Artículos de: 22 Abril 2020

Manifiesto del Día de la Tierra - 22 de abril 2020. Un planeta, una salud. Haciendo la paz con la tierra

Esta pandemia no es un “desastre natural”, al igual que la crisis de la extinción de especies y los extremos climáticos no son “desastres naturales”. Las epidemias de enfermedades emergentes son antropogénicas -causadas por actividades humanas.

Firman más de 350 personas, organizaciones y comunidades de 40 países


Venezuela en dos realidades: la lucha por el poder entre las elites, y la lucha del pueblo por sobrevivir en medio del colapso

Este ex guerrillero que no se ha sumado a la izquierda en el poder relata que la elite madurista continúa con el saqueo de lo poco que queda del erario público, a nombre de un falso o inexistente socialismo, y justificándose en las sanciones y amenazas del imperialista Trump. Y el guaidosismo en todas sus vertientes (incluyendo a los tránsfugas comprados por Maduro) sigue viviendo de su imaginaria cruzada anticomunista, suspirando todos los días por la invasión de los rubios marines imperiales, mientras disfrutan de los dólares mal habidos al confiscar bienes de la nación en el extranjero.
En algún momento de la historia, el pueblo venezolano reaccionará y se quitará de encima a ambas elites parásitas, corruptas y antinacionales.


Disturbios en varios lugares de Colombia. Población que no tiene como hacer ingresos ya está pasando hambre.

Bloqueos de rutas, saqueos y manifestaciones en varias ciudades
¿Ola que comienza?


Capitalismo, reproducción y cuarentena

Antes del neoliberalismo existieron pequeñas clínicas, lugares, donde una persona podía ir si tenía problemas, sin necesidad de ir al hospital. En esta estructura se podía ejercitar también un mayor control sobre el tipo de cuidado que nos dan, que necesitamos. Se podría establecer un intercambio entre la gente del barrio, de la comunidad, con quienes trabajan en las instituciones.
Necesitamos revitalizar esta estructura.
Se siente aquí en Federici la ausencia de la invitación para aprovechar la cuarentena en modificar las relaciones internas en los hogares y núcleos afectivos y así transitar de la verticalidad patriarcal a la horizontalidad de un espacio de vida compartido y democratizado elevando la noción del sujeto nosotros por encima de los sujetos “yo”. De esa manera esta cuarentena puede poner en cuestión la base orgánica de la sociedad patriarcal: el carácter de sometimiento y posesividad de la pareja hetero-patriarcal, del matrimonio y la familia, abriendo paso a la concepción más profunda, más libre, de especie natural, del amor, el afecto, la reproducción y la comunidad humana en su similitud con los hormigueros y enjambres. Aunque sabemos las dificultades de encarar a ese peligroso caballo de Troya -o virus- que es el ego individualista producido en esta sociedad patriarcal, avazando en este encierro hacia el común, que afortunadamente Federici rescata de Raquel Gutiérrez distanciándose ambas de “los comunes” tan manoseados y manipulados que hacen nata en España y otros lugares