacables que hemos tenido los pueblos indígenas, porque ha destruido todo lo que teníamos, ha destruido las organizaciones, la unidad de los pueblos, ha cooptado, ha dividido, ha reprimido. Lo que los gobiernos neoliberales de derecha no han sido capaces de hacer, lo hicieron estos gobiernos de los últimos 16 años”.
Los pueblos podemos neutralizar la inteligencia artificial
Sí es posible defendernos de los algoritmos y de la inteligencia artificial que no sólo domina sino que está destruyendo nuestras sociedades. No podemos estar inermes ante ese afuera demoledor dominado por el capital financiero porque destruye la vida material y espiritual de los pueblos. No veo otro modo que poner límites, fronteras materiales y virtuales para preservarnos y seguir construyendo mundos otros.
Extractivismo rima con militarismo
Algunos hechos muy recientes en nuestro continente suponen una vuelta de tuerca en la militarización de los bienes comunes, ya sea por la vía “legal” o de facto, de la mano de los gobiernos y sus fuerzas armadas o de actores armados “irregulares” que campean a sus anchas cuando los estados les permiten.
La semana pasada se conoció que el gobierno argentino, a través del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, anunció “ocho planes de campaña” que implican la militarización de áreas de “recursos naturales y espacios soberanos”,
Potencias y límites de las manifestaciones
En 2003, millones de personas ganaron las calles de muchas ciudades del mundo para protestar contra la invasión de Irak por Estados Unidos, pergeñada con el falso argumento de la existencia de armas de destrucción masiva. Ese mismo año, un artículo en The New York Times señalaba que la opinión pública global se había convertido en la “segunda superpotencia”. Dos décadas después, las cosas han cambiado drásticamente; 3.5 millones de manifestantes en las calles de Francia no consiguieron impedir que el gobierno terminara imponiéndola, pasando por encima de la opinión pública y del parlamento.
Nicaragua: No está loca. No están locos
La “locura” no está en los métodos ni en la cantidad de asesinados (cuestión que ya de por sí es gravísima), como suelen destacar los medios del sistema. Está en los objetivos. Murillo dice que estará en el poder “para siempre”, y ese es el punto. Ella es perfectamente racional y de una lógica implacable, si su objetivo es perpetuarse en el poder.
La izquierda latinoamericana de espaldas a la dictadura de Nicaragua
La izquierda del continente se fue distanciando gradualmente del régimen, a tal punto que ninguna fuerza o personalidad significativa lo defiende y el gobierno Ortega-Murillo está ausente en las cumbres y reuniones regionales para evitar la condena. Comprender las razones de la conversión de la revolución en dictadura está siendo sin embargo una empresa más compleja, aunque se evidencian algunos avances.
Las guerras de arriba y las resistencias de los pueblos
Si es cierto que “no habrá paisaje después de la batalla”, como dijo el EZLN un año atrás, confiamos en que nuestras arcas construidas con trabajos colectivos y levantadas con solidaridad y hermanamiento serán capaces de seguir navegando aún cuando los oleajes de las guerras sigan dejando su estela de destrucción y muerte.
Democracia y manipulación de la opinión pública
La forma más adecuada para garantizar la estabilidad gubernamental ha sido, hasta ahora, la democracia controlada o democracia de baja intensidad. Un sistema que consigue la estabilidad a través de la desinformación que promueven los medios de comunicación monopolizados, que se está revelando como más eficiente que las dictaduras.
Migraciones y movimientos
Los movimientos sociales (sociedades en movimiento, pueblos en movimiento), los sujetos colectivos en lucha por mundos nuevos, son en gran medida hijos de las migraciones. Cambiar el lugar material y simbólico heredado, es el primer paso para cambiar el mundo. La resistencia al capital para defender la vida, nos exige colocar en primer lugar a aquellos sujetos colectivos que se mueven porque no tienen nada que perder, salvo el ser pueblos y vivir en comunidad. Todo lo demás, incluyendo la tierra y los más variados bienes materiales, pueden ser abandonados para preservar la vida, en movimiento perpetuo.
Nicaragua: La perversidad del poder
Cuando decimos que no queremos tomar el poder, estamos diciendo que no aspiramos a ser poder sino a construir un mundo nuevo, con poderes de abajo, como las Juntas de Buen Gobierno, que son poderes colectivos que rotan cada semana, estamos hablando justamente de esto.
De superar en nuestras relaciones el colonialismo y el patriarcado. De vivir de forma no capitalista, de no acumular ni bienes materiales no poder, ni nada que sirva para establecer relaciones asimétricas. Por eso mandar obedeciendo. Por eso bajar y no subir.
La descomposición de la democracia
Existe consenso en cuanto a la conveniencia de la democracia y el rechazo a la dictadura. Pero este consenso oculta ideas opuestas sobre qué entendemos por democracia y dónde ponemos el énfasis: desde quienes priorizan el sistema electoral y el sufragio hasta quienes entienden por democracia “un auténtico reparto igualitario del poder” (Immanuel Wallerstein).
Ordenar (algo) el caos sistémico
El mundo del crimen (entendido como el conjunto de la acumulación por despojo), diluye las fronteras entre trabajador y delincuente, entre legalidad e ilegalidad. Una vez disuelto aquel mundo cohesionado de la sociedad salarial, “a través de las guerras en curso”, la sociedad está en proceso de reorganización.
El extractivismo como cultura
El modelo extractivo es mucho más que una política económica. En el libro “No secarán la tierra”, de la editorial Grito Manso, Raúl Zibechi afirma que la explotación de la naturaleza es reflejo de un modo de pensar y actuar que domina mentes, cuerpos y sociedades. Las diferencias con las luchas obreras del siglo XX y los actuales espacios que construyen alternativas.